viernes. 19.04.2024
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El recuerdo de la primera feria de Zufre

El alcalde-presidente, José Navarro, organizó en 1931 la primera iniciativa lúdica sobre el llano del Antiguo Desfiladero de las Grajas
El recuerdo de la primera feria de Zufre

El Paseo de los Alcaldes es una de las zonas emblemáticas de la localidad de Zufre. Su protagonismo en la vida de los vecinos en muy diversos ámbitos y etapas históricas, tanto en su actual estado como en estéticas anteriores. Hoy recogemos aquella ubicación de la primera feria zufreña en este espacio público, que tuvo lugar en septiembre de 1931, según la investigación de Santiago González.

Fue entonces cuando el alcalde-presidente, José Navarro, organizó esta primera iniciativa lúdica sobre el llano del Antiguo Desfiladero de las Grajas, tres pequeños huertos que fueron adquiridos meses antes a sus propietarios, “uno de los mayores aciertos en la historia moderna de este pueblo”, según González Flores. El alcalde inició las adquisición y obras del paseo con la explanación, el levantamiento de un muro y su relleno. Aunque el aspecto de aquel primitivo espacio no se asemeja al actual, siendo probablemente un lugar baldío, lleno de barrancos, monte en algunas zonas, huertos en otras, inserto en el denominado ‘Desfiladero de las grajas’, la ubicación de la feria ya presagiaba la importancia que el paseo tendría en el futuro.

No faltaron las críticas, tachando a la Corporación de la época de vacía, falta de interés por haber adquirido esas propiedades, absurda por el qué iban a hacer y otras razones peyorativas.

Sin embargo, la feria cosechó un gran éxito. Se comenzó a llamar la Feria del Llano desde su primera edición debido a la proximidad de la zona con el Llano de San Luis, junto a la actual cooperativa. Contó con atracciones como volanderas y fantoches, o globos de papel que con una vela en su interior ascendían sin rumbo fijo.

Entre las actividades de entonces, se recuerda a la banda de música de Nerva, que amenizaba las tardes bien sobre el Tablao de la Quebrada o la taberna de Justo, un garito improvisado de tablas que, al menos en 1931, se levantó junto al antiguo lavadero de las escuelas, hoy dentro de los jardines de Pablo Blanco.

La Feria, muy diferente a la concepción que hoy se tiene de ella, era sobre todo un lugar de encuentros y relaciones; tal era esta oportunidad para los vecinos, que muchos noviazgos y bodas se formalizaban durante esas semanas.

En plena decadencia, la feria ganadera del Ejido, sólo reunía a pequeños propietarios que a duras penas conseguían que el pueblo bajase a la Cerca de San Sebastián, conocida por ‘Las Lucas’, en referencia a sus propietarias las hermanas del cura José María Labrador.

Este espacio que dio origen a la feria zufreña, posteriormente fue convertido en uno de los paseos y espacios públicos más imponentes de toda la comarca serrana. Algunos de sus adornos o ‘pirulos’, proceden de los años 50 del siglo XX, como recoge la fotografía publicada y cedida por Santiago González.

Otros mandatarios continuaron la mejora de este primer espacio, como Andrés Pascual, tras la Guerra Civil. En aquel momento, se retomó el proyecto original de José Granados de la Vega, fechado en 1931, sobre el que se realizaron varias modificaciones, como el paso de dos a tres fachadas monumentales, la supresión de la biblioteca al aire libre, o el mantenimiento de la fuente central como eje del conjunto. En estas obras participaron maestros albañiles locales, como los Alfonso, y, en última hora, Santiago Flores.