viernes. 19.04.2024
El tiempo

"Hogar: Documental es un diálogo sin miedo, sin vergüenza, hecho con honestidad y respeto"

Michele Novovitch y David Morano han pergeñado Hogar, un proyecto documental muy cinematográfico que pretende navegar por las turbulencias y recuerdos de la Guerra Civil en el mundo rural. El documento se financia con la voluntad de lo que obtengan en la red. Es un crowdfunding, un micromecenazgo.
"Hogar: Documental es un diálogo sin miedo, sin vergüenza, hecho con honestidad y respeto"

Fue George Collier, profesor de Antropología en la Universidad de Stanford (California, EE UU) el que allá por 1963 desgranó en el libro Socialistas de la Andalucía Rural (Ed Anthropos) lo que él mismo llamó “el exterminio de los socialistas” en el mundo rural en 1936 a manos de los seguidores del golpe de estado del general Franco. Después, en 1980, el director de cine onubense Fernando Ruiz Vergara (Huelva, 1942-Escalos de Baixo, Portugal, 2011) se había enfrentado con la cámara en su documental Rocío al ingrato y difícil trabajo de recuperar la memoria perdida durante el franquismo. La de Vergara fue la primera película secuestrada judicialmente en el Estado español tras la derogación de la censura cinematográfica de 1977. Fue condenado por ello ya con un Gobierno socialista en el poder. Hasta tal punto que se auto-exilió en Portugal hasta su fallecimiento.  Ambos, Collier desde las letras y Vergara desde el cine documental, se sumergieron en lo que se ha dado en llamar la inmersión en los sentimientos.

Aquel libro, rodado, escrito en Los Olivos (Linares, Alájar… porque Los Olivos en realidad eran todos un poco) fue junto al largometraje Rocío y los enormes textos de Francisco Espinosa (La Guerra Civil en Huelva, La Columna de la muerte) el periscopio que comenzó a asomar en las casas, en los zaguanes de los pueblos para contar y desvelar lo que había sido ocultado durante cuarenta años de oprobio, de Dictadura militar.

Ahora, medio siglo después de aquel estudio académico 'rodado' en la Sierra de Huelva, treinta años más tarde del documental Rocío se nos presenta un proyecto documental que no existe pero quiere existir. Hogar

Michele Novovitch y David Morano han pergeñado Hogar, un proyecto documental que pretende navegar por las turbulencias y recuerdos de la Guerra Civil en el mundo rural. Dos jóvenes, licenciados en Filosofía, doctorando en Derechos Humanos, en el caso de David; y Máster en Imagen en lo que atañe a Michele.

- Pero todo tiene un origen. Este documental también...

David. “He sentido desde pequeño la Guerra Civil, sus sombras… la gente siempre contando las historias en presente. Porque de los que hablaban estaban allí. En una de esas visitas de Michele a Alájar decidimos ir puerta a puerta y lo que nos encontramos nos cambió por completo la forma de ver la vida”.

- Ay! Alájar, ya se la cambió a Gonzalo Bendala cuando en 2003 rodó allí su premiado corto Días Rojos. Es verdad, la realidad muestra la vida tal y como es. Tiene esas cosas.

David: “Se te caen los prejuicios. Esas conversaciones con la gente nos enseñaron de verdad lo que es una guerra. Porque donde se siente de veras es en casa, en el campo, en la tierra”.

-Luego, cuando veo a autores como Francisco Espinosa, desde Todoslosnombres.org, investigadoras, como la profesora Dulce Simoes, o yo mismo promocionar el documental, se ve que el pálpito de la tierra está ahí, se oye su rumor.

Michele: “Detrás del rodaje hay un trabajo exhaustivo de documentación, de información. Hemos recorrido la Sierra a dedo. No tenemos carnet de conducir. Ahora tenemos un mes para recaudar los 32.000 euros que necesitamos. No queremos apoyo de instituciones, nos lo han ofrecido, queremos ser libres, trabajar este proyecto sin ataduras. Y si no sale pues le devolveremos a la gente su dinero. Porque es un crowdfunding”.

-Pero qué es Hogar. En el muro de la profesora Dulce Simoes leo: “A diferencia de lo que pasó en las grandes ciudades, en la mayoría de los pueblos no hubo resistencia ni guerra, solo represión y matanzas. Por eso decidimos centrar nuestro documental en la Sierra de Aracena, para dar voz a los supervivientes que quedan y que no tienen miedo a hablar”.

Michele: “Sí, Hogar es un diálogo sin miedo, sin vergüenza, hecho con honestidad y respeto, mucho respeto hacia los mayores. Esos encuentros, esas historias de la vida son extraordinarias. Te das cuenta que ese puente de memoria viva se traduce al lenguaje de la gente. La Columna Redondo, los ataques de Queipo.. cómo se vive el duelo. Eso hay que abordarlo, sin miedo, ponerlo de cara al público, los sentimientos”.

“La conciencia de uno es lo más bonito que hay. Eso de tener un criminal en casa…. Qué me dices de eso”. La frase, obtenida de una de las entrevistas de una de las protagonistas de Hogar, lo dice todo. Resume a la perfección el espíritu de Hogar.

-Y ahora viene el reto:

Michele: Hogar es un proyecto puerta a puerta, pueblo a pueblo y tiene que salir adelante entre todos. Eso es lo que hace que la gente crea en el proyecto. Lo más costoso es el alquiler del equipo profesional de rodaje. Diez meses de investigación y un mes de rodaje profesional. Queremos rodar una película de una hora y media, enfocada en lo humano, con un lenguaje que los jóvenes entiendan.

-Los veo tan jóvenes, con esas ganas de contar una vida ocultada que me da alegría y esperanza en este país.

Michele: "Hogar es una necesidad. Cuando acabó la Dictadura se hizo un pacto de olvido. Hay gente que lleva sufriendo a diario y necesita hablar. Todos somos Hogar, necesitamos recordar esa parte de nosotros que nos define como país. No podemos seguir siendo un país de fosas comunes".

Ya está lanzado el proyecto, en las redes. Es lo que se llama un crowdfunding. Todo, todo está en la red, en esta:   https://www.kickstarter.com/projects/1544773201/hogar-a-story-of-oblivion      Twiter, Facebook, Youtube, Instagram. Tan cerca de hoy, tan lejos del ayer que narra, que quiere narrar Hogar. Tan a mano con las nuevas tecnologías al servicio de la memoria. Veremos con la experiencia de Hogar: Documental el choque entre el recuerdo, la memoria y el impacto en esta nueva manera de hacer periodismo, de hacer cine.

A buen seguro que merece la pena el reto que lanzan este par de licenciad@s en Filosofía, serrano de Alájar y sevillana. Todo tan cerca, a un click. Y tan lejos. Un infinito de 82 años más las luces que quedan en la memoria de los protagonistas, hombres, mujeres, investigadores, académicos que batallan contra el olvido en este mar de recuerdos que, creánme, no borra ni el alzhèimer, más bien multiplica ese horror.