viernes. 29.03.2024
El tiempo

Los mayores cachoneros aportan coplas e historias tradicionales a la investigación folklórica

El prestigioso investigador José Manuel Fraile ha visitado Galaroza y ha grabado canciones a los mayores del pueblo
Los mayores cachoneros aportan coplas e historias tradicionales a la investigación folklórica

El folklore serrano continúa despertando el interés de expertos e investigadores. El último que se ha acercado a la comarca es José Manuel Fraile Gil, quien atesora una interesante trayectoria de trabajos etnográficos en temáticas de bailes, cantes y tradiciones por toda España.

Acompañado por Antonio Estepa Silva, Lourdes Hernández de Pedro y Ana Conejo Mateo, ha recorrido localidades como Almonaster la Real y Galaroza, para recoger y recopilar hitos y recuerdos. En la primera, ha participado en las recientes Cruces de Mayo, apreciando el colorido estético y la riqueza de los fandangos de la mano de Manuel Ángel Barroso y responsables de las hermandades. Estas experiencias se han producido con la mediación de la Asociación Cultural Lieva o especialistas como Aniceto Delgado.

En Galaroza, se ha reunido con la Asociación Cachonera de Personas Mayores, concretamente con sus integrantes José Fernández Jover, Tomás Navarro Aguirre, Francisco Vázquez Vázquez, Encarnación Tovar Muñiz, María Isabel Porras Quinta, Fidelia Fernández Rodriguez, Carmen Muniz Pavón y María Ponte Gonzalez, además de su presidente, José Romero Sánchez.

Con ellos y ellas ha repasado sus vivencias en diversas fiestas tradicionales, algunas incluso ya desaparecidas. De esta forma, los presentes han cantado coplas del Romero, del Pirulito o del Pino del día de San Juan. En este último caso, se traía el árbol para que estuviera plantado el día del Santo; se adornaba con cadenetas de papel de seda hechas en casa con engrudo de harina y se instalaban por barrios, dejando centinelas para que no los derribasen. Se cantaban las canciones, sentados o dispuestos en corro.

Respecto a las Cruces de Mayo, se recordó por parte de los presentes que el día 2 de mayo se celebraba el Romerito y el día 3 la Cruz; era fiesta de adolescentes, había varias cruces, se hacían en el zaguán de una casa colocando un altar con la cruz que se llevaba por las calles en parihuelas por chicos, a la vez que se pedía.

Una de ellas decía así:

“Señorita del balcón,

aventarme una peseta

para estos angelitos

que llevan la cruz a cuestas”.

Otros contenidos que también se abordaron fueron las costumbres navideñas, los hábitos durante el Día de Difuntos y romances y coplas como los relacionados con ‘El niño perdido’, ‘La virgen y el ciego’, ‘La hermana cautiva’, ‘El seductor de su hermana’, ‘La doncella guerrera’ o ‘Las señas del esposo’

Las prácticas adivinatorias en la noche de San Juan también fueron motivo de interés por parte de Fraile, que pudo comprobar la memoria de los mayores cachoneros. Hace décadas, las mozas echaban en un vaso de agua tres papeletas dobladas con nombres de pretendientes y la que amanecía abierta era la del futuro marido; echando un huevo crudo en un vaso de agua se formaba la figura de un barco por la mañana; lavándose a media noche en el agua de las fuentes se adquiría belleza. Otra práctica habitual era colocar ramos en las ventanas de las jóvenes; cada planta tenía su significado: nogal, “te quiero hablar”; perero, “te quiero”; olivo, “te olvido”; cerezo, “te enderezo”; álamo, “te amo”; parra, “borracha”; higuera, “loca” o murta, “puta”.

En cuanto a los campanilleros, se comprobó que es una tradición recuperada, gracias a la labor del coro parroquial. Un grupo de hombres y mujeres salen varias noches, de madrugada, durante el mes de octubre, con instrumentos como guitarra, bandurria, clarinete, pandereta, triangulo, cántaro con alpargata o almirez. Cantan canciones tradicionales y también de elaboración o localización propia de Galaroza.

Sevillanas populares y locales, despedidas de quintos, fandangos y pasodobles, con el tradicional Himno de Galaroza, fueron otras canciones grabadas por los investigadores.

Finalmente, los asistentes aportaron oraciones y cuentos, como colofón a una velada que todos han considerado como muy interesante, por lo que se intentará repetir en el futuro.