viernes. 26.04.2024
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"Trabajar en la Comisión Europea es la culminación de un sueño"

Hay un gran equipo de profesionales que dedican día a día su trabajo para que la información llegue a los ciudadanos de la Unión Europea, entre ellos está una onubense, Rocío Pereira
"Trabajar en la Comisión Europea es la culminación de un sueño"

Entrevista a Rocío Pereira

Desde el pasado mes de marzo, una periodista onubense vive su sueño de trabajar en la Comisión Europea, un camino largo y arduo que le ha llevado hasta Luxemburgo, donde trabaja con un amplio equipo humano en el portal de información de la Unión Europea. Pereira, a la que durante años hemos podido leer en páginas de periódico y ver en las televisiones locales, ha emprendido ahora una nueva vida en la que está descubriendo otras facetas de la comunicación y de paso, nuevos lugares. Y es que formar parte del entramado de la Unión Europea es también una responsabilidad y un reto que esta choquera, amante de su ciudad, ha aceptado con una sonrisa....

¿Cómo has llegado a Luxemburgo, como fue el proceso para que terminaras allí?

Llegué a Luxemburgo el pasado mes de marzo a trabajar en la Comisión Europea, más concretamente en la Oficina de Publicaciones de la Unión Europea. Estoy aquí porque el Gobierno Europeo me ha concedido la Beca ‘BlueBook’ y con ella la oportunidad de trabajar en las instituciones. Para mí es un sueño cumplido. Se presentaron casi 13.000 solicitudes en toda Europa y de ellas sólo seleccionaron a 44 españoles, así que me siento toda una privilegiada. Antes de Navidad me dijeron que estaba preseleccionada y a un mes de venirme me llegó la oferta oficial de la UE. Para mi sorpresa, el puesto estaba en Luxemburgo y no en Bruselas, como pensé al principio, pero todo esto merece la pena esté donde esté.

¿Cuál es tu labor allí?

Formo parte del equipo que lleva el European Union Open Data Portal, es decir, el Portal de Datos Abiertos de la Unión Europea, y con él la Comisión está cumpliendo la Decisión 2011/833/UE, por la que pone al acceso de los ciudadanos todos los datos relativos a la Unión Europea. Es decir, que este Portal publica información sobre todas las instituciones que forman parte de la UE. Mi labor ha ido evolucionando desde que llegué, y he pasado desde analizar y catalogar como Data Analyst las peticiones de datos que nos llegan a promocionar, como estoy ahora, el Portal a nuestros contactos del resto de las instituciones. Todo ello me está permitiendo tener un profundo conocimiento de la UE y, como sabe, para cualquier periodista como usted y como yo, la información es poder.

¿Te ha dado tiempo a conocer la ciudad? ¿Qué es lo que más te gusta?

No he parado desde que llegué, con una agenda muy apretada de actividades y formaciones. Tuvimos a mitad del mes de marzo unas jornadas en Bruselas en las que tuvimos reuniones con miembros de las instituciones que forman la UE, para mí fue cumplir algo muy deseado, pero me dejó absolutamente agotada. En Luxemburgo también tengo muchísimas actividades pero ya he podido disfrutar de la ciudad. Me gusta muchísimo el Barrio de Grund, que es la parte baja de la ciudad, muchas de sus calles parecen de cuento, conserva muchos edificios históricos y tiene mucho encanto ya que por el barrio pasa el Río Alzette. Además la zona de Chausen tiene terrazas de bares donde es una delicia tomarse una cerveza cuando el sol hace acto de presencia. También me gusta que es una ciudad con mucho verde alrededor que es por donde salgo a practicar ‘running’ y, sobretodo, que aquí hay gente de todos lados, es internacional y a mí me encantan los ambientes internacionales. La gente es muy amable y abierta.

¿Te sientes parte de algo importante estando en la Comisión Europea?

Como ya he explicado con anterioridad, estar trabajando en la Comisión Europea es la culminación de un sueño que empecé hace justo 10 años cuando estudié en Turín (Italia) mi Master de Diplomacia y Relaciones Internacionales. En Luxemburgo estoy alejada de la política más activa y más cerca de la parte del funcionariado europeo, pero pienso que es muy importante, como periodista, el poder ofrecerle a los ciudadanos la información que ellos quieren y demandan de la Unión Europea, porque precisamente, la comunicación es uno de los principales hándicaps de la UE y lo que pasa aquí no llega al onubense de a pie, en este sentido, sí siento que estoy en un sitio muy importante y que tengo mucho que aportar.

Cuentanos un día normal de tu nueva vida…

En la Comisión tenemos flexibilidad a la hora de entrar y, dependiendo de esa hora, tenemos nuestro fin de la jornada laboral, teniendo que trabajar ocho horas al día. Yo suelo entrar a las nueve y, normalmente, las reuniones son a primera hora de la mañana a principio de la semana, con la que se traza toda la trayectoria semanal. Siempre hago una parada a lo largo de la mañana para el ‘Café Italiano’ que me tomo con la ‘colonia’ italiana de aquí y que me ayuda a recordar mi olvidado italiano. Paramos entre media hora o una para comer y aunque la mayoría lo hace a las 12.00 horas, yo lo alargo hasta las 13.00 horas para no descompensar mucho mi horario español. Cuando termino, sobre las 18.00 horas, aprovecho para practicar Pilates o Yoga y también he retomado el ‘running’. Algunos días voy al cine después del trabajo o ahora en primavera cuando hace buen tiempo comienza a apetecer los ‘afterwork’ en las terrazas, así que, como ves, no paro aunque quiero sacar tiempo para estudiar.

¿Te ves en Luxemburgo también en el futuro?

Yo siempre me he visto en un trabajo que me guste y me apasione y no me importa la ciudad, es más, me encanta viajar, así que no me importaría que mi trabajo fuese viajando de un lugar a otro. En la Oficina de Publicaciones de la UE hay muy buen ambiente y es muy agradable trabajar aquí, aunque tengo que reconocer que la ciudad es bastante cara, debido al alto poder adquisitivo de sus habitantes, por lo que tendría que ganar un sueldo muy por encima de la media para poder asentarme aquí. Nunca se sabe, puede ser Bruselas, Madrid, Londres o Huelva, da igual, siempre que lo que me ofrezcan sea un trabajo que me permita vivir con dignidad para dar lo mejor de mí en una profesión que me encanta pero que los empresarios españoles ni valoran ni pagan como es debido.

Este año no te hemos visto por la ciudad en primavera, sobretodo, en Semana Santa ¿qué has echando de menos?

Esos días entré en el momento más crítico de mi estancia aquí, sin duda, y es que, por primera vez en mi vida, me perdí la Semana Santa de Huelva. Para una cofrade como yo ha sido muy difícil no volar para España el Viernes Dolores como sí he hecho en otras ocasiones cuando he vivido en Londres o en Turín. El poco tiempo que llevaba aquí me hizo tomar la difícil decisión de perderme una semana que en mi casa se vive muy intensamente. Son momentos de tradiciones familiares y el no ver la ilusión de mis sobrinos Lucía, Manuel, Marta, Diego y Daniel durante el paso de las cofradías ha sido muy difícil. También he pasado muchas Semanas Santas trabajando, retransmitiendo las procesiones, y es algo que también he echado de menos. Pero intenté no seguir mucho las redes sociales y además hice una ruta por Holanda que acabé en la belga ciudad de Gante, así que pude paliar en algo la tristeza que me produjo el pasar fuera la Semana Mayor Onubense y perderme a mi Hermandad del Descendimiento el Viernes Santo.

¿Se habla mucho sobre los cambios a los que se enfrenta la UE en Luxemburgo?

Es una conversación que está en todos los correderos por la incertidumbre que genera y porque no se sabe qué va a ocurrir con los cambios en la forma de trabajar de la UE. Como ya he dicho, yo estoy alejada de los círculos políticos pero sí que llegan antes las informaciones y lo que sí es verdad es que nadie sabe nada y todos están a la espera de lo que pase. También hay un intenso debate acerca de si ‘Brexit duro’ o ‘Brexit blando’, pero es como el que puede haber en la calle. Yo trabajo cerca de los traductores de la UE y ellos se preguntan sobre si el inglés va a perder la oficialidad como idioma en la Unión Europea, cosa que me parece bastante improbable ya que este idioma es nuestra herramienta de trabajo. Lo que sí he sentido es que la salida de Gran Bretaña de la UE es un asunto que a nadie le gusta y que les provoca a todos mucha desazón. En el corazón de Europa esto ha sido un duro golpe y en las ciudades en que se respira Europa por todos lados como son Bruselas y Luxemburgo esto se siente aún más.

Como periodista… ¿Qué te preguntarías si estuvieras en mi lugar?

Pues preguntaría un asunto del gremio y es si la Unión Europea es lo suficientemente transparente de cara a los medios de comunicación y a los ciudadanos. Yo respondería que sí, ya que se está trabajando sobre el asunto para que así lo sea, y ya se han puesto decisiones encima de la mesa como la que le mencioné con anterioridad, la 2011/833/UE. También te puedo decir que hay un gran equipo de profesionales que dedican día a día su trabajo para que la información llegue a los ciudadanos aunque para ello aún haya que cambiar muchas cosas. Europa necesita comunicar mejor lo que es, y parece, que desde dentro, se están empezando a hacer las cosas para que así sea.