El Recreativo ha vivido cinco ventas frustradas en poco más de dos años

La retirada del grupo inversor liderado por Mariano Reyes y Francisco Mendoza, pese a ser los adjudicatarios del 90% de las acciones del Recreativo, y la continuidad del Ayuntamiento como dueño y de Eurosamop como gestor, es una película que, con otros actores, ya se ha visto más de una vez en el cine de la afición albiazul.

De hecho, el seguidor recreativista ha sido testigo de hasta cinco ventas frustradas en poco más de dos años. Una realidad desesperante y que viene a confirmar que la solución a los males que afligen al Decano no resida quizás en la sociedad civil y en la iniciativa privada.

• El primer intento tuvo como protagonista a un anónimo grupo de empresarios hispano-mexicanos. Se anunció un acuerdo con Gildoy España SL y la llegada de Álvaro Roncal como nuevo hombre fuerte. Pero Roncal duró dos telediarios y Pablo Comas siguió al mando. En cambio, Víctor Hugo Mesa aprovechó para quitarse de en medio. Al final, más que una compra se trato de un préstamo para que el equipo saliera a competir.
• La segunda intentona tuvo color onubense. Felipe Cascajo se erigió en la cara visible de un grupo de empresarios de Huelva, con apoyos políticos, dispuestos a comprar el Decano. La operación prosperó hasta el extremo de firmarse un contrato de compra-venta con Comas y Gildoy. Con todo cerrado, Cascajo se echó atrás sin más explicaciones, insinuando que obedecía órdenes.
• La tercera compra que no fue tiene como protagonista a Jesús León. El empresario cordobés avaló los 200.000 euros que hacían falta para inscribir al equipo en Segunda B y diseñó un proyecto deportivo con Luna Eslava y Rafa Berges al frente. La resistencia de Comas, consejero delegado hasta octubre, frustró la operación deportiva, y León desapareció de la escena tras un conflicto con los políticos, incluida la dimisión de sus tres hombres en el Consejo de Administración del Decano.
• El penúltimo fiasco lleva el nombre de Moody Investment SA. Representada por Vicente Simón y el onubense José Carlos García Castillo, fue la única en presentarse el pasado verano a la subasta pública abierta por el Ayuntamiento para adjudicar el 90% de las acciones del Recre. La empresa panameña fue rechazada por la Mesa de Contratación al incumplir los requisitos del Pliego de Condiciones.
• La última venta frustrada tiene como protagonista a Zephir Homes SLU, el nombre bajo el que se aglutina un conglomerado empresarial con Mariano Reyes, Paco Mendoza, José María Zafra y Paco Muñoz como cabezas visibles. Este grupo ha llegado más lejos que ninguno, pues fue proclamado por el Ayuntamiento y Huelva Deporte SL como adjudicatario del 90% de las acciones del club. Sin embargo, llegada la hora de rubricar la compra-venta ante notario, se echaron atrás ante la falta de músculo financiero y las dificultades para rescindir el contrato de gestión de Eurosamop.