El árbitro amenazó con suspender el partido del Recre si continuaban los insultos desde la grada
La anécdota del partido entre el Recre y el Granada B la protagonizó el colegiado Mohamed Massat. En las postrimerías de la segunda parte, el árbitro del comité castellano-manchego se dirigió al delegado Manolo Pedraza para comunicarle que suspendería el encuentro si no cesaban los insultos hacia su persona desde la grada del Nuevo Colombino.
La afición recreativista había mostrado su contrariedad con las decisiones del trencilla con el típico grito de '¡Arbitro, cabrón!', especialmente después de dos posibles penaltis no pitados a favor del Decano. Una vez que la megafonía del estadio hizo pública la advertencia del árbitro, el público cesó en sus improperios hacia el juez de la contienda.
Una vez concluido el duelo, Massat recogió lo sucedido en el acta arbitral al indicar, en el apartado otras incidencias, que "en el minuto 85 me dirigí al delegado de campo y le comuniqué que cesaran los siguientes insultos: 'árbitro cabrón' repitiéndolo varias veces, comunicándolo por megafonía. Tras comunicarlo por megafonía cesaron dichos insultos".
