Nerva, la Villa de Mi Libertad

"Nerva, sólo un nombre, pero lo bien que suena en tu pasodoble", decían unos guerreros por carnaval...
Se ha escrito tanto sobre ti, Nerva, que ya no me queda qué decir, te enseñaré lo que siento a ver si consigo hacerte feliz.

Te estás haciendo vieja, te están llenando de arrugas, se aprovechan de tus preciosas canas para imponerte con quien madrugas. Creciste luchando por tu libertad, como mujer rebelde te fraguaste y ahora que presumen de lo que fuiste ahora es cuando hay que ayudarte.

Ser nervense no significa volver en tu día grande, brindar por lo que un día fuimos y añorar todo lo vivimos. Ser de Nerva significa hacer pueblo todos los días del año, luchar por ti en cada amanecer y "nervesear", como dice mi amigache, hasta cuando soñamos.

Te visten de feria con mas sombras que luces, con mas promesas que verdades. Ya lo dijeron las guardianas del corazón de tu tierra, "quisieron hacer de ti, turismo en el mundo entero, pero mientras la avaricia de tres o cuatro te sigan sacando el dinero, ni mis abuelos, ni tus hijos, ni tus nietos podrán pisar más tu suelo".

Villa de mi Libertad no te rindas, pues mientras que esas siete notas, del pasodoble más bonito jamás compuesto, recorran las entrañas de esta nervense rebelde, del nervense emigrante, del currante, del que no se acuesta en fiestas, del que no se quita del balcón para disfrutar de las dianas, del que se estudia el "Nervae", del que colecciona las fotos de los artistas del parque, del que añora los bailes en la caseta del Llano del Cine, del que no deja pasar las fiestas sin comprar turrón, del que termina desayunando en la "Toñi"... Mientras esas notas sigan haciendo pueblo allá por los confines de la tierra, no habrá mediocre que pueda manipular tu esencia. La esencia de una tierra que nació para luchar y que no se merece piropos oportunistas. La juventud que ahora te cuida no permitirá, no permitiré, que intenten ponerte hermosa con fachadas religiosas hipócritas, ni que bailen contigo para saciar sus mentiras. Tierra mía, despierta a tu juventud, para que no sólo te defiendan en las dianas, que sea la gente joven la que vuelva a poner en pie aquellos que mis abuelos levantaron, empieza a ser consciente del inmovilismo cortesano en el que te tienen enclaustrada. Aprovecha estos días para contarle a tus paisanos y paisanas que tus paisajes ya no rugen, lloran de tanto engaño, que lloran de tanto engaño...

Qué nostalgia más grande siento cuando llegan sus fiestas patronales.
Hay nervenses de todos los gustos y colores, que para eso nos han mecido
en una cuna de pigmentos mineros. Pero siempre que llegan estas fiestas hay brá...
Felices Fiestas a todos mis paisanos!!!