Carta a “Felipe VI”

Estimado príncipe:

En estos días en los que le "ensalzan", porque preparado dicen que está y mucho, para convertirse en rey de España, en estos días cumplo 32 años. Nací el 10 de junio de 1982 por lo que espero que comprenda que estas palabras no están cargadas de mucha historia. No tengo experiencia predemocrática y por ello, mi generación, ahora exiliada por "movilidad exterior" no concibe en este Estado de Derecho la aceptación de un pacto para lo que algunos expertos demócratas españoles definen como la nueva Restauración Borbónica.
Me trajeron tarde, o temprano quién sabe, a la oportunidad de ser testigo de la aprobación de una Constitución democrática fruto de un gran pacto entre el 99% de las fuerzas políticas. Según cuentan los libros de historia y recogen las hemerotecas, la Constitución de 1978 fue redactada por personas que firmaron penas de muerte, pero también por comunistas que tuvieron que emigrar. A usted, señor, que lo posicionan en la idea de un "nuevo tiempo" para la Monarquía, explíquenos en uno de sus discursos qué papel jugamos hoy los hombres y mujeres que nacimos tras la Transición.
Usted, señor, que decidió compartir su vida conyugal con una "plebeya", explíquenos al pueblo los motivos reales de la abdicación del rey de España. Pues parece que en el discurso de su padre no tenía cabida protocolaria tanta transparencia...
Ahora que ya tienen twitter y que quieren una Corona 2.0, explíquenos por qué incomoda tanto a la Casa Real que la libertad de expresión se empodere en las redes sociales. Salga usted, señor al balcón y explíquenos los motivos del secuestro de la revista 'El Jueves'. Porque no pretenderá que el "nuevo tiempo" y la cuenta en twitter sean suficientes garantías de transparencia, ¿verdad?.
Antes de que sea proclamado Felipe VI creo señor que debe saber que a esta joven demócrata le están poniendo trabas para ejercer sus derechos. Creo que debe usted saber que esta democracia es simple y llanamente una trampa. El silencio institucional, las comparencencias del presidente del Gobierno en plasma, el "no hables", "no te manifiestes", "no recurras", "no twitees" vienen acompañado de un colapso judicial. Un colapso que querían conseguir con las elevadas tasas judiciales. Que recurran los ricos, esos a los que el sistema les beneficia. Antes de que usted, señor, se suba al trono creo que debe saber que en pleno s.XXI se recortan derechos fundamentales, se recurre al paragüas del Alto Tribunal para poner en duda leyes que ponen en valor el derecho a la vivienda, por ejemplo. Antes de que pronuncie su discurso acompañado de un cojín y una corona debe usted saber que estamos pidiendo en la calle que el jefe de Estado sea elegido democráticamente. Pues como refleja la historia contemporánea, las instituciones son democráticas sin son votadas por el pueblo.
Haga usted señor un esfuerzo y explíquenos a los jóvenes de este país por qué tanta prisa por aforar al actual rey de España, por qué se despoja la Familia Real de las infantas, una de ellas navegando entre la imputación y la desimputación, por qué su estatus va a ser correspondiente al curriculum del reinado de su padre.
Señor, convénzame, si puede de que esta monarquía no es un "chanchullo" del establisthment político de nuestro país para seguir con esta democracia marioneta de mercados y estafa bancaria.
Le reconozco pues que los jóvenes de este país tenemos una tarea complicada por delante, debemos organizarnos, ser corresponsables de la República que pedimos en las calles, debemos tener claro que nuestro proyecto debe amparar una verdadera democracia donde no se pisoteen los derechos laborales, donde no tenga que defenderse lo obvio, donde el poder financiero no determine nuestro derecho a estudiar o a curarnos. Debo reconocerle que esta desorganización le favorece, pero no por ello le otorga ningún permiso.
Si usted señor quiere ser el rey de todos los españoles y españolas con todas las de la ley, haga, medie, solicite al Congreso de los Diputados que consulte al pueblo. Ya sabe, señor, que tiene a su favor al 90% de las fuerzas políticas y ya sabemos usted, y yo que a ellos nos les podemos pedir que escuchen al pueblo. Tienen directrices de la Troika para hacer oídos sordos.
No permita usted, señor, que los partidos mayoritarios se beneficien de su acercamiento a la Corona y viceversa. Si de verdad quiere reinar para el pueblo, haga que el pueblo le conceda el beneplácito de reinar tras una consulta, como refrendo a su reinado. Si quiere ser un rey del pueblo sométalo a la voluntad del pueblo.
Soy republicana y demócrata y como usted, señor, también confío en un "nuevo tiempo" en el que el pueblo siga teniendo voz y voto. Para ser Rey sólo hace falta la herencia, que ya la tiene, para reinar se necesita algo más... ¿O es que quizás en el "nuevo tiempo" está todo atado y bien atado?

Gracias por su atención.

PD: He tenido que recurrir a un amigo monárquico y experto en protocolo para que me indique el tratamiento hacia usted, señor, en esta carta. Quizás sea una buena lectura de lo lejos que tiene usted, señor, al pueblo.