Televisión e impacto social positivo
La comunicación audiovisual es una de las herramientas más potentes que existen en nuestra sociedad para transmitir valores, en el aspecto positivo, y para perpetuar tópicos y desarrollar estereotipos, en el lado negativo
A pesar de que en los últimos años, en concreto desde 2012, se ha producido un descenso en el número de horas que la ciudadanía española pasa ante la televisión, la cifra sigue siendo muy significativa. La media se sitúa en las cuatro horas al día, en concreto un total de 243 minutos, según los datos correspondientes al cuarto trimestre de 2015 recogidos en el Estudio Barlovento.
El televisor ha sido tradicionalmente conocido como la caja tonta, al presuponerse una ausencia de visión crítica por parte de la audiencia. Sin embargo, los contenidos que nos llegan a través de la televisión tienen una fuerza simbólica enorme que, convenientemente conformados desde una estrategia de impacto social positivo, que no tiene por qué producir un alejamiento del objetivo de ganar espectadores y espectadoras, tendrían un poder transformador enorme.
Desde un punto de vista comunicativo, el medio televisivo tiene una capacidad inmensa para llenar nuestras vidas de lo que el lingüista George Lakoff y el filósofo Mark Johnson han llamado “metáforas de la vida cotidiana”. Su conexión por tanto con valores como la igualdad resulta fundamental para seguir avanzando en este sentido.
El artículo completo, en 'Comunicación y Tendencias', el blog de María José Bayo