Perfil de la secuestradora del bebé de Basurto

Todo empieza por una obsesión, una idea fija de un embarazo acaso presionada por algún motivo ideó un plan con supuestas ecografías y cartilla de embarazo pero faltaba el parto real. Se puso el uniforme sanitario y simulando hacer una prueba, lo retiró de su cuna. Es extraño que Aimar no llorase  al ponerlo en una bolsa de plástico. Sigue el plan y envía fotos a los suyos de su bebé. Pero llega el arrepentimiento y lo deja en un felpudo de una casa. 

No hizo daño al pequeño y eso es importante. Acaso sufra dependencia afectiva de su pareja y su miedo a una ruptura y con un nuevo hijo esto no ocurriría o se dilataría en el tiempo. 

Recordemos la joven embarazada que ocultó su embarazo y se deshizo se su niño  quitándole la vida para que su pareja no la abandonase. Una obsesión es una neurosis lejos de la psicosis y psicopatía y no requiere ingreso en hospital aunque debiera tratarse. 

Es consciente de lo que hace y pide ayuda. Un secuestro es un delito pero por fortuna Aimar ya está con sus padres sonriendo, abrazando y besando a esos seres que le dieron vida. Como dicen sus padres ha nacido dos veces .Los agentes acudieron enseguida a la llamada de la mujer en cuya puerta dejaron a este precioso niño.