La agresividad aumenta y es un peligro para la vida
Con asombro y preocupación veo el aumento de la agresividad tanto intrafamiliar como de gente ajena de la calle. Es una situación incontrolable que no admite el razonamiento y que puede traer consecuencias desastrosas porque no se ve más allá del egoísmo o el complejo.
Aunque sea de forma inconsciente está en juego la vida. Mujeres asesinadas , descuartizamientos de víctimas, empotramientos de coches en terrazas , coches circulando en sentido contrario. Un sin fin de problemáticas evitables.
La mayor presencia policial no lo es todo porque hay que acabar con la raíz de las conductas porque acaso la Policía no llegue en todos los momentos.
Tan importantes como los análisis clínicos en cualquier puesto urgen análisis psicológicos y psiquiátricos. Y si se observan conductas extrañas o violentas denunciarlas. La clave es la denuncia pata evitar esas conductas repetitivas e incontrolables.
Es un generador de ansiedad salir con miedo a la calle o vivir en un estado de alerta por culpa de patologías mentales o psicopatías de quien daña sin importar las consecuencias.
Todos estamos implicados y debemos ser empíricos y alertar porque podemos salvar muchas vidas. Sin miedo, con coraje y poniéndonos en el lugar del otro porque acaso podemos ser nosotros las víctimas.