El ‘Spanish Model’

Cualquier familia que emprenda una acción desesperada en busca del 'repuesto sanador' que le devuelva la salud a un ser querido, despierta como es natural la comprensión y la solidaridad humanas. Sin embargo, la ONT (Organización Nacional de Trasplantes) ha estado ágil, al quite, para que un modelo como el nuestro, invocado como referencia sanitaria de excelencia en el mundo de los trasplantes desde hace décadas no dé un paso atrás.

Los criterios imprescindibles de anonimato y altruismo en las donaciones conforman un sistema ajeno a la capacidad económica o al poder de convocatoria social de los demandantes de órganos o tejidos.

Ya quiso 'meter la cuchara' una empresa alemana en la captación de donantes de médula, con la excusa de que era una organización sin ánimo de lucro; extremo que no compartía la ONT, que consiguió parar esa punta de lanza con la que podría abrirse una brecha en nuestro contrastado sistema. La misma ONT ha logrado ahora del Ministerio de Sanidad una orden ministerial, en virtud de la cual cualquier campaña dirigida a la captación de órganos o tejidos deberá contar antes con su aprobación, de modo que se garantice que nunca se soliciten para una persona en concreto.

Uno, que, por desgracia, no suele aplaudir los decretos que aparecen en el Boletín Oficial del Estado, en esta ocasión no puede por menos que apoyar sin reservas la firmeza con la que se trata de mantener nuestro 'Spanish Model'.