Modelos

La derecha tiende a elegir como ejemplo de políticos a unos personajes muy curiosos. Artur Mas, refiriéndose a su mentor y padre político, Jordi Pujol, tras su confesión de que atesoraba una fortuna en Suiza desde 1980 sin declarar proveniente de una herencia familiar, ha dicho que siente "pena, compasión y un gran dolor", sin especificar si hacía referencia al montante económico que Pujol almacenaba, por considerarlo escaso, o si, por el contrario, se refería a que sentía pena por no haber seguido su ejemplo. Y no se quedó solo ahí, sino que, además, añadió que ese asunto era un tema "estrictamente privado, personal y familiar". Y en eso le apoya ERC que no está dispuesto a perder el tiempo en comisiones de investigación teniendo por delante su desafío soberanista. Estos si que se lo guisan y ellos se lo comen. Por otro lado esta semana ha estado llena de claros ejemplos de lucidez para el PP y su líder, Rajoy, que no hay que olvidar que sigue siendo Presidente del Gobierno. Para empezar, su amigo Jaume Matas ha ingresado en prisión. Un hombre que para D. Mariano, en 2003, "tenía personalidad, coraje, determinación y valentía" y que tan solo un año después , llevado por el éxtasis, le llevó a manifestar aquello que ya figura en los anales de la política española, "vamos a hacer en España lo que Matas hizo en Baleares". Después conocimos que Carlos Fabra, conocido como el "Virrey de Castellón", ese señor que inauguró un aeropuerto sin aviones y que tuvo la gran suerte de ser agraciado en repetidas ocasiones con el Gordo de la Lotería, también debía ingresar en prisión para cumplir una condena de 4 años. De este, D. Mariano, dijo en 2008, que "era un ciudadano político y ejemplar, no sólo para el PP, sino también para los ciudadanos de Castellón". Ambos, Matas y Fabra, son dos claros ejemplos de políticos peperos que fueron puestos como modelos por Rajoy, y antes por Aznar. Modelos de barro que escondían, como están demostrando los tribunales, chanchullos varios con la única finalidad de su enriquecimiento personal. Nuestro Presidente es un verdadero líder en solo una cosa, en saber elegir a estos personajes como símbolo de buen gobierno y acertada gestión. Ya lo hizo antes con Bárcenas, al que le dio todo el poder económico del PP, y pasó lo que pasó, no sin antes enviarle un sms, estando Rajoy instalado en Moncloa, y Bárcenas ya en prisión, en el que le decía "Luis, Lo entiendo. Se fuerte. Mañana te llamaré. Un abrazo". Y si esto sería causa de dimisión irrevocable en cualquier país democrático, aquí, en el nuestro, fue motivo de una comparecencia parlamentaria en el que Rajoy, con rostro apesumbrado, muy parecido al de un mal comediante, dijo mirando al hemiciclo, "me equivoqué al mantener la confianza en alguien que ahora sabemos que no la merecía". Tres modelos, tres políticos, dos de ellos ya en prisión y el tercero a punto de entrar, a los que hay que sumar los más de 40 imputados por el caso Gürtel que pronto se sentarán en el banquillo. Modelos de una España carca y mafiosa que representan una manera de entender lo "publico" como lo "mio y solo mío". ¿Y creen que ha pasado algo dentro del PP? En absoluto, ellos a lo suyo, a tapar sus vergüenzas justificando lo injustificable y esperando a que su Ministro tire de indultos.