Centenario

Lo bueno de las efemérides es que refrescan la memoria, quitan las telarañas y despiertan del letargo.En este 2014, entre otros acontecimientos, se celebra el centenario de la publicación de 'Platero y yo'. Me alegra. Porque eso de presumir de tener a un vecino que fue premio Nobel queda estupendamente, pero si se conoce su trayectoria es mucho más enriquecedor. Así que a algunas personas le va a servir de mucho esto del centenario, porque imagino que tendrán la decencia y la altura política suficientes para conocer en profundidad al poeta universal, que no solo escribió 'Platero y yo', aunque ahora todo el protagonismo (merecido) lo tenga esta obra. A quienes ahora tienen la responsabilidad de eternizar la figura de Juan Ramón -desgraciadamente asociados a la política- les invito a conocer algunas de sus reflexiones recogidas en 'Política Poética', les vendrá muy bien en sus quehaceres diarios al servicio del ciudadano, y no lo digo por el alcalde de la localidad, un conocedor silencioso y prudente de la obra juanramoniana, que habla con orgullo y con conocimiento del poeta de su tierra. Más bien voy por otro lado, y es que eso de dar cobijo en a cultura a quien no tiene sitio en otro lugar me parece un error de bulto.

Al margen de esta opinión, los cien años se cumplen en un momento clave, en una situación en la que los ciudadanos más que nunca se tienen que contagiar del espíritu crítico del Nobel. Sería muy sano conocerlo y aplicar muchas de sus reflexiones. "Mi libertad consiste en tomar de la vida y de la crítica de la vida lo que me parece mejor para mí, para todos, con la idea fija de aumentar cada día la calidad jeneral humana, sobre todo en la sensibilidad", eso lo escribía Juan Ramón en 'Alerta', durante su etapa en Washington y a día de hoy la considero una premisa clave para el crecimiento de la humanidad.

Este 2014 va a ser un año muy interesante, una buena oportunidad para hacer, si cabe, de la obra de Juan Ramón la versión más universal posible, aprovechando todos los soportes que la era tics nos ofrece. Una buena ocasión para desgranar cada línea de 'Platero y yo' y ponerle imagen. Si hace falta una fecha clave para despertar curiosidad, bienvenida sea. Juan Ramón fue definido como un "enfermo indiagnosticado", pero esta sociedad tiene su enfermedad bien diagnosticada, busquemos el tratamiento, igual la fórmula de la medicina esta en la literatura.