San Bartolomé destina la recaudación de su última obra de teatro a los más necesitados
El Grupo Municipal Israel entrega al Consistorio 400 euros para la compra de alimentos en el Economato Resurgir.
El Grupo de Teatro Municipal de San Bartolomé de la Torre, Israel, ha entregado parte de la recaudación de su última obra, ‘El Café de Doña Rosa’, al Ayuntamiento de la localidad, que destinará los fondos a ayudar a las familias más necesitadas del municipio.
En concreto, el director del grupo, Miguel Ángel Vázquez, ha hecho entrega de un donativo de 400 euros al Consistorio bartolino, una cantidad que el Ayuntamiento entregará a su vez al Economato Resurgir para sufragar los alimentos para las personas más desfavorecidas de San Bartolomé de la Torre.
El alcalde del municipio, Manuel Domínguez, ha dado las gracias “en nombre del pueblo” al grupo municipal de teatro, al tiempo que le ha mostrado sus “mejores deseos de éxitos” para este nuevo año 2016.
La representación de la obra ‘El Café de Doña Rosa’, que tuvo lugar a finales de noviembre en el Teatro Municipal, no ha sido la única actividad con fines benéficos programada por el Ayuntamiento en las últimas semanas. A ella se une la III San Silvestre Bartolina, con la que se han recaudado unos 400 juguetes para los niños más necesitados de la provincia, y la I Zambombada Bartolina, en la que se recaudaron cientos de kilos de alimentos. Además, el Consistorio entregó 40 cestas de Navidad donadas por la Obra Social de La Caixa a las familias más necesitadas.
El Grupo de Teatro Municipal de San Bartolomé de la Torre representó ‘El Café de Doña Rosa’ en la localidad durante los días 20, 27 y 28 de noviembre con un éxito arrollador, ya que el público se quedó prendado de nuevo con la espectacular puesta en escena a la que el director bartolino Miguel Ángel Vázquez les tiene acostumbrados.
En esta adaptación de la novela La Colmena de Camilo José Cela, cuya dramaturgia también ha sido creada por el director, se llevaron a escena los momentos de la obra que muestran o dejan vislumbrar la realidad social en plena posguerra. Como si de celdas de una colmena se tratara, los diálogos dejan ver una serie de vidas entrelazadas cada una con sus historias, penurias y sufrimientos.