jueves. 25.04.2024
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La desigual desescalada de los comerciantes de Huelva: entre un 5 y un 75% de ventas

La fase 1 de la desescalada está teniendo distintos resultados para los negocios. Huelva Comercio sitúa la media de ventas en el 5% de antes de la pandemia, pero las cifras varían dependiendo del sector
La desigual desescalada de los comerciantes de Huelva: entre un 5 y un 75% de ventas

"Si no conseguimos que el cliente vuelva, no podremos tirar para adelante. Hay que concienciar a la gente de que compre en el pequeño comercio; que si hacen falta unos zapatos, los compremos cerca de casa aunque cuesten 5 euros más. Porque comprar por internet es muy cómodo pero nos estamos cargando el pequeño comercio. Esa concienciación es más importante que las ayudas directas al sector porque cada negocio tiene una realidad". Así de contundente se muestra a la hora de hacer frente a la crisis económica provocada por el coronavirus Fali Durán, propietaria de 'Trapos con otro punto', una tienda de ropa de niños, trajes de flamenca, arreglos y manualidades en la zona de la Merced de la capital onubense.

Desde que el lunes abrió sus puertas tras casi dos meses de confinamiento, sus ventas están siendo la mitad porque "estamos vendiendo sobre todo mascarillas, pero después qué va a pasar". Durán está convencida de que los comerciantes "vamos a tener que reinventarnos y la venta online está siendo la gran asignatura pendiente". En su caso están estudiando dar clases de manualidades online y comprar una máquina de ozono para desinfectar los productos, aunque está cumpliendo escrupulosamente las medidas de seguridad exigidas.

Asegura que las ayudas del Gobierno les han llegado "bastante pronto" y que es importante regular una moratoria de los alquileres, aunque ella ha tenido la suerte de que su casero no les ha cobrado abril y mayo. Sus ventas están muy por encima de la media de la capital onubense.

La primera semana de la fase 1 de la desescalada no ha cumplido ni de lejos con las expectativas de los comerciantes de Huelva. Si las previsiones eran alcanzar la mitad de las ventas de antes del estado de alarma, el volumen de negocio ha llegado solo al 5%, según las cifras que maneja Huelva-Comercio.

Su presidente, Antonio Gemio, cuenta que, excepto en comercios como mercerías, librerías, papelerías o muebles, en los que se ha notado un repunte, las ventas han sido malas para la mayoría de los negocios. "Todos los establecimientos de menos de 400 metros incluidos en la fase 1 teníamos ilusión por abrir y por facturar tras casi dos meses cerrados, pero las expectativas no se han cumplido. Se nota que todavía hay miedo y tampoco ha ayudado el mal tiempo", explica el representante de los comerciantes onubenses.

Gemio se muestra confiado en que las ventas se animen conforme avance la desescalada. Mientras tanto, pide al Gobierno "menos limitaciones para acceder a los créditos ICO y que tengan un interés 0 porque al 2,75% de interés que se les está dando a los autónomos supone endeudarse para pagar un crédito con muchas menos ventas y lo vamos a pasar muy mal".

Tampoco ayuda la prohibición de rebajas y descuentos para evitar aglomeraciones. El presidente de Huelva-Comercio critica también la indefinición del Gobierno en este sentido, "que ha creado confusión entre los comerciantes: el lunes anunciamos las rebajas, el martes las quitamos, el jueves por la mañana las volvimos a poner para quitarlas finalmente por la tarde". Lo que solicitan es lo que llevan pidiendo desde 2012. Un marco regulatorio que defina el periodo de rebajas. También que se regulen las rebajas online "como ha hecho Francia, porque no podemos luchar con rebajas de hasta el 70%".

Antonio Gemio alaba el comportamiento de los comerciantes en la reapertura. "Están cumpliendo con todas las medidas de seguridad exigidas en sus establecimientos, están siendo muy escrupulosos", asegura.

Noemí Camacho, dueña de la tienda 'Puro Ego', es de las comerciantes a las que les está costando llegar al 10% de las ventas habituales. Especializada en moda de caballero, su fuerte es la sastrería. Ésta era la mejor época para su negocio, pero la cancelación de eventos ha hecho que las expectativas no sean buenas a corto plazo y tiene las esperanzas puestas en el otoño para poder salvar el año. Camacho no entiende la prohibición de las rebajas "cuando tenemos el aforo limitado; son dos cosas compatibles" y espera que el Gobierno dé marcha atrás. Se queja también de que tiene dos trabajadoras que no puede incorporar y que una de ellas aún no ha cobrado por el ERTE.

Noemí Camacho es una de las impulsoras de una iniciativa de los comerciantes puesta en marcha vía redes sociales con el hashtag '#YosoyDHuelva', en la que cada vendedor gestiona sus ventas con sus clientes a través de su web, correo electrónico, teléfono o WhatsApp. Ha tenido tal acogida que dice estar desbordados y, en cuanto que puedan, van a convocar una reunión para seguir avanzando.

Sabe que se han hecho campañas de promoción, pero necesita que "esas campañas se transformen en clientes. Hemos pedido al Ayuntamiento más plazas de aparcamiento, que en cuanto se pueda se dinamicen las calles con actividades y que se tomen iniciativas sobre el alquiler de locales, como premiar a los caseros que hayan llegado a acuerdos con sus inquilinos".

Francisco Macías, dueño de Cosmética Francisco, es uno de los comerciantes a los que mejor les van las ventas. Provee de productos a las peluquerías, que no dan abasto tras casi dos meses sin poner un tinte. Aunque esta semana solo ha abierto por las mañanas -el próximo lunes lo hará a jornada completa- Macías dice haber recibido "un aluvión de pedidos" y que no se puede quejar.

Sus ventas se han reducido solo un 25% con respecto a antes de la crisis del Covid-19, pese a que está aun acondicionando la tienda y atiende mediante cita precia, "aunque si algún particular viene, se le atiende".

El presidente de la Asociación de Comerciantes de Isla Chica, Vicente Moreno, constata que en el barrio, los comercios que lo están pasando peor son las tiendas de ropa, donde "no está entrando apenas gente". Otros establecimientos "como los de electrodomésticos, floristerías, mercerías o tiendas de informática, están funcionando mejor, aunque las ventas no alcanzan el 50% esperado y algunas no llegan al 10%".

Dice que en el barrio los pocos bares que hay abiertos "están medio funcionando y hay otros muchos que se están preparando para incorporarse en la fase 2, pero el que no tenga terraza lo va a tener muy crudo y muchos van a desaparecer".