miércoles. 24.04.2024
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CaixaBank se compromete a no cerrar oficinas rurales en Huelva a pesar del ERE anunciado

La Caixa ha anunciado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará en Huelva a 89 de las 446 personas que trabajan en la entidad. En Huelva son 86 las oficinas que la entidad posee abiertas.
CaixaBank se compromete a no cerrar oficinas rurales en Huelva a pesar del ERE anunciado

La Caixa ha anunciado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará en Huelva a 89 de las 446 personas que trabajan en la entidad. En Huelva son 86 las oficinas que la entidad posee abiertas, de las que 3 eran de Bankia. El ERE afectará a un total de 8.291 personas y conllevará el cierre de 1.534 oficinas en toda España. Diariodehuelva.es ha hablado con la entidad para conocer los detalles de este movimiento, pero tal y como han expuesto "aún no se conoce el listado de oficinas" que cerrarán.

Fuentes de CaixaBank han confirmado a diariodehuelva.es que estos recortes se prevén que afecten a las posibles duplicidades de oficinas que pudieran darse entre las que pertenecían a Bankia y las propias de CaixaBank. Es decir, hablando territorialmente si en un mismo municipio hubiese una oficina de Caixa y otra de Bankia se unirían y formarían una sola sede.

Así, "en Huelva, el cierre de oficinas no será relevante y el compromiso con la inclusión financiera en zonas rurales es total", han afirmado. ¿Qué significa esto? Que los municipios rurales no correrán el riesgo de exclusión financiera con la posibilidad de cierres de sucursales en sus territorios, según ha podido conocer diariodehuelva.es.

Una de las mayores preocupaciones de ese ERE es precisamente que pueda afectar a los municipios con una única oficina, ya que sus vecinos tendrían que desplazarse hasta otras localidades cercanas que sí las mantuvieran abiertas. Por parte de la entidad se ha asegurado que esto "no sucederá" ya que el compromiso con las zonas rurales es total y se prevé no afectar a esta área.

Sin embargo, desde el sindicato Comisiones Obreras han confirmado a diariodehuelva.es que la primera propuesta de reestructuración de la empresa recoge que en la provincia se verían afectadas 89 personas. Así, los criterios de selección para los despidos se han acordado en una primera instancia respondiendo a conceptos de antigüedad, cercanía a la edad de jubilación, entre otros.

Según CCOO "la dirección de la empresa ha presentado las medidas de reestructuración de la plantilla necesarias, según su criterio, para hacerla sostenible. Dijeron que iban a ser imaginativos, la realidad es que no lo han sido en absoluto, y han optado por la fórmula clásica tras una operación de fusión empresarial, con su peor cara".

A lo que han añadido que entre estas medidas destacan que para la dirección "un salario se multiplica por 3, otros se multiplican por 1,5 y bastantes salarios que se incrementan en un 15-20% (alrededor de 2.000)", mientras que para el resto de la plantilla habrá "reducción de salarios generalizado para el resto (44.400 menos las salidas por ERE); así como "previa reducción de la plantilla en casi 8.300 personas, este excedente supondría un 19% del total de la plantilla y numéricamente el 53% de la plantilla absorbida, aunque la clientela y el negocio a gestionar va a ser el mismo".

Esta absorción se afrontará con la apuesta por la digitalización de los bancos, ya que a mayor número de clientes habrá un menor número de trabajadores tras el ERE, según ha podido conocer diariodehuelva.es. Algo que ha provocado reacciones inmediatas en los sindicatos que han afirmado que "esta propuesta hace del todo inviable la voluntariedad del proceso, con las peores condiciones económicas históricamente de todo el sector financiero".

Y es que tras la fusión con Bankia, CaixaBank cuenta actualmente en España con 44.400 empleados, sin contar personal de las filiales, que no están afectadas por el ajuste, y dispone de 5.639 oficinas en España.

En el comunicado de la empresa, la dirección ha comunicado que, tras un detallado análisis de las necesidades de la red comercial y de los servicios corporativos, ha llegado a la conclusión de que "es necesario poner en marcha un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para 8.291 contratos. Este proceso se debe a motivos productivos y organizativos, dadas las duplicidades y sinergias derivadas de la fusión y las circunstancias actuales del mercado".

La dirección ha explicado que los criterios que se aplicarán para determinar la afectación del proceso serán los de voluntariedad y meritocracia, en segundo lugar. Es decir, como criterio preferente se tendrá en cuenta las personas que se adscriban voluntariamente al plan de bajas, "aunque siempre teniendo como límite máximo el cupo de excedente identificado en cada territorio o área funcional y estableciendo medidas que eviten el desequilibrio generacional. Por este motivo, se plantea que el porcentaje de personas trabajadoras mayores de 50 años que se adscriban voluntariamente al plan de bajas no podrá superar el 50% del total de salidas".

Desde CaixaBank se ha presentado, además, una propuesta de cambios en las condiciones laborales de los trabajadores que continuarán en la entidad, "para avanzar hacia un marco de condiciones sostenible y unificado, independientemente de la entidad de procedencia de cada empleado". Así, se realizará un estudio de las condiciones de cada empleado.

En este sentido, desde CCOO se ha reclamado "respeto por la plantilla, un respeto que nos hemos ganado a lo largo de mucho tiempo con nuestro trabajo diario, especialmente durante la pandemia que aún continúa y contribuyendo a conseguir los resultados que ahora nos llevan a ser la primera entidad financiera de España, permitiendo que unos cuantos privilegiados tengan unas retribuciones de millones de euros".

Por ello, tras la reunión inicial de negociación han expuesto que "la respuesta nos la han dado hoy, una total falta de respeto a todas esas personas, poniendo en la cuerda floja a varios miles, y queriendo exprimir más al resto, las 'afortunadas' que van a seguir en la plantilla". A lo que han añadido que "solo somos números, una partida en el capítulo de gastos que hay que reducir a toda costa, de cualquier manera, echando gente si no se van voluntariamente, rebajando su salario, aunque se lo ganen sobradamente con su esfuerzo a costa de su salud y su conciliación".

El cuadro de medidas y condiciones económicas expuesto por la entidad, que se ha compartido, puede consultarse aquí.

Por último, tras la mesa de negociación han determinado que "CCOO vamos a hacer propuestas, a lo largo del tiempo que dure la negociación, para hacer las cosas de manera diferente a las que hoy nos han planteado, para que las salidas sean voluntarias y económicamente justas, para que quienes sigan trabajando lo hagan en buenas condiciones, económicas y laborales, con un buen clima. Y para que CaixaBank sea una empresa de servicios financieros para su clientela, porque apostamos por el futuro además de por el presente".

Según las cifras anunciadas en el comunicado de CaixaBank, en la provincia de Huelva se verán afectadas un total de 89 personas por estos despidos. Teniendo en cuenta que la entidad, con la suma de las 3 oficinas de Bankia existentes en la provincia, cuenta con 86 oficinas, casi que toca un despido por cada una de ellas. Datos y fórmulas que aún están por determinar por la mesa de negociación y los planteamientos e intereses de la empresa y su línea de reestructuración enfocada al futuro más inmediato.

Reestructuración de los bancos

En las últimas semanas también BBVA y Banco Santander han anunciado que realizarán reestructuración en sus plantillas y oficinas. Concretamente, el BBVA ha expuesto que en una carta dirigida a los empleados que su objetivo es explorar conjuntamente fórmulas que permitan minimizar el impacto en la plantilla. Así, a finales de febrero, el diario Expansión publicó que BBVA planeaba recortar unos 3.000 empleos en España, cerca del 10 % de su plantilla.

En la carta, BBVA apoya su decisión en el contexto de "profunda transformación" para el sector, marcada por una enorme presión competitiva, bajos tipos de interés, la adopción acelerada de los canales digitales por parte de los clientes y la entrada de nuevos actores digitales.

El banco considera que para garantizar su competitividad y la sostenibilidad del empleo a futuro, resulta "imprescindible" continuar trabajando de forma aún más decidida en reducir su estructura de costes.

Por su parte, el Banco Santander anunciaba en diciembre a los representantes sindicales que se va a proceder a una reestructuración de su red comercial y de sus servicios centrales, según exponía CCOO en un comunicado. "Banco Santander nos anuncia una reestructuración en la Red y los Servicios Centrales que supondrá este año el cierre de 425 oficinas, y un redimensionamiento de los SSCC de Santander España", afirma CCOO, aunque Santander las cifra en 450.

El sindicato afirma que "participaremos en el proceso de negociación que se abre para garantizar que cualquier proceso se lleva a cabo con medidas voluntarias y no traumáticas".

La entidad que preside Ana Botín anticipa también "un proceso de reordenación de los servicios centrales corporativos, con eliminación de las funciones que no aportan valor añadido a los países", afirma CCOO, que añade que estos datos "no se los han facilitado datos de plantilla afectada".