Rivero y Morcillo hacen las paces por el bien del Recreativo
El roce entre Quique Rivero y Juanjo Morcillo a la hora de coger el balón para lanzar un penalti, fue el único lunar negro de la convincente victoria del Recreativo de Huelva sobre el Atlético Sanluqueño. Un incidente del juego que no fue a mayores en el vestuario y que hoy ha quedado zanjado públicamente de manera definitiva.
"No hay ningún problema con Morcillo, es de los jugadores con los que mejor me llevo y no hay nada que aclarar", indica el mediocentro, quien ejecutó con maestría la pena máxima. "El tema quedó zanjado al terminar el partido. Me equivoqué, pero se habló en el vestuario y quedó ahí. Fue gol y eso es lo importante", admite el central.
Coincidencia
También hay coincidencia a la hora de valorar la última actuación del Decano. "Hicimos un partido muy completo. Conseguimos hacer jugadas más largas, recuperar tras pérdidas y jugar en campo contrario", destaca Rivero. A lo que Morcillo añade como propósito de intenciones, "ir mejorando desde la línea de detrás hacia delante".
El defensa albiazul no se hace ilusiones sobre una remontada en la clasificación porque "viene un mes de marzo muy duro. Queremos afianzarnos como un equipo serio y coger una buena dinámica". El medio, de su lado, proclama que "somos conscientes y responsables con la situación. Necesitamos seguir sacando buenos resultados".
Contra La Balona
Por último, respecto al cruce del domingo (Municipal de La Línea, 12.00 horas) contra la Balompédica Linense, Rivero avisa que "a partir de ahora todos los equipos se juegan mucho y el margen de error es menor". Análisis que amplía Morcillo señalando que "la Balona es un rival intenso y en su campo es un equipo muy complicado".