Nadie llora en el Recreativo por la eliminación de la Copa RFEF

Pese a ser apeado del torneo por un rival de Tercera División, en el Recre no hay ni crisis ni lamentaciones. Más bien, todo lo contrario.

En la mayoría de los supuestos, ser apeado por un rival de inferior categoría es motivo de crisis y lamentos. Pero no es el caso del Recreativo de Huelva respecto a su reciente eliminación de la Copa RFEF a manos del Torredonjimeno de la Tercera División. Porque en los despachos del Nuevo Colombino no se ha derramado ni una sola lágrima por el prematuro adiós de los albiazules al torneo federativo.

De hecho, el Consejo de Administración que preside Manolo Zambrano intentó por todos los medios que el equipo no disputase esta competición. Pero al contrario de lo que sucedió en temporadas anteriores, cuando los clubes podían renunciar a la Copa de la Federación, esta vez no fue posible. La RFEF se había cubierto las espaldas con un oportuno cambio de normativa que obliga a los clasificados a jugar la Copa.

El Recre, desde luego, no salió a perder en el Matías Prats. Ni tampoco hay que restar un ápice de mérito al conjunto de Jaén por su gesta. Pero tanto Claudio Barragán como los futbolistas sabían que esta Copa era más un estorbo que un aliciente para los planes deportivos del Decano, que pasan ineludiblemente por la Liga y por conseguir, como mínimo, el acceso a la Primera RFEF.

La influencia de la pandemia

En este sentido, los contratiempos derivados de seguir adelante en la Copa RFEF (alteración del 'planning' semanal, desgaste por los kilómetros acumulados, posibles lesiones...) no se ven compensados por las posibles recompensas. Porque, ¿para qué quiere el Recreativo una plaza en la Copa del Rey si por culpa de la pandemia no puede hacer taquilla incluso si le caen en suerte el Real Madrid o el Barça?

Premios en metálico

Y en cuanto a los premios económicos, más de lo mismo. El 'bonus' de 100.000 euros en caso de haber quedado campeón no pasaría de ser un parche para las múltiples deudas del Decano, que esta temporada tiene comprometidos más de 1,2 millones de euros en pagos sólo a sus cuatro principales acreedores.

Lágrimas y risas

Así las cosas es lógico que nadie llore en el Recre por la eliminación de la Copa. Más aún cuando el nuevo sistema de competición de la Segunda División B va a provocar que los onubenses se jueguen la temporada y quizás el futuro de los próximos años, en sólo 18 jornadas. Normal que las lágrimas y las risas se reserven para la Liga.