El Ciudad de Huelva baja de nivel
Circula estos días una broma en el entorno del baloncesto onubense sobre el Ciudad de Huelva. El más gracioso de los amigos suelta un "te apuesto lo que quieras a que este fin de semana el CDH no pierde". Entonces, el desinformado de turno acepta la apuesta y envalentonado pregunta, "a ver, listo, porqué no puede perder, si lleva cuatro jornadas sin ganar". Y el otro le replica, entre las risas generalizadas del resto, "porque este 'finde' no hay liga".
La gracia, y maldita sea la ídem, refleja a la perfección la nueva y deprimente realidad deportiva del máximo exponente de nuestro 'basket'. Desde que la directiva intervino para, y cito textualmente, "equilibrar la sostenibilidad del club", el primer equipo ha perdido todos los partidos que ha jugado, los dos últimos ya con Víctor Pontanilla en el banquillo. Y la situación difícilmente va a mejorar por una mera cuestión de cantidad y de calidad.
Desde que los dirigentes metieron mano en la primera plantilla, se han marchado seis de sus integrantes: los bases Gaizka Maiza y Rafa Salamé, el escolta Alfonso Ortiz; y los interiores Pau Treviño, Moha Niang y Pa Mor Diene. Esto es, se ha ido la mitad del equipo. A cambio sólo han llegado cuatro refuerzos: Pablo Ávalos, Raúl Timoner, Luka Paunov y Wasim El Otmani. Ninguno de los cuales llega siquiera a igualar las capacidades de los jugadores que ya no están en Huelva.
Y tampoco Víctor Pontanilla, el nuevo entrenador, alcanza a Íñigo Núñez. El resultado está a la vista. En un plis plas, el Ciudad de Huelva ha pasado de ser tercero y discutir el liderato, a quedarse, por primera vez desde que compite en la LEB Plata, fuera de los puestos del play-off de ascenso. La directiva ha destruido un aspirante al salto a la LEB Oro (alias Primera FEB), para construir un equipo que tendrá suerte si consigue evitar el descenso a EBA (Tercera FEB).
La única justificación aceptable para este desastre deportivo es el abaratamiento de los costes del primer equipo en el contexto de una crisis económica general del club, pero como la directiva ha ofrecido mil y unas explicaciones para su actuación (desde lo económico a lo personal) y no menciona cifras de ningún tipo, ahora mismo creer en las buenas intenciones de los rectores del CDH exige un acto de fe más que otra cosa.
Evidentemente, la plantilla se ha abaratado porque tiene menos y peores jugadores, pero este ahorro debe ser mínimo, pues apenas restan tres meses para el final de la competición. Y con el cambio en el banquillo no hay ahorro posible, pues tras todas las 'perrerías' que ha padecido, es previsible que Núñez no perdone ni un solo euro de su contrato. A cambio, la directiva juega con fuego, pues un descenso hará que patrocinios y abonos bajen en número y en cuantía.
Es cierto, que en la Liga EBA, los gastos también son menores, pero con unos ingresos igualmente reducidos, será muy difícil compensar la supuesta deuda generada en esta temporada y media en la LEB Plata. A no ser, claro esta, que el plan de la directiva sea rezar para que el equipo de Pontanilla logre una permanencia en la que pocos creen, para luego vender la plaza en la LEB Plata al mejor postor. Una maniobra difícil de vender al aficionado.
-ASÍ VA LA CLASIFICACIÓN
- CB Cáceres: 12-6
- Archena: 11-7
- ISB Iraurgi: 11-7
- Cultural Leonesa: 10-8
- Caja'87 Sevilla: 10-8
- Ponferrada: 9-9
- Huesca La Magia: 9-9
- Melilla: 9-9
- Albacete Basket: 9-9
- Ciudad de Huelva: 9-9
- Córdoba CB: 8-10
- CB Clavijo: 7-11
- UDEA Algeciras: 6-12
- Bizkaia Zornotza: 6-12
*El campeón jugará una eliminatoria directa por subor a LEB Oro con el campeón del otro grupo. Del segundo al octavo se clasifican para el 'play-off' de ascenso. Bajan los dos últimos y el tercero y cuarto por la cola juegan el 'play-out' de descenso.