Huelva vive una Semana Santa diferente desde casa
Sin pasos en la calle, los cofrades no olvidan que es Semana Santa y cada día lo disfrutan a su manera recordando otros años e incluso realizando actividades relacionadas con ésta a lo largo de estos días que están llenando las redes sociales y los balcones, terrazas y ventanas de símbolos.
Si pensamos en Semana Santa se nos viene a la mente pasos, olor a incienso, Huelva entregada con sus hermandades y mucha alegría de poder disfrutar de un evento único que se ha convertido en una cita ineludible cada año, "te guste o no", como ha admitido Rocío Fernández, vecina de la zona centro de la capital.
Para esta onubense, la Semana Santa significa "vivirla en las calles, con la gente, el ambiente, el olor a primavera, los bares repletos y Huelva más bonita que nunca". Fernández ha afirmado que "el hecho religioso de la fiesta es, quizás al final, lo de menos, porque lo que Huelva pide es poder echarse a la calle a disfrutarla". Pero esta opinión dista mucho de lo que hoy día vivimos en redes sociales y las propias calles de la ciudad. No hay pasos, no hay gente esperando en dinteles y esquinas revirás. Pero sí hay fe, música, símbolos y gestos, olor a incienso y esperanza.
Los onubenses no se han resignado a no vivir esta Semana Santa y han engalanado sus balcones con colgaduras de cada hermandad, con flores, velas e incluso incienso. Las marchas de Semana Santa están sonando tras el aplauso sanitario. Y las hermandades, cada una a su forma, invitan a sus hermanos a disfrutar de la Semana Santa.
El pasado Viernes de Dolores muchos onubenses ya iniciaron su particular Semana Grande compartiendo en redes momentos vividos en anteriores ediciones, así como con marchas, incienso y flores. Llegaba el Domingo de Ramos y el dintel del Polvorín no se abría para recibir a la majestuosa Santa Cena, pero sus vecinos sí querían hacer saber que estaban allí. Y para ello, flores en la puerta de la Iglesia (que se ha repetido en todos estos días de Semana Santa), y estampas de pasados años repletos de recuerdos. San Pedro lloraba sin poder disfrutar de La Borriquita y la Reina de los Ángeles.
Manuel Sánchez, vecino de "toda la vida de San Pedro", ha compartido con diariodehuelva.es sus sentimientos. "Me ha costado mucho no emocionarme al pensar que estos días no podría ver salir ni recoger a La Borriquita, acompañada de su cortejo de pequeños penitentes que inundan de alegría el porche de San Pedro. Tanto es así, que este domingo no pude salir a aplaudir porque mis vistas son directas al campanario y era demasiado".
En este sentido, el hermano mayor de la Hermandad de la Borriquita, Abraham Cruz García, ya confesaba a diariodehuelva.es cómo sería este día, después de todo un año de preparativos. "Lo viviremos a través de las nuevas tecnologías, y en nuestro perfil de Facebook tendremos incluso un recorrido virtual con imágenes de otros años".
Domingo de Mutilados y, como no, de Redención. Dos clásicos que se han quedado en casa pero con el fervor de sus hermanos que han hecho públicas estampas y emociones de cómo están viviendo estos momentos.
El Lunes Santo también ha sido diferente. Todos los onubenses miraban el cielo con miedo por la amenaza de lluvia, pero sin recordar que "no tendríamos que preocuparnos por nuestras imágenes porque no podemos salir tristemente. Pero nosotros en casa hemos puesto el incienso a las estampas que teníamos de este año y cada día vemos programas especiales", ha explicado Rafael Pérez.
Muchos han sido los cofrades de Perdón, Cautivo, Calvario y Tres Caídas que han compartido instantes y sentimientos relacionados con sus hermandades. "Son días difíciles, ¿quién nos iba a decir a nosotros que íbamos a vivir una situación así? Esto no se ha visto nunca en nuestras generaciones", ha expuesto María Rodríguez, de la hermandad de El Perdón. "Cuando no puedes salir por motivos meteorológicos se te parte el alma, después de un año preparando todo; pero no poder salir por el coronavirus es un sacrificio que hacemos todos aunque nos duela por responsabilidad y amor hacia nuestros hermanos", ha resaltado Ana Delgado.
Los días grises han acompañado estos días de Semana Santa. El Martes de Pasión tampoco ha sido muy diferente. Balcones engalanados, olor a incienso, marchas y una ofrenda muy especial. No se sabe quién, pero en la cerámica del Cristo de Pasión de San Pedro, flores, velas y rezos en forma de papel. Emoción de cada peatón que pasaba apresurado por llegar a casa. Lágrimas de vecinos, como los de Pérez Cubillas. Sentencia no salía y sus vecinos a la hora en la que la Cruz de Guía debía estar en la calle ponían su marcha. Minutos antes, y durante toda la mañana, los hermanos costaleros, las costureras de la hermandad, así como muchos devotos, brindaron flores a las puertas de su iglesia.
"Tristeza por no poder salir, pero nuestro Señor está siempre con nosotros y ya tenemos el contador para saber cuántos días nos quedan para el próximo Martes Santo", ha confesado una de las hermanas de La Lanzada. Pasión, Lanzada, Sentencia y Estudiantes. Cuatro hermandades 'de barrio' que mueven centenares de penitentes y devociones. "Me parecía mentira sacar al perro por San Pedro y que estuviera vacía. Parece un mal sueño que no es real. Solo vuelves a la realidad cuando los vecinos ponen música de Semana Santa o ves por redes sociales lo que comparten las cofradías y sus hermanos", ha explicado Adrián López.
Este Miércoles Santo cuatro cofradías debían realizar su estación de penitencia por las calles de la capital (Prendimiento, Santa Cruz, Victoria y Esperanza) . Sus hermanos, una vez más, han demostrado que la Semana Santa está siendo "más viva que nunca". Por ejemplo, la Hermandad de La Esperanza ha retransmitido, a través de sus redes sociales, la tradicional misa de hermanos que se realiza cada mañana antes de la procesión de la tarde-noche. Pero, durante su horario previsto de estación de penitencia, la hermandad ha decidido "realizarlo de forma virtual", desde los momentos previos a la salida, pasando por los puntos claves de su recorrido a través de vídeos de años anteriores.
Cada hermandad, cada municipio, cada onubense... Se encuentra viviendo una Semana Santa "especial, diferente, triste, pero a la vez alegre al comprobar que estamos unidos, desde la distancia", ha expresado Óscar Holgado (perteneciente a varias cofradías de la capital y "alguna más de varios municipios"). Compartir recuerdos, imágenes, sentimientos e incluso recetas típicas de estas fechas está provocando "que sigamos celebrando la Semana Grande pero desde casa. Es muy bonito ver cómo nos unen estos sentimientos: Fe y Esperanza". Fe en que "esto acabe pronto y Esperanza de que nos acompañe la Salud".