viernes. 26.04.2024
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Manolo Bogado: "Hay virus malignos ante los que es absurdo hacerse el valiente"

Manolo  Bogado se siente onubense y rocianero. Hoy hablamos con él para conocer su punto de vista sobre los tiempos de pandemia que vivimos.
Manolo Bogado: "Hay virus malignos ante los que es absurdo hacerse el valiente"

A Manolo Bogado, nuestro entrevistado del día de hoy, lo conocí a través de su hijo Álvaro, que es contertulio habitual de La Tertulia Recreativista, y puedo decir y digo que desde el primer momento hubo una gran empatía entre nosotros, lo cual me alegra, pues el patriarca de los Bogado es una de esas personas que merece la pena conocer.

Manolo  se siente onubense y rocianero. Si fue la señera Plaza de la Merced quien lo viera nacer y crecer ha sido Rociana el lugar donde ha desarrollado su vida familiar, profesional y social. Maestro por oposición desde 1968, ha ejercido como Maestro de Enseñanza Primaria, Profesor de  E.GB . y de Secundaria en la especialidad de Lengua Castellana, Literatura y Francés.

Su vida profesional transcurrió entre Ayamonte y Rociana. Ha sido el Magisterio su verdadera vocación, trabajando en algo tan apasionante y enriquecedor como la enseñanza. Entre sus aficiones se encuentran la lectura, escribir en prosa y en verso, como medio de satisfacción personal, y la investigación como vía para hacer aflorar documentos ocultos. Ha escrito con alguna periodicidad artículos de opinión en diarios y revistas. Durante ocho años dirigió el Boletín Parroquial de Rociana. Fruto de varios años de búsqueda entre legajos antiguos, publica en 2014 "La parroquia de Rociana, ermitas, capellanías y fundaciones", que recoge, a partir del siglo XV, episodios relevantes de lo que fue aquel templo que se erigía en el mismo solar que el actual y que desembocaría en el edificio parroquial que hoy contemplamos.

Es autor del Inventario parroquial,  de la parroquia de San Bartolomé Apóstol, de Rociana, con amplia documentación sobre imágenes, retablos y enseres.

Pues bien, después que nos explicará una pequeña semblanza de  lo que ha sido su vida, entramos en materia de la entrevista y la primera pregunta es obligada:

¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?

Podríamos referirnos a dos tipos de situaciones. Por un lado, a los problemas derivados del Covid 19. Ha sido un mazazo que ha azotado a la sociedad de manera global. Nadie está preparado para afrontar una pandemia de esas características; primero, por lo que supone de nueva; y, segundo, por las consecuencias que ha venido provocando en la población. Por otro lado, este problema, de ingente dimensión, ha coincidido en el tiempo con unos momentos políticos tremendamente convulsos, ante los que es necesaria una mesura y una forma de actuación para los que el Gobierno actual no tiene, ni capacidad de comprensión, ni herramientas para su solución.

¿Qué has hecho en tu día a día durante el confinamiento? ¿Dónde y con quién lo has pasado?

Lo que sensatamente hemos estado obligados a hacer: permanecer en casa, lo más aislado posible de los agentes externos que pudieran acarrearnos algún tipo de contagio. Así que, en casa, rodeado de los tuyos y saliendo sólo a lo estrictamente necesario.

¿Cómo cambiará la vida tras la pandemia, y sobre todo en El Condado?

Decir que la vida no ha cambiado nada tras la pandemia lo considero absurdo. Al menos ha servido para reflexionar sobre nuestras limitaciones y calibrar la necesidad de estar vigilantes. Después de lo ocurrido, y aún en la actualidad, mucha gente camina, si no con miedo, sí con más precaución. Ha salido a la luz las fisuras de un sistema sanitario que, siendo uno de los más avanzados, tiene importantes lagunas que remediar; sobre todo en materia de prevención y de asistencia a nuestros mayores, que ha sido el telón de Aquiles de la pandemia. Ha faltado sensibilidad política, y, sobre todo, humana.

Como en todos sitios, El Condado ha perdido parte de esa alegría en las calles y plazas, tan propias de nuestra Andalucía; aunque también nos ha servido para hacer aflorar la sensibilidad de mucha gente, que han dado lo mejor de sí mismos para ayudar a que la epidemia no se propagara.

¿Has tenido miedo durante estos meses?

Miedo e incertidumbre. El hogar nos ha dado seguridad, pero también pensaba en la posibilidad de encontrarte con el virus en cualquier Centro de Salud al que tuvieras que acudir de urgencia. Como apunté antes, nunca se estuvo preparado con material solvente ni se tuvo una firme voluntad de afrontar el problema con seriedad y eficacia. Y no es una opinión personal. Que se lo pregunten a los propios profesionales sanitarios. No podemos olvidar que hemos sido uno de los países del mundo con mayor número de muertos. Ante esta situación, el miedo a la pandemia resultaba de lo más lógico.

¿Qué proyectos tienes para el futuro?

Creo que hay que vivir el día a día sin pensar demasiado en el porvenir. Dedicarte a los tuyos y hacer lo que te gusta será la mejor manera de realizarte. Eso sí, sin olvidarse que hay por ahí virus malignos ante los que es absurdo hacerse el valiente.

¿Qué es lo que has echado de menos en estos meses de pandemia?

Pues a decir verdad, algo de lo más simple, aunque pudiera parecer ingenuo: acudir al mercado de Huelva, observar todo lo que nos ofrece y tomarme un café con churros en Casa Miguel. Y también pasear, entrar en una librería o tomarme un helado en la calle Concepción.

¿Cómo venderías Huelva para atraer inversores y turismo?

Si te soy sincero, José Luis, a mí me gusta Huelva como es. No me apetecería una Huelva cuyas playas fueran un nuevo Benidorm, donde hay que acudir a las 6 de la mañana para encontrar un metro cuadrado de playa para plantar la sombrilla.

Obviamente sí me gustaría que Huelva tuviera buenas comunicaciones. No es de recibo que en el siglo XXI tardemos una hora y media en tren desde Sevilla. Y no digamos a la Sierra, la gran olvidada por los gobernantes, sean del signo político que sean. Sin buenas comunicaciones no puede haber desarrollo. Y lo pienso más por el bienestar de los propios onubenses que por los foráneos que puedan visitarnos. Faltan muchas infraestructuras. No existen apenas industrias complementarias derivadas de las fábricas del famoso Polo de Desarrollo que nos invadió en su día. Tampoco el campo se complementa con industrias afines, aprovechando nuestro potencial frutícola. Hace falta un Museo del Fútbol; reavivar nuestras fuentes, años tras años taponadas por una sequía de agua continuada. La potenciación de cruceros, de ferrys, los paseos por la ría, el afianzamiento de nuestros lazos con Iberoamérica… Aún no se ha construido una escultura monumental sobre la hazaña descubridora que por aquí se gestó. No existe una concienciación política de lo que ello significa y de la trascendencia que puede tener para el acercamiento de inversores. Las 3.000 horas de sol al año deben ser un acicate para el asentamiento de industrias generadoras de energía solar. Y la potenciación del acercamiento con Portugal, un aditamento que pueden actuar de enlace para el desarrollo económico de nuestra tierra, arrinconada de por vida.

¿Crees que si hay un repunte, volveremos al estado de alarma?

Los acontecimientos apuntan a ello. Si Huelva ha permanecido con escasa incidencia de coronavirus dentro del espectro nacional, precisamente por su emplazamiento geográfico, aislamiento y escaso desarrollo, ahora, con la llegada de visitantes a nuestras playas, la situación se está revirtiendo. Es previsible que los casos aumenten considerablemente y que no se descarte que volvamos al estado de alarma al término del verano. Hemos de poner énfasis en la necesidad de protegernos. La alegría que nos trae el verano no debe ser obstáculo para que abandonemos o suavicemos las precauciones necesarias. Si fuese así estaríamos ante un claro ejercicio de irresponsabilidad ciudadana.

¿Crees que las creencias religiosas han sido importantes en estas circunstancias?

La Religión es ese fuerte asidero al que nos agarramos en circunstancias difíciles. No cabe duda que apoyarse en la fe cuando pasamos por dificultades es una ayuda considerable. El creyente tiene en Dios un eficaz aliado que puede ayudarle a salir de situaciones penosas, o incluso a aceptar con resignación las consecuencias negativas  que puedan derivarse de una pandemia.

Cualquier otra cosa que quieras decir.

Agradecerte a ti, José Luis, esta invitación al diálogo. Siempre demuestras con creces lo que te interesan las cosas de Huelva. Lo vienes haciendo desde hace muchos años en los diferentes medios de comunicación.