La vecina 'orgullosa' de Vox
Tras la sentencia del Tribunal Supremo que prohíbe a las administraciones el uso de banderas no oficiales en los edificios públicos, la polémica ha estado servida, provocando la reacción de los distintos colectivos y ciudadanos.
Han sido muchos los que, después de la reciente celebración del Día del Orgullo LGBTIQ+ han lucido orgullosos las banderas arcoíris para visibilizar a este sector y exigir sus derechos.
Pero, a pesar de que ya han pasado unos días de la fecha oficial del 'Orgullo', en la capital onubense sigue ondeando la bandera multicolor más "orgullosa" que nunca.
Y si no, que se lo digan a Zara Baldallo, vecina de la Calle Rábida, que ha decidido colgar la simbólica bandera justo encima de la sede del Grupo Municipal de la formación de ultraderecha Vox.
La fotografía se ha hecho viral en las redes y ha recibido el aplauso de muchos. Incluso, la presidenta de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, publicaba en su perfil de Twitter la curiosa escena.
Me pasan esta imagen de Huelva. Poesía ? pic.twitter.com/GgrYXvMw5M
— Teresa Rodríguez ۞ (@TeresaRodr_) July 2, 2020
En diariodehuelva.es hemos podido hablar con la protagonista de este gesto reivindicativo que está dando la vuelta a España.
"El poner una bandera multicolor en el balcón es un símbolo de libertad, tolerancia, respeto...no buscaba la crispación ni el malestar de nadie. De hecho hace varios meses colgué una bandera feminista y no tuvo tanta repercusión como ahora", cuenta Zara a este diario.
La onubense no lo ha hecho con ninguna intención política, sino por un valor personal y humano derivado de su trayectoria familiar, educativa y laboral, ya que trabaja en una entidad del tercer sector de la acción social como psicóloga, con personas solicitantes de asilo y protección internacional y está acostumbrada a convivir con gente de diversas culturas e ideologías.
En su vida privada, asegura, tiene amigos de muchas nacionalidades (su marido es estadounidense), la convivencia intercultural está presente en su día a día y con este gesto de colocar la bandera "ha pretendido visibilizar el hecho de que aunque haya un partido de una ideología muy opuesta a la de otras personas, al igual que nosotros sabemos convivir con otras formas de pensar, ellos tienen que entender que haya un vecino que defienda otros colores".
"Estoy segura de que habrá votantes de Vox que defiendan también los colores de la bandera, pero lo cierto es que dentro de su ideario no parece que sea una de sus prioridades el apoyar la causa de esta lucha", recoge.
La intención de esta vecina de Huelva con este gesto, asegura, no ha sido generar polémica: "Soy pacífica y mis armas siempre han sido la cohesión, la convivencia y la diversidad. Esta calle es un ejemplo de ello, llena de vecinos muy diferentes, que, entre todos, formamos una gran familia, fruto de la libertad y el respeto", manifiesta.
