Cerrados los seis pasos fronterizos entre Huelva y Portugal

Continúan las restricciones de movilidad provocadas por la crisis del coronavirus. Ahora también se cierra la frontera de Huelva con Portugal para evitar que el Covid-19 siga expandiéndose. El país vecino, que registró ayer su primera víctima mortal por coronavirus, suspendía las conexiones aéreas y ferroviarias y reforzaba los controles en la frontera terrestre, limitada a nueve pasos en toda España que, a partir de hoy, sólo permitirán el cruce de mercancías y de trabajo.

Así lo anunciaban ayer el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska y el ministro de Administración Interna portugués, Eduardo Cabrita, ante la pandemia causada por el Covid-19.

Solo para trabajar y las mercancías

El cierre se ha llevado a cabo esta medianoche, con controles en los seis pasos fronterizos en Huelva por los que solo están accediendo trabajadores y mercancías.

La Guarda Nacional Republicana (GNR) de Portugal y la Policía Nacional se están encargando del control. En las primeras horas del cierre todo está siendo tranquilo, con escaso tráfico aunque con la confusión propia del primer día, según la Policía.

Los alcaldes de los municipios que hacen frontera con Portugal han destacado también la "normalidad" en el primer día de control fronterizo terrestre salvo algunas aglomeraciones "puntuales" en el puente internacional sobre el Guadiana debido a los controles.

Los trabajadores transfronterizos les están pidiendo certificados de empresa para corroborar que están trabajando en estos países.

Quedan, de este modo, cerrados los seis pasos transfronterizos por carretera de la provincia: el Puente Internacional del Guadiana que une Ayamonte con el país luso, cuatro pertenecientes a la Diputación de Huelva (la que conecta El Granado con Pomarao; la conexión viaria entre el municipio onubense de Paymogo y el lusitano de Serpa - a través del puente sobre el río Chanza-, el acceso de Encinasola a la villa portuguesa de Barrancos y la carretera que une Rosal de la Frontera con el municipio portugués de Picoitos) y la carretera nacional N-433, que une la autovía A-66 con la frontera portuguesa a la altura de Rosal de la Frontera.

De este modo, solo se permitirá el tráfico de mercancías, de ciudadanos nacionales o residentes que quieran regresar a su país, personal diplomático, casos de reunión familiar en zonas fronterizas, acceso a cuidados de sanidad cuando esté protocolado que se haga al otro lado y salida de ciudadanos extranjeros que residan en otros países de la Unión Europea.

Pero no en todos los pasos se permiten el cruce de trabajadores y mercancías. De hecho, solo es posible en Rosal de la Frontera y Ayamonte. El resto están cerrados a cal y canto como en Paymogo.

Impacto económico

La alcaldesa del municipio, Natalia Santos, confiesa que desde el Ayuntamiento “son conscientes de que el cierre de la frontera podría tener importantes consecuencias socioeconómicas, dado que hay muchos españoles que viven o trabajan en Portugal y viceversa”. Consecuencias, asegura la primera edil, que se añaden a la estrecha relación comercial existente entre ambos países, que podría afectar a numerosas empresas y a los transportes, que podrían ver limitada su actividad. No obstante –ha añadido-, se trata de una medida necesaria que se prolongará por espacio de treinta días".

Desde la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Ayamonte (Apyme Ayamonte) afirman estar de acuerdo con la medida: "Entendemos que es una medida necesaria para parar el virus, las empresas que necesiten pasar a Portugal para desarrollar su trabajo lo harán, pero en Ayamonte estamos todos concienciados con la situación y hace días que los negocios han dejado de trabajar al público. Lo importante es la salud de las personas y haremos lo necesario para que Ayamonte siga teniendo "0" casos de Coronavirus", ha explicado a diariodehuelva.es la presidenta, Bella Carballo.

Igualmente, la secretaria de Apyme Ayamonte, Carmen Báñez, asegura que, a pesar de estas restricciones, "las empresas de transportes de mercancías pueden seguir pasando, por lo que no generará un gran impacto negativo a nivel empresarial".

Según Báñez, "se trata de una medida que perjudica más a los ciudadanos de ambos países que a las empresas. El comercio al por menor podría ser el más perjudicado, pero al mantenerse cerrado, no les afecta".

En Rosal de la Frontera, su alcalde ha apuntado que es "muy grave" debido a que la venta de combustible se verá "afectada" ya que "una bombona de butano en Portugal vale el doble que aquí", al igual que los comercios locales ya que "los portugueses realizaban la compra aquí". No obstante, Carlos Vázquez considera que esta medida de cierre de fronteras "tenía que haberse dado hace ya varios días".

Cortada también la conexión fluvial

Se suspende, además, la conexión fluviale entre Ayamonte y Portugal. Tal y como ha informado el consistorio ayamontino, la empresa Transporte Fluvial del Guadiana ha anunciado también el cierre, por orden del Gobierno luso, de su servicio de transbordador/ferry que une Ayamonte con la localidad portuguesa de Vila Real de Santo Antonio. El corte de este servicio se prolongará desde durante un mes desde este martes.

¿Por qué el cierre de fronteras?

La medida responde al intento de blindar las fronteras ante el avance del Covid-19, que en Portugal suma 331 casos confirmados y acaba de cobrarse el primer fallecimiento, confirmado el pasado lunes. La víctima era un hombre de 80 años con patologías previas y que estaba hospitalizado desde hace varios días.

Ayer el número de casos en Portugal aumentó un 35 % y las regiones más afectadas son Lisboa (142), Oporto (138), Centro (31) y el Algarve (13).

Un total de 139 personas están hospitalizadas, 18 de ellas en cuidados intensivos, y un grupo de 74 ciudadanos de origen nepalí permanece en cuarentena en el Algarve.

Por su parte, Huelva mantiene los seis los positivos en Covid-19Huelva, los mismos casos desde el sábado y sigue siendo la provincia andaluza con un menor número de casos.

De los seis han trascendido detalles solo de cuatro. El primer caso confirmado fue el de una mujer italiana de 70 años que estaba de visita. El segundo es una persona de su entorno. Y de las dos últimos personas contagiadas, una es de Valverde del Camino según ha publicado el Ayuntamiento en sus redes sociales y otra de Punta Umbría, confirmado también por el Ayuntamiento. De los dos restantes, nada se sabe hasta el momento. Todos están en seguimiento sanitario en sus domicilios.