El sector de la chirla en Punta, “indignado” por no tener ayudas de las paradas por toxinas

La Cofradía de Pescadores critica los pagos desestimados amenaza con llevar a la Junta a los tribunales.

El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Punta Umbría, Ángel Mendoza, ha manifestado su "indignación" ante la denegación por parte de la Junta de Andalucía de las ayudas por el cierre temporal del caladero por motivos de toxinas DSP en los bivalvos, en concreto, en la especie denominada chirla.

Mendoza ha explicado que, al parecer, "tan sólo nueve embarcaciones puntaumbrieñas de las 47 que se dedican a la captura de chirla y que tramitaron las ayudas desde sus propias gestorías, Asociación de Armadores y Cofradía de Pescadores, han recibido resoluciones estimatorias de las mismas por parte de la Dirección General de Pesca, y que, dicho sea de paso, pese a tales resoluciones, aún no han cobrado".

El resto de embarcaciones, señala la Cofradía, comenzó a finales de la semana pasada a recibir resoluciones desestimatorias de tales ayudas basadas, según dice la propia Junta de Andalucía, en la "ausencia de un requisito formal previo a la tramitación de las mismas, exponiendo que no se ha acreditado la inactividad durante la parada mediante certificaciones de las Capitanías Marítimas de depósito de Rol o ausencias de despacho para la pesca”. Resoluciones que se basan en un propuesta de resolución de fecha 5 de noviembre de 2014, “habiendo tenido la Junta tiempo más que de sobra para dictar la resolución oportuna, y no mantener en vilo al sector, probablemente por razones de miedo político”, recalcó el patrón mayor.

En cuanto al requisito formal, Ángel Mendoza entiende "perfectamente acreditable" la inactividad con los datos de las “cajas verdes” (sistema de localización) de las distintas embarcaciones. Es más, expone que "es de extrañar que tras ser solicitados los datos de la caja verde por la propia Cofradía de Pescadores a la directora general de Pesca, estos hayan sido denegados alegando que son datos de carácter protegidos, sin embargo dichos datos son utilizados por la propia Junta conforme mejor les conviene, por ejemplo para sancionar a los barcos".

Ahora que disponen de medios para saber si los barcos han salido a faenar o no, "no hacen uso de ellos", lamenta Mendoza. "Conocen perfectamente que las embarcaciones permanecieron paradas y está en juego el pan de muchas familias”, asegura el patrón mayor de la Cofradía puntaumbrieña.

“Se están basando en motivos absurdos para no pagar y que no fueron impedimento cuando se solicitaron las ayudas en una anterior parada temporal por toxinas", recuerda Mendoza, que ha recalcado que en los fundamentos de las propias resoluciones desestimatorias aparece el "verdadero sentido" de la norma en la cual se basan las ayudas, que no es otro que “el carácter compensatorio por la pérdida de ingresos como consecuencia de una falta de actividad del buque al haberse cerrado el caladero de manera temporal”. Carácter que es "plenamente demostrable" a través, tanto de las cajas verdes, como de otra documentación que acredita tal falta de actividad (bajas en la seguridad social de los tripulantes, por ejemplo).

Ángel Mendoza ha mantenido reuniones tanto con la Delegación de Pesca en Huelva, como con Capitanía Marítima para intentar solucionar el tema de forma “amistosa”, no obstante, no duda en poner a disposición los medios a su alcance desde la Cofradía de Pescadores para que tanto marineros como armadores puedan “cobrar lo que por Ley corresponde y que injustamente se les deniega, incluso acudiendo a los tribunales si es necesario, hasta agotar todas las vías posibles” .