La Sierra estrena una nueva subestación eléctrica para paliar el déficit de la zona
Las instalaciones se encuentran cerca de Aracena y se da respuesta la reivindicación de una comarca con una "inyección energética".
El alcalde de Aracena, Manuel Guerra, y el presidente del Consejo Territorial de Endesa en Andalucía y Extremadura, Antonio Pascual, junto al director general de Endesa en el territorio, Francisco Arteaga, han inaugurado este jueves la nueva subestación denominada Moleona, que se sitúa próxima al municipio aracenense.
De este modo, según ha informado la compañía en una nota de prensa, la nueva instalación, que entra en servicio este jueves tras las pruebas de funcionamiento y energización realizadas en los últimos días, supone "una nueva inyección energética a la localidad, en particular, y a esta zona del norte de la provincia de Huelva".
Así, su puesta en servicio da respuesta a la demanda de ampliación de potencia para los habitantes de esta comarca, de manera que, con ello, se mejorará y asegurará la calidad del servicio eléctrico tanto en la zona urbana como en la rural al suponer una interconexión más en alta tensión (66 kilovoltios) y una nueva línea en media tensión (15 kilovoltios) que distribuirá energía eléctrica a la localidad serrana.
Con una inversión de 2,7 millones de euros, aportados por diversos promotores públicos y privados de la zona, la subestación refuerza el transporte y la distribución de energía eléctrica al facilitar el mallado de la red, lo que permitirá más agilidad y rapidez en caso de registrarse alguna incidencia en el suministro a través de las líneas que ya existían.
En concreto, desde ella se alimentará eléctricamente también a la zona urbana de Aracena, convirtiendo las líneas que hasta ahora lo hacían, desde las subestaciones Dehesa y Repilado, en alimentaciones complementarias. De igual manera, las nuevas infraestructuras permiten reconfigurar de una forma "más óptima" la red y realizar un reparto de cargas "más equilibrado".
Construida con tecnología de última generación y con elementos eléctricos de avanzada tecnología, que otorgan mayor capacidad y resistencia, la subestación realiza la transformación de energía de alta a media tensión (66 a 15 kilovoltios) gracias a un transformador de 10 megavatios de potencia; esta capacidad es ampliable ante futuras necesidades por crecimiento de la demanda, como también lo es la posibilidad de ampliar las salidas de media tensión para la distribución a mercado. Si se inaugura ahora con una línea de media en servicio, está previsto que en un futuro pueda hasta triplicarse esta posibilidad.
Esta línea ahora en servicio, --que recorre cuatro kilómetros desde la subestación hasta el casco urbano del municipio--, ha sido tendida tanto en aéreo como soterrada; en la parte que lo hace de forma aérea, los apoyos (postes) están preparados en material y resistencia para sustentar un segundo circuito, esto es, que en la práctica una sola hilera de torres sirve para llevar dos líneas con mercados distintos.
Por su parte, la nueva línea de alta tensión (66 kilovoltios) que ha sido ejecutada para la alimentación de la subestación interconecta ésta con las subestaciones próximas denominadas Dehesa, Embalse Aracena y Presur, lo que aumenta las vías de alimentación y redistribución de la energía en caso de que en alguna de ellas hubiera una avería.
Asimismo, para su construcción (los cables sustentados por 19 apoyos recorren casi 5 kilómetros y medio) se ha observado la normativa medioambiental "más estricta", como la instalación de sistemas anticolisión de aves, antielectrocución o antinidificación con el fin de minimizar el riesgo para la avifauna. Para ello se ha contado en todo momento con el apoyo y asesoramiento de la Administración regional competente en materia medioambiental y con los responsables del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche.
La subestación incorpora también "avanzada tecnología y elementos de última generación" que permiten hacer frente a las variaciones de tensión que presenta la red de transporte (sistemas de regulación en carga) o el Sistema Integrado de Control y Protecciones (SICP), herramienta que facilita "la maniobrabilidad y un mejor y mayor control sobre la instalación al interconectarla con el Centro de Operación de la Red de la Compañía, situado en Sevilla".