La Fiscalía archiva la denuncia por delito de odio contra el alcalde de Cartaya
El fiscal considera que sus declaraciones fueron desafortunadas pero no constituyen delito por incitación al odio
La Fiscalía de Huelva ha decidido no seguir adelante con la denuncia por delito de odio presentada contra el alcalde de Cartaya, Manuel Barroso, tras analizar los vídeos en los que vinculaba a personas inmigrantes en situación irregular con hechos delictivos ocurridos en el municipio.
Los hechos se remontan a unas declaraciones realizadas por Barroso a raíz de un apuñalamiento registrado en el municipio. En ellas, relacionaba a la inmigración ilegal con un aumento de la criminalidad, señalando que un elevado porcentaje de los delitos cometidos en la localidad estaría asociado a este colectivo. El alcalde mostró además varias armas incautadas en operativos recientes, asegurando que algunas de ellas pertenecían a personas sin papeles.
Aunque la Fiscalía reconoce que el contenido de sus declaraciones fue inapropiado y desafortunado, considera que no se encuadra dentro de los límites penales del delito de odio. Según el Ministerio Público, las manifestaciones del regidor no tuvieron como fin incitar a la violencia o al rechazo contra un grupo por su origen, sino que se expresaron dentro de un discurso político, centrado en criticar las políticas migratorias del Gobierno central.