Sociedad

40 asentamientos de infraviviendas se reparten por la provincia del este al oeste agrícola

Nave de Baldifresa al fondo
Ahora mismo hay una cuarentena de asentamientos de las mismas características que el que ardió junto al Polígono San Jorge ubicados principalmente en Moguer, Lepe y Lucena del Puerto,

De nuevo el fuego se ha vuelto a cebar con los más desfavorecidos en un asentamiento de inmigrantes. Centenares de personas han perdido lo poco que tenían para poder subsistir, en el incendio que se declaró a mediodía del sábado en el poblado de chabolas donde “vivían”, en las inmediaciones del polígono industrial San Jorge de Palos de la Frontera.

Imagen desoladora

Un espacio semi-urbano donde en esta época del año vivían unas 600 personas distribuidas en unas 400 chabolas mínimas.

Restos del campamento

Ahora mismo hay una cuarentena de asentamientos de las mismas características que el que ardió junto al Polígono San Jorge ubicados principalmente en Moguer, Lepe y Lucena del Puerto, según los datos que manejan ONGs o Cruz Roja.

Afortunadamente no hubo que lamentar ninguna víctima humana, aunque el siniestro se saldó con una persona herida con quemaduras en brazos y torso y un bombero por inhalación de humo, además de numerosas pérdidas y daños materiales.

En la mañana del domingo el panorama del poblado era desolador. Mientras unos inmigrantes observaban atónicos e impotentes lo que hasta hacía poco habían sido sus moradas, otros trataban de salvar algunas pertenencias de las chabolas calcinadas y todavía humeantes o recogían chatarra para poder recuperar algún dinero.

Vehículos afectados por el fuego

Para algunos todo su patrimonio se ha quedado reducido a una maleta y una bombona de butano.

Se desconoce la causa del incendio y tal vez nunca se sepa. Hay muchas conjeturas y rumores: una hoguera, una vela, una cocina, y que incluso pudo ser provocado. Cualquier cosa.

Lo cierto es que los materiales empleados en la construcción de estas infraviviendas: madera, cartón y plástico, son el caldo de cultivo excelente para un incendio.

Uno de los pocos enseres que se libraron de las llamas

De una vez por todas hay que terminar con este drama humano. Estos inmigrantes que viven en condiciones infrahumanas, carentes de los servicios más básicos para la vida diaria, como es el agua para poder asearse, son personas que vienen a nuestro país a ganarse la vida horadamente y generan riqueza con su trabajo, por tanto, forman parte de nuestra sociedad y nadie debe mirar hacia otro lado porque será culpable de su drama.