Jesús Pardo: "El coranavirus es tan listo que está intentado ahora burlar las vacunas"

Me hace ilusión el poder charlar hoy con el doctor Jesús Pardo para realizar esta entrevista en tiempo de pandemia, y, con el que tengo una gran sintonía

Me hace ilusión el poder charlar hoy con el doctor Jesús Pardo para realizar esta entrevista en tiempo de pandemia, y, con el que tengo una gran sintonía. Yo era buen amigo de su padre Antonio Pardo, que nos dejara el pasado año, y a través de él conocí a su hijo, que es una mezcla de su padre y su madre, lo que quiere decir que aparte de buena persona es cordial, agradable, solidario, empático, optimista, Sevillista, también Recreativista, Baratillero... y, con un gran sentido de la amistad.

Jesús nació en Sevilla en 1965, Licenciado en medicina y cirugía 1982/88 en la facultad de la capital hispalense, especialista en medicina familiar y comunitaria en la Unidad de Huelva 1990-92. Médico de familia en el centro de salud El Torrejón desde febrero de 1993 en el que continúa, ejerciendo como Director del mismo desde 2000. Tutor docente de la especialidad desde 1994, acreditado con calidad excelente por la Agencia de calidad sanitaria de Andalucia (ACSA), vicepresidente de la Sociedad Andaluza de Medicina Familiar y Comunitaria (SAMFYC). Autor de varios capítulos en la guía nacional de medicina de familia, 35 Artículos de investigación en revistas nacionales, Participando en diversos proyectos de investigación en atención primaria.

Casado, con dos hijos, residente y amante de Huelva y su provincia.

Cuando lo llamo para concretar una cita y charlar un ratito, se encuentra haciendo el camino de Santiago en bicicleta, por lo que hay que esperar que acabe de pedalear. Pero llega el momento de la entrevista que resulta amena y entrañable, tal y como es nuestro invitado de hoy

P. - ¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?

R. - Cuando nos creíamos la humanidad que éramos indemne a todo, un bichito minúsculo vuelve a ponernos en la más absoluta indefensión. La situación nos está poniendo a prueba como personas y como comunidad. Están siendo momentos muy difíciles para todos.

P. - Crees que durará mucho esta pesadilla de pandemia?

R. - Pues creo que esto no ha terminado, como muchos piensan, que va ser duradero por desgracia, en función a dos circunstancias, uno a los cambios que el virus tenga en estos meses, sobre todo en países subdesarrollados con bajo índice de vacunación, pues el coronavirus es tan listo que cambia sus ataques y creo ahora está intentando burlar a las vacunas.

Y la segunda circunstancia depende del comportamiento humano y del mantenimiento de las medidas de seguridad, a pesar de que todo indique que pueden no ser necesarias. A ver qué ocurre, esta falsa calma chicha, y la relajación consiguiente no me gusta mucho.

P. - ¿Cómo cambiará la vida después de la pandemia y sobre todo el mundo de la sanidad?

R. - Nuestra vida se ha dado cuenta que somos más sensibles e indefensos que lo que creíamos. Todo ha cambiado en año y medio. No creo se alcance la manida “normalidad” término político nada acertado, usar mascarilla, mantener distancia y la higiene de manos no es normal. El miedo generado a todos tampoco.

Nos debemos dar cuenta de que todos dependemos de todos y de cuáles son las cosas importantes en la vida, la salud y la familia. Si no aprendemos esto después de lo sufrido habremos perdido un tiempo precioso y miles de vidas en este trago.

La sanidad ha dado un cambio adaptativo radical . Desde el inicio de la pandemia. Seguimos cada día atendiendo a los pacientes en persona, salvaguardando la seguridad suya y nuestra es el objetivo. Hemos cambiado las formas de atención, y para temas burocráticos o secundarios hemos usado otros métodos más ágiles telefónicos y telemáticos, que resuelven problemas de forma eficaz, evitando desplazamientos y riesgos.

P. - ¿Cuáles han sido los momentos más difíciles para los sanitarios?

La situación al inicio de la pandemia de desconocimiento, no sabíamos a qué nos enfrentábamos, era como la medicina de la Edad Media, valorando cada detalle, aprendiendo cada día a que ocasionaba el virus, probando múltiples tratamientos empíricos para ver cómo resultaban.

Y sobre todo los efectos tremendos del virus, como afectaba a personas jóvenes y como las mataba en días sin poder hacer nada. Enfrentarte a la muerte de más de 1000 personas al día semanas seguidas , a veces cerca de 2000, era duro cada mañana, comparando era como ver desaparecer la población de muchos pueblos de Huelva cada día.

Después los sanitarios hemos pasado de héroes a villanos, de la utilización política del aplauso de agradecimiento, que al principio fue sensato y agradecido, a que los sanitarios no queríamos ver a los pacientes, cuando no hemos dejado de hacerlo desde el inicio de la pandemia.

Y sobre todo en los periodos entre olas, la falta de seguimiento de las recomendaciones por parte de la población y que hacía predecir los rebrotes ocurridos, mientras los sanitarios nos jugábamos la vida cada mañana, muchos estaban de botellón y propagando el virus.

P. - ¿Cómo valoras la labor de los políticos en general ante esta pandemia?

R. - Pues aquí hay que destacar que mientras la gestión por parte de nuestra comunidad de la Junta de Andalucía ha sido ágil y eficiente, con algunos momentos de dudas pues lo desconocido lo generaba, nuestro gobierno central ha dejado mucho que desear en la gestión y coordinación de la pandemia.

Se han vertido muchas incongruencias por parte del gobierno, se ha desinformado a la población de la situación, no se han comprado los materiales de protección adecuados, y otros países con gobiernos más orientados y de mayor respeto mundial sí los tenían, se han manipulado las cifras de fallecidos en varias ocaciones y en general el gobierno ha tenido poca transparencia.

No han gestionado adecuadamente el tema de las residencias de ancianos, no han aparecido ningún ministro por allí para no dar la cara ni implicarlos en ello. En fin mucho que mejorar

Pero eso sí, en los últimos meses con la vacunación han querido marcarse mucho mérito , cuando por ejemplo a Andalucía le han suministrado vacunas de forma más lenta y en menor número en el inicio.

P. - ¿Has pasado miedo en algún momento?

R. - Claro que sí, mucho y cada día, como todos, pero sobre todo en el confinamiento, cuando las calles estaban vacías y tú cada mañana dejabas a tu familia y atendías a pacientes con el virus, te pasabas horas disfrazado de astronauta, al inicio con menos protección, y sin tests... Sin saber si luego transmitías el virus a tu casa. Mantener aislamiento en casa, o viviendo fuera para no contagiarlos.

Ver cómo morían cada día compañeros que hacían lo mismo que tú, sentir que esto no lo controlaríamos que no llegarían las vacunas.

Y los momentos más difíciles, cuando el bicho entra en tu familia y te arrebata en cinco días a quien te dio la vida y quien te enseñó a ser persona, de pronto te hace ver que todo ya no será igual. Estar enterrando a tu padre en la soledad más absoluta y tener a tu madre ingresada sin saber si en unos días volverás al cementerio... pero Dios nos concedió una nueva oportunidad de vivir algo más con ella .

P. - ¿Qué proyectos tienes para el futuro?

R. - Sobre todo vivir, estar al lado de mi familia disfrutando de ella y para eso no descuidar el bien más preciado que tenemos, la salud. Y como no, consolidar mi carrera profesional como médico de familia en Huelva.

P. - ¿Qué necesita Huelva para despegar de una vez?

R. - Creernos que Huelva tiene el valor que posee, que los onubenses deben darle y reconocer la importancia que tiene. Y luchar por ella, no solo de palabra. Valorar su belleza y recursos de verdad. Exigir a los políticos nacionales y locales todo lo que le han negado a Huelva, respecto a mejoras de recursos y comunicación.

P. - ¿Qué significa para ti Huelva?

R. - Para mi Huelva lo ha significado todo en mi vida, me ha consolidado como persona y como profesional. Mis hijos son choqueros y lo llevan con enorme orgullo cada día. Aunque como sabes nací en Sevilla , toda mi vida profesional la he desarrollado en Huelva donde realicé mi especialización en medicina de familia, en el Hospital Manuel Luís García, y a continuación durante ya 28 años en el centro de salud el Torrejon. La calidad de vida en Huelva es de las mejores de España, y eso a veces no se ve por los onubenses. A Huelva le debo mucho.

P. - ¿Cuáles son tus mejores y peores recuerdos profesionales?

R. - Mis peores momentos evidentemente han sido los vividos en este año y medio por todo lo que ha supuesto y ya hemos comentado

Los mejores cuando después de mucha lucha por cambiar y mejorar el Centro de Salud, inauguramos el actual, de forma que podíamos ofrecer una asistencia de más calidad. Algo que debemos a la población de nuestros barrios y su empeño en conseguirlo.

P. - ¿Cómo te ha ido tu aventura ciclista por el norte de España?

R. - Una experiencia maravillosa y enriquecedora, ir al encuentro del Santo te refuerza en el camino, llenando tu espíritu de un espíritu especial. Hemos ido en bici desde Ponferrada hasta Santiago por el Camino de Invierno.

P. - Cambiando de tercio que dirían los taurinos, ¿cuáles son las actividades de la peña Sevillista de Huelva que tú presides?

R. - La Peña, aún sin tener nunca sede física, es un punto de encuentro de los sevillistas que residimos en Huelva. Somos un grupo pequeño, 30 socios, pero que vamos juntos a los partidos y tenemos 2-3 reuniones anuales de encuentro y convivencia.

P. - ¿Qué es el Sevilla para ti?

R. - Es uno de los pilares en mi vida, mi padre me enseñó desde pequeño a tener ese sentimiento y ese valor siempre presente. A estar en los momentos malos y buenos, a respetar siempre al contrario y a dar valor al esfuerzo de poder ir cada año como socio, a pesar de las dificultades de esa época, desde hace ya 49 años, era el regalo anual, de mi padre, por acabar el curso, siempre digo que llegue a ser médico por el estímulo de tener cada año ese carnet, además de otros motivos vocacionales.

P. - ¿Quiénes han sido tus referentes en esta vida, personales, profesionales y deportivos?

R. - Mi referentes siempre han sido mis padres, que siempre nos enseñaron que a pesar de su humildad siempre se pueden conseguir los objetivos propuestos, con trabajo diario, esfuerzo y la Fe en Dios.

A nivel profesional, los médicos árabes cordobeses siempre me han parecido que han aportado mucho a la medicina.

Como deportivo creo que Rafael Nadal representa todos los valores que debemos tener y conseguir . A nivel balompédico mid ídolos sevillistas fueron Enrique Montero y Julián Rubio.

P. - ¿Qué recuerdos guardas de tu niñez y soñabas ser de mayor?

R. - La verdad que doy gracias a Dios por la familia que me ha correspondido disfrutar, y de ellos son los mejores recuerdos, de veranos en el camping catapun del Rompido y de La Antilla. De miércoles santos en mi Baratillo, todos juntos y acompañando a mi padre que procesionó orgulloso hasta el año antes de su muerte, 88 años, rodeado de sus hijos y nietos . Y de mi madre, de sangre Alosnera, su lucha en la vida y su vitalidad que nos transmite cada día.

Siempre soñé con ser médico y procurar vivir intenso cada minuto. y si de paso era médico de mi Sevilla....

P. - ¿Se han cumplido hasta ahora los objetivos que te marcaste en la vida?

R.-Por ahora creo que sí, estoy satisfecho con lo realizado, ser feliz y ver las cosas el lado positivo, intentar mejorar cada día, estar rodeado de mi mujer e hijos , aunque ya están en universidad, pero me dan esa fuerza para todos los momentos y tener amigos de verdad aunque estén lejos

P. - ¿A qué dedicas el tiempo libre?

R. - Me encanta pasear por nuestro Portil, respirar el aire de su bonita aunque castigada playa, pedalear por esos pinares que no tienen igual en Andalucia con mi grupo ciclista . Ahora empiezo como novel a disfrutar del golf con mi mujer. Me gusta escuchar música de mis grupos de juventud (Supertramp, Queen, Elo ) y por supuesto la ópera.

Jesús, bien sabes que me encanta echar ratitos de charla contigo, que me alegro verte feliz y decirte que ha sido una auténtica pena no poderme encontrar este verano con tu padre y tomarme una cervecita con él en el Rezón. Seguro que desde el tercer anillo estará con Antonio Gil disfrutando de los éxitos deportivos.

Un abrazo grande amigo.