Aitor Tornavaca: consola, cartas, televisión, y de vez en cuando, ejercicios
Hoy nos hemos desplazado virtualmente hasta Asturias, para saber cómo se encuentra el que fuera gran capitán del Recreativo de Huelva, Aitor Tornavaca, que aunque muchos puedan sorprenderse, aún sigue jugando al fútbol, a sus 44 años de edad, y con el número 21 en el dorsal. Concretamente en el Condal, equipo de la tercera división asturiana, en la que puede ser la última campaña vistiéndose de corto, pues su intención, una vez se normalice la situación del puñetero virus, es buscar un equipo para entrenarlo, lo cual sería un lujo para quien lo fiche, pues la experiencia de este vitoriano es importante, pues conoce todas las categorías del fútbol patrio, desde la élite hasta la base, y eso hay que valorarlo, pues sabe lo que hay que hacer en todas y cada una de las divisiones para cumplir los objetivos, pues las ha vivido muy directamente.
Pero de la parte deportiva, ya tendremos ocasión de escribir más adelante, ahora lo importante es saber cómo está tanto Aitor como su encantadora esposa Verónica y sus hija Leyre y Nerea.
Aitor que es todo amabilidad, empieza contando para los lectores del diariodehuelva.es que el día a día es casi siempre igual. "Me levanto sobre las 9 ó 9:30 y desayuno. Después hacemos las tareas del hogar entre mi mujer y yo. Al acabar me ducho y bajo al perro. Una vez a la semana, más o menos, hago la compra para salir lo menos posible y respetar todo lo que puedo las normas de confinamiento".
Continúa diciéndonos Tornavaca, que "llega la hora del almuerzo y lo hacemos entre Vero y yo, una vez terminada el mismo y después de reponer fuerzas, como no puede ser de otra manera, recogemos. Posteriormente vemos las noticias y yo me acuesto un rato".
La costumbre de dormir una buena siesta, viene fenomenal y es casi seguro, que nuestro protagonista adquiriría esta buena costumbre en los casi 10 años que vivió en Huelva.
"Por la tarde veo un poco la tele o algún día juego a la consola o a las cartas. La cuestión es entretenerse. De vez en cuando hago ejercicios físicos, abdominales y subo y bajo escaleras. Después cenamos, recogemos y por las noches veo una serie que se llama Billions. Eso es más o menos lo que suelo hacer. Tenemos la suerte de tener terraza y jardín que nos alivia un poco esta situación de claustrofobia y podemos algún día comer allí. Y así un día sí y otro también".
El actual jugador "chacinero", no quiere perder la ocasión que le brinda este periódico, para mandar un cordial saludo a la afición albiazul, a los muchos amigos que dejó en Huelva y por supuesto desearle al Decano toda clase de éxitos y que salga del pozo de la Segunda B lo antes posible.
Amigo que bien sabe Dios, que me gustaría que algún día regreses a esta tu casa y puedas aportar al Decano toda tu experiencia dentro del mundo del fútbol.