Nuestro invitado de hoy es Iván Garrido Pulido, a quien conocí en Teleonuba, pues siempre grababa su programa se Semana Santa, antes que La Tertulia Recreativista e iniciamos una nueva sintonia que prevalece con el tiempo.
Nuestro invitado de hoy es Iván Garrido Pulido, a quien conocí en Teleonuba, pues siempre grababa su programa se Semana Santa, antes que La Tertulia Recreativista e iniciamos una nueva sintonia que prevalece con el tiempo. Iván nace un Lunes Santo, día 5 de abril de 1982, en el Hospital Manuel Lois.
Siempre vivió en el Barrio del Parque de la Luz, hoy llamado El Higueral aunque jugó y creció principalmente en la Isla Chica donde su padre regentaba un negocio de electrodomésticos y él aprovechaba para disfrutar de su Hermandad de la Victoria.
Estudió en el colegio Colón de los Hermanos Maristas y posteriormente en el IES Alonso Sánchez los últimos cursos. Siempre fue inquieto y activo por lo que en la Semana Santa encontró su pasión participando activamente de ella como nazareno, músico, costalero, acólito, tertuliano, presentador o redactor en medios de comunicación de radio, de televisión y digitales. Durante su faceta universitaria ocupó todos los puestos existentes en la representación estudiantil, destacando el ser dos
mandatos presidente del Consejo de Alumnos y Representantes de la Universidad de Huelva y consejero en el Consejo Social de la Universidad de Huelva, etapa de la que guarda los mejores recuerdos de su vida. Etapa que siempre compaginó con becas y prácticas en empresas y trabajando como socorrista acuático en piscinas durante los veranos.
La política siempre le interesó y desde que cumplió los 18 años ha estado involucrado en la política llegando a ser Presidente Provincial de las Nuevas Generaciones del Partido Popular, partido en el que milita actualmente y en el que sigue ocupando cargos orgánicos. Jamás ha ocupado cargos públicos ni ha cobrado absolutamente nada del partido.
Podemos decir que es Diplomado en Relaciones Laborales, Graduado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos, Técnico superior en procesos y calidad en la industria alimentaria, que tiene el máster en Prevención de Riesgos Laborales con las tres especialidades, el máster en Dirección y Gestión de Personas, formación en mediación, como delegado de igualdad y como auditor.
Actualmente trabaja como técnico superior de Prevención de Riesgos Laborales en un Servicio de Prevención Ajeno en el que se siente muy feliz y que le presenta una apetitosa carrera profesional por desarrollar.
Cuando me pongo en contacto con el protagonista de hoy, lo encuentro con ganas de hablar, de contar cosas, por lo que no nos entretenemos mucho en preámbulos, empiezo a preguntar e Iván a responder, este es el resultado.
P. - ¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?
La situación es lamentable, jamás pude imaginar que llegaríamos a esto. Una pandemia que nos azota desde marzo de 2020 sin saber hasta cuándo durará y ahora una guerra fruto de la insensatez y falta de conciencia de un loco, que está haciendo que miles de criaturas sin tener nada que ver pierdan todo y se vean en la más absoluta miseria. ¿Quién iba a pensar que llegaríamos a vivir esto? Y la única realidad es que vamos de mal en peor y nadie alza la voz. La sociedad es incapaz de salir a la calle y los medios de comunicación nos manipulan. Hemos pasado del covid a la guerra de Ucrania, los impuestos cada vez más altos, los bienes de primera necesidad subiendo de precio y los "curritos" nos lo comemos sin más y encima nos hacen pensar que lo tenemos que asumir porque la culpa nunca es de nuestro gobierno sino de los demás.
P - ¿Cómo crees que cambiará la vida después de la pandemia, sobre todo en Huelva?
R. - Creo que la vida cambiará poco. Huelva tiene una idiosincrasia propia y una forma de vida tan particular y única, que en cuanto nos dejen volveremos a recuperarla tal y como la conocimos. En lo que sí creo que cambiará la sociedad onubense es en que creo que nos hemos dado cuenta de muchas cosas, principalmente de descubrir y valorar todos los tesoros de nuestra Huelva, los placeres que nos dan nuestros productos y a sentir más nuestras raíces, costumbres y tradiciones. El hecho de haber pasado tanto tiempo en nuestra Huelva y con nuestra gente nos ha hecho redescubrir muchas cosas, aprender a valorarlas y a quererlas.
P. - ¿Has pasado miedo en algún momento?
R. - Dependiendo del momento sí que lo he pasado bastante mal, pero por muchas circunstancias que se me juntaron en momentos tan complicados.
Para mí el miedo se da cuando eres consciente de lo que ocurre y yo durante las primeras semanas no era consciente de nada de lo que me estaba pasando ni le pasaba a los demás. Y es que el primer día que hablaron de confinamiento, ingresó mi padre en el hospital y durante una semana que estuvo debatiéndose entre la vida y la muerte, hasta su fallecimiento lo único importante para mí era mi padre y el miedo al covid para mí no existió. Mi única preocupación era escaparme cada segundo que podía para estar con él. Cuando falleció, que aplicaban las más estrictas medidas de contingencia me di cuenta que todo estaba de más cuando se acababa la vida, todo me pareció lo más injusto posible. Y ahí pasé frustración. Y ya posteriormente, me dí cuenta y entendí, de que con precaución se podía trabajar y vivir en una cierta normalidad en la que disfrutabas de las cosas más sencillas, sin necesidad de grandes aglomeraciones y donde la familia tenía que ser lo más importante.
Y hoy debo confesarte que siento rabia e impotencia ante falta de compromiso y de cumplimiento de las normas establecidas por gran parte de la sociedad, que sigue poniendo en riesgo a muchas personas simplemente por disfrutar de fiestas y del consumo de alcohol en sociedad. Y claro como encima tenemos un gobierno que intenta aborregar a la sociedad para adoctrinarla y manipularla al antojo de sus intereses, pues así nos va que nos estamos convirtiendo en un país totalmente impugne.
P. - ¿Qué proyectos tienes para el futuro y que haces ahora?
R. - Ahora me encuentro en el momento más feliz de mi vida. He aprendido que en las cosas sencillas está la felicidad, que quien te aprecia y te quiere es quien está siempre a tu lado, que la familia es la que siempre está ahí y que no hay mejor momento que el que pasas junto a ella, que con esfuerzo se consiguen las cosas, que los sueños se cumplen y que cada cosa tiene su momento. Las prisas nunca fueron buenas y todo llega porque cada uno recoge lo que siembra.
Ahora si hay algo que me desvela e ilusiona, que me conmueve y por lo que lucho todos los días es por mi hija. Un bebe precioso que se llama Victoria, como la devoción que ocupa mi corazón.
En el plano profesional, intento crecer y mejorar cada día. En el trabajo nunca se deja de aprender y no te puedes quedar dormido, hay que estar constantemente formándose y actualizándose para siempre estar a la altura de lo que la sociedad nos demanda.
Muchas ideas me rondan la cabeza, muchos proyectos los que me gustaría empezar y muchas experiencias las que me quedan por descubrir a lo largo de mi carrera profesional, pero tengo claro que todos los proyectos que rondan mi cabeza están relacionados con mi profesión actual que es la de Técnico Superior de Prevención de Riesgos Laborales y en la empresa en la que estoy a la que le debo todo y a la que siempre le estaré agradecido por darme una oportunidad cuando más falta me hacía y por plantearme la mejor trayectoria profesional que alguien pueda imaginar.
P. - ¿Qué significa para ti el mundo de la semana santa y Huelva?
R. - Para mi Huelva significa todo, es mi vida. No concibo mi vida en la distancia de mi tierra, sin esos tesoros, sin esos paisajes y sin perderme en sus entrañas, cuestión que en algún caso me ha hecho desaprovechar alguna apetecible oportunidad.
Me siento muy orgulloso de ser onubense y llevo a mi tierra por bandera. Siempre he estado comprometido con mis tradiciones, participo de ellas y lucho por ellas.
Creo que Dios creó el mundo y en él un paraíso que se llama Huelva y en ella unas playas que son Punta Umbría. Aunque soy un amante de todas las tradiciones y puedo estar en verano leyendo sobre San Sebastián o escuchando una comparsa de carnaval. Si es verdad que de todas esas tradiciones, la Semana Santa es mi pasión, es mi vida y es la que me ha hecho ser la persona que hoy soy. Mis padres no han sido grandes cofrades pero si muy cristianos, desvinculados de las hermandades, pero nacidos en barrios muy cofrades por lo que algo me han transmitido. Mi padre nació y se crió en el Barrio Obrero y mi madre en el Barrio del Matadero por lo que algo tendrá que ver que mi devoción sea la Virgen de la Victoria. He colaborado con todas las Hermandades que me lo han permitido, de las cuales solo puedo tener palabras de elogio, pero mi Hermandad es la Victoria. Una Hermandad en la que he participado en todo y la que me dio la suerte de ser miembro de su Junta de Oficiales durante 9 años y vivir su Coronación Canónica. Eso es lo más grande que un cofrade puede vivir.
Actualmente mi vinculación cofrade va unida a la comunicación en televisión, ya que hago un programa cofrade en la televisión de la costa (Canal Costa), donde disfruto de todas las Hermandades de esa zona de la provincia que para muchos es
desconocida y donde hay mucho que descubrir.
Mi calendario gira entorno a la Semana Santa y cada tertulia, charla, debate o encuentro me recarga las pilas. Fíjate si significa para mí la Semana Santa y mi Hermandad que mi hija ha nacido en Cuaresma y se llama Victoria.
P. - ¿Qué añadirías y abolirías de la semana Santa?
R. - Exigiría a todos esos cofrades y miembros de Juntas de Gobierno, que se dan golpes de pecho, que encuentren la humildad y la fe. El verdadero sentido de las Hermandades es la transmisión de la fe y eso se les ha olvidado a algunos. Lo importante para una Hermandad debería ser crecer en el patrimonio humano, acercar la fe a través del ejemplo y hacer partícipes de la vida de Hermandad a todos los hermanos.
Lamentablemente hay muchos equivocados que luchan por mantenerse en el poder de la Hermandad, que se enrabietan cuando sus ideas no son las aceptadas, que apartan al que piensa de otra manera, que impiden la participación de aquellos hermanos o devotos que no controlan y cuyo único pensar es poder ejecutar un suculento proyecto material con el que captar votos en las próximas elecciones.
Quizás eso sea lo que menos me guste de la Semana Santa. Con estas actitudes estamos haciendo que muchas personas válidas se mantengan alejadas del seno de la Hermandad, estamos perdiendo a grandes cofrades en nuestras Hermandades. Y es que desde que las Hermandades allá por los años 90
adquirieran un fuerte papel en la sociedad se han colado muchas personas en ellas buscando la relevancia social que no han sido capaz de encontrar por sus propios méritos.
Creo que Palacio debería involucrarse más en la realidad que viven nuestras Hermandades y en el rumbo que lleva nuestra Semana Santa, que no por gozar de una magnifica salud debemos dejar caminar solas. No me gusta nada ese
distanciamiento que han ido buscando las Hermandades con la Iglesia para eludir compromisos, responsabilidades y normas restrictivas.
P. - ¿Qué papel crees que han tenido las hermandades durante los meses del estado de alarma?
R. - Las Hermandades siempre hacen una gran labor, importante y silenciosa de ayuda al prójimo. No porque no se diga o se hable poco de esa labor social que realizan las Hermandades es menor o menos importante, sino todo lo contrario. Ahí sí que tengo que decir que las Hermandades hacen una gran labor social y que nunca los políticos han tenido la valentía de reconocerle, creo yo que por miedo a evidenciar muchas cuestiones.
En estos tiempos si no fuera por las Hermandades "Ay pobrecita de muchas personas". Hay personas muy cercanas a nosotros que necesitan de una ayuda que no es que te den 420 euros, un ticket para ir a un economato o que rellenes innumerables documentos sin ayuda ni asesoramiento de nadie para que te contesten dentro de unos meses y pasados otros te llamen para gestionarlo. Las personas necesitan que no sólo se les dé un paquete de arroz sino que se les tienda la mano, que se les dé un hueco en la sociedad, que se sientan realizados, que no les corten la luz y que se les escuche, algo muy simple pero muy difícil.
Desde mi humilde opinión, creo que el papel que hacen las Hermandades actualmente no lo hace ninguna institución, entidad o administración. Las Hermandades se han convertido en la opción inminente e inmediata para los problemas de muchas familias. Esa empatía de las Hermandades no la tiene nadie.
P. - ¿Qué crees que le falta a Huelva para despegar de una vez por toda?
R. - A Huelva le falta creerse quién es y lo que vale, pero sobretodo le falta onubenses que tengan lo que hay que tener para ponerla en el lugar que se merece, luchar por ella y no callarse ante las humillaciones a las que la han sometido a lo largo de la historia.
Le faltan políticos de verdad, políticos con vocación y con ideales, y no políticos incapacitados pero dóciles que son títeres de otros por mantener su sueldo a final de mes.
Somos mucho de quejarnos pero poco de actuar, porque le han hecho tanto daño a Huelva que ya no nos creemos nada y eso ha sumido a Huelva en el conformismo más absoluto. Ya animas a alguien para ir a una manifestación y te dicen; "si eso no sirve para nada, si los políticos van a hacer lo que más le interese a ellos, si cuando lleguen
las elecciones te van a prometer otra vez lo mismo de hace años…" Y es que es verdad, ¿cuántos años llevamos reclamando la luz y un tercer carril en el puente sobre el río Odiel? ¿Cuántos años llevamos con edificios cerrados? Huelva necesita infraestructuras y conexiones. Huelva no es desconocida como algunos se creen Huelva lo que tiene es que es inaccesible. Y a todos esos políticos a los que se les llena la boca hablando de Huelva, hay que exigirle hoy mismo no compromiso, porque de la mayoría no nos podemos creer nada, sino pruebas de que se está ejecutando proyectos de lo que Huelva necesita en infraestructuras ferroviarias, de carreteras, portuarias, aeroportuarias, sanitarias, educativas, hidráulicas y de la costa.
P. - ¿Qué te parece la actuación de los políticos en general ante esta pandemia?
R. - Creo que durante la pandemia todos pudimos observar la incapacidad más absoluta y la desvergüenza total de un gobierno que dirigía los destinos del país mintiendo todos los días con los datos de fallecidos, con los comité de expertos, generando a los ciudadanos más incertidumbre que tranquilidad y con tantas y tantas cuestiones con las que intentaban distraer la atención de la sociedad mientras le endosaban el problema a las Comunidades Autónomas sin recursos y sin competencias.
Para mí Comunidades como Andalucía o Madrid demostraron una ejemplar gestión de la situación, mientras que instituciones como el Ayuntamiento desaparecieron dejando los políticos en casa y las puertas de atención cerradas al ciudadano.
Muchos han utilizado la situación para vivir aún mejor de lo que ya lo hacían (más reuniones telemáticas y menos atención al ciudadano)
P. - ¿Cómo fue tu niñez y que soñabas ser de mayor?
R. - Mi niñez fue en un espíritu cristiano, afianzado por los valores del esfuerzo y la constancia que me inculcaron los Hermanos Maristas y entre los barrios del Parque de la Luz e Isla Chica, donde me impregné de la humildad y ese modo de vida único.
Disfrute y viví intensamente todas las facetas de mi vida participando muy activamente en la Semana Santa (en el grupo joven), en la comunicación (haciendo programas de radio y tv, presentando eventos, participando en tertulias o escribiendo artículos para revistas o boletines) o en la universidad (presidente del consejo de alumnos y consejero en el consejo social de la universidad de Huelva). Quizás quede feo decirlo pero siempre soñé que sería alguien que no pasaría por ningún sitio sin dejar una huella, que sería de los que me involucraría, participaría y sería un activo allá donde estuviese. Siempre tuve inquietudes desde bien pequeño y aún las conservo porque en la vida hay que intentar siempre ser el mejor, pero sin pisar
a nadie. El objetivo de una persona siempre debe ser el de enriquecerse, crecer y mejorar en todos los aspectos de la vida, la sociedad no quiere a un cualquiera en ningún ámbito y ya vemos como cada vez gracias a Dios tenemos una sociedad más exigente.
P. - ¿Quiénes son tus referentes en esta vida a nivel personal y profesional?
R. - En el cielo tengo dos referentes que son Jesús y María a los que día tras día intento parecerme aunque sea un poquito, y en la tierra tenía otros dos mi padre y mi madre, aunque mi padre hace poquito subió al cielo para protegerme desde ese balcón inmenso.
Mis padres se han dejado la vida por mí, me lo han dado todo y si hay alguien a quienes les debo la persona que soy es a ellos, para los que siempre me faltarán palabras de agradecimiento por cuanto han hecho por mí. Los padres son el mejor referente que uno pueda tener, lo demás son admiraciones por famosos a los que nos gustaría parecernos sólo en esa faceta publica que conocemos.
P. - ¿A qué dedicas tu tiempo libre?
R. - En mi tiempo libre me gusta disfrutar de mi familia, de mis amigos, de mi tierra y de mis tradiciones. Y además siempre me gusta involucrar a alguien en mis historias para que las descubra y se apasione igual que yo.
Solo hace falta que vea una noticia de alguna exposición, de algo que ha llegado a Huelva o de alguna actividad de una Hermandad para ir corriendo a disfrutar de ella. Y por supuesto, disfrutar de mi Punta Umbría que para mí es el máximo exponente del placer.
P - ¿Qué es lo que más valoras y detestas del ser humano?
R. - Lo que más valoro es la capacidad que tiene para todo, cada dia nuestra misma especie nos sorprende con los inventos y adelantos que ponen en pie, pero detesto profundamente esa capacidad de corromperse interiormente con tanta facilidad. ¿Por qué tendremos esa debilidad? ¿Por qué seremos tan débiles? No puedo llegar a entender cómo podemos ser tan frágiles ante las tentaciones malignas que nos pone
por delante la sociedad.
P. - Iván, ¿quieres hablar del Recreativo?
R. - Pues si, hemos hablado de todo menos del Decano, y si hablamos de Huelva el Recreativo va de la mano. Si bien es cierto que de fútbol entiendo poco, a mi Recreativo que no me lo toque nadie y esporádicamente sí que acudo al estadio con amigos
Mi familia siempre ha estado muy vinculada al Recreativo y es que mi abuelo por parte de padre, con la exaltación del partido, falleció de un infarto durante un encuentro del Recreativo en el viejo Colombino y mi padre ha sido socio durante toda la vida teniendo mi madre y yo casi que impedirle que fuera a muchos partidos por los sofocones que cogía y la posibilidad de acabar como su padre, pero como quería mi padre al Recreativo a pesar de ver como su padre prácticamente fallecía en el estadio
creo que pocos lo querrán.
P. - Te gustaría añadir algo más?
R. - Para finalizar y antes de despedirme de ti, me gustaría decirte que ha sido todo un placer poder conversar contigo, que nos conocemos de hace muchos años y que jamás pensé que estaría a la altura de ser uno de tus escogidos para las entrevistas. Siento admiración por ti, eres alguien de quien aprender constantemente por eso quiero que sepas que siempre me vas a tener a tu plena disposición para cuanto me requieras.
Amigo Iván, me ha encantado este rato de charla que hemos echado, me alegro verte optimista y con ganas de superarte día a día y seguro que vas a conseguir las metas que te propongas, pues eres trabajador, constante, estas muy preparado y además te mereces todo lo mejor por lo buena gente que eres