UGT, sobre las cifras de paro en octubre: “Huelva se hunde cada vez más”

UGT Huelva ha lamentado en un comunicado que los datos del paro "cada día se acentúan más", todo ello después de conocer el desempleo en octubre, con 61.297 parados, según los datos facilitados hoy por el Servicio Público de Empleo Estatal. "Si tenemos en cuenta los datos de la EPA publicados el día 22 de octubre del corriente por el Instituto Nacional de Estadística, estos datos aún empeoran, ya que se situaría esta cifra de desempleados/as en 75.000 personas para nuestra provincia", señalan desde UGT. Huelva ha subido su tasa de paro en un 3.36% más que en el mes anterior, Andalucía también aumenta en un 1.06% y España también sigue esta tónica y aumenta en un 2.01% con respecto al mes anterior.

El sindicato llama la atención sobre los contratos. Según el tipo de contratación, se observa cómo este mes tenemos la "cifra peor de todo el año", situándose los contratos temporales en un 98.54% mientras los indefinidos se quedan en apenas un 1.45%. En Huelva los contratos indefinidos bajan un 21.46% con respecto al mes anterior y un 18.97% con respecto al mismo mes del año anterior; sin embargo en la contratación temporal ocurre el efecto contrario aumenta un 26.65% con respecto al mes anterior y un 0.29% en el mismo mes del año anterior. "Esto nos sigue dando una clara idea del tipo de contratación de nuestra provincia", dice UGT.

Los "buenos empleos" y la "lucha contra la desigualdad" deben ser una prioridad en la nueva legislatura que entra, dice Francisco Espinosa, secretario provincial de UGT, que dice que "no nos podemos cruzar de brazos viendo como cada vez más Huelva se hunde en la precariedad laboral con una alta tasa de paro juvenil y con los parados de larga duración".

Y el ugetista ha hablado en clave electoral. "Estos años de gobierno de la derecha española pasarán a la historia por ser el mandato de la desigualdad, de la pobreza y la exclusión social". Un "periodo negro de nuestra economía -dice Espinosa- en la que aparecieron los 'trabajadores pobres', que han intentado sobrevivir con unas prestaciones por desempleo que se agotan, unos salarios indignos y unas pensiones irrisorias; cuatro años de criminalización de la clase trabajadora en la que, derechos básicos como el de la huelga han sido convertidos en delito".