Ruben pasa la prueba y Pedro Ríos es pichichi

Joselu abre la cuenta de los delanteros y Álvaron Antón regresa tras cinco meses.

El triunfo no fue lo único positivo que extrajo el Recreativo de Huelva de su visita al Heliodoro Rodríguez López. La victoria a domicilio sobre el Tenerife se basó principalmente en la solidaridad, esfuerzo, entrega y trabajo del bloque, pero también tuvo sus héroes individuales.

RUBÉN GALVEZ: Había dudas sobre si el meta serrano podría mantener el nivel de Dani Sotres, ausente por estar convocado por la sub-21, dada su juventud e inexperiencia. Además, los fantasmas de aquella mala noche en el Ciudad de Valencia y la frustrada cesión al Huesca también pesaban. A la hora de la verdad, el 'Gato de Aracena' pasó la prueba con nota, no tanto por sus intervenciones, pues apenas tuvo trabajo, y sí por la serenidad, tranquilidad y confianza que transmitió al equipo desde la portería.

JOSELU: Con seis goles en siete jornadas (ahora ocho en ocho), el Recre de Oltra no es un prodigio en ataque. Una de las razones era el pobre rendimiento goleador de los delanteros. Hasta Tenerife, Braulio, Joselu y Rubén Mesa habían sido incapaces de ver portería. Con su diana en el Heliodoro Rodríguez López, el cartayero no sólo abrió el camino de la victoria, también ha inaugurado la cuenta realizadora de los atacantes.

PEDRO RÍOS: Si hubo un fichaje estrella en el pasado verano, éste fue sin duda el extremo jerezano. Tras jugar y golear en Segunda y en Primera División, alguien pudo pensar que Pedro Ríos estaba de vuelta. Todo lo contrario. El exterior trabaja como el que más (el esquema defensivo de Oltra impone un gran desgaste a los bandas), pero aún conserva aire para imponer su calidad. El de Tenerife es su tercer gol en ocho partidos, lo que le convierte en el pichichi del Decano.

ÁLVARO ANTÓN: Es un jugador distinto, llamado a marcar las diferencias por calidad, clase y talento. Quizás sea el único antídoto para desatascar el ataque albiazul, pero viene de sufrir una grave lesión de rodilla. Tras cinco meses de baja, el burgalés volvió a pisar un terreno de juego. Apenas fueron quince minutos con el descuento, pero es el primer paso para recuperar definitivamente a un futbolista llamado a ser clave.