No ganó el Enrique Benítez, ganó el Andrés Estrada. El máximo representante del baloncesto onubense ha doblegado esta mañana al CB Utrera (88-83), en un partido que la grada cambió de la noche al día. La victoria, que debe invitar también a la reflexión, mete al equipo de Antonio Quintero en la zona noble de la clasificación.

Pese al alegrón final, no conviene olvidar que durante muchos minutos los locales fueron un conjunto desordenado en ataque y en defensa, todo corazón pero nada de cabeza, sin recursos en el banquillo y reducido a la clase de Juan Toledo. Y su metamorfosis tuvo que ver sobre todo con el miedo a ganar del rival.

Mientras el público se dedicó a comer pipas, los sevillanos fueron muy superiores, practicando un baloncesto de equipo, equilibrado y muy inteligente. Virtudes todas ellas de las que carecieron los anfitriones. Sin embargo, cuando el volcán del Estrada despertó, al Utrera le temblaron las muñecas y perdió la cabeza.

Amanecer gris

Amaneció gris el Enrique Benítez, negado cara al aro e incapaz de defender (4-11, min.5). Antonio Quintero paró el juego y tras su oportuno tiempo muerto, el equipo reaccionó. Los puntos corrieron como siempre a cargo de Juan Toledo y la escapada inicial del Utrera quedó en nada (26-27, en el primer cuarto).

El escolta puso por delante a los suyos por primera vez, tras elevar su cuenta a 17 puntos (31-30, min.12). Pero como humano que es, el cansancio invadió a Juan Toledo y sin la aparición de otros anotadores, el conjunto de Huelva se desinfló en los instantes finales del segundo parcial (41-48, al descanso).

Sexto jugador

La defensa local, ausente en la primera parte, tampoco apareció en la continuación y los triples de Cebolla colocaron a los sevillanos en el camino del éxito (46-61, min.24). Con un ataque reducido a acciones individuales, sin conjunción alguna, ni respeto a los sistemas, el Enrique Benítez desapareció de la pista.

Pero cuando todo estaba perdido, el público del Andrés Estrada ejerció de sexto jugador y rescató anímicamente a su equipo. Bajo el impulso del graderío, el partido llegó vivo al término del tercer cuarto (63-69), cuando apenas unos minutos antes parecía decidido en favor del Utrera.

Acobardados

Los visitantes se acobardaron ante el ambiente del pabellón y vieron como el Enrique Benítez le daba la vuelta a la tortilla a base de intensidad y físico. Un triple de Pablo Martínez certificó el cambio de la marea (76-74, min.36). Empujados por sus aficionados hasta el borde del triunfo, los hombres de Quintero no fallaron en la recta final de un choque ganado desde la grada.

-FICHA TÉCNICA

ENRIQUE BENÍTEZ: Pablo Martínez (12 y 4 asistencias), Juan Toledo (27 con 3/6 triples), Fitzgerald White (14 y 2 tapones), Dean Wanliss (11), Sebas Domínguez (6) -cinco inicial-, Andrés Díaz (9 y 12 rebotes), Tica Vukasin (0), Santi Domínguez (1), Raúl Postigo (0) y Miguel Ángel García (8).

CB UTRERA: Alejandro Fierro (6), Álvaro García (8), Andrés Tejada (13, 10 rebotes y 4 asistencias), Said Laghridat (4), Fran Márquez (13) -cinco inicial-, Ale García (8), Javi Gutiérrez (8), José Fernández (2), Juanma Cebolla (15 con 4/12 triples) y Adrián Camino (6).

CUARTOS: 26-27, 15-21 (41-48, al descanso), 22-21 (63-69) y 25-14 (88-83, al final).

ÁRBITRO: Betanzos García y Tena González. Eliminaron a los locales Dean Wanliss y Juan Toledo; y a los visitantes Andrés Tejada y Javi Gutiérrez, por cometer cinco faltas personales.

CAMPO: Pabellón Andrés Estrada, unos 650 espectadores.