Se llama María Peral y es una de las sensaciones del buen arranque de temporada del Brutal Zapas Ciudad de Huelva. En el último duelo ante Candray, se ganó ser la MVP del encuentro con su particular manera de entender el baloncesto. Pocos puntos (3), pero muchísimos rebotes (18). De hecho, es la máxima reboteadora de su equipo con una media de 14 rechaces por partido. Una auténtica mujer araña.

"Aunque yo coja los rebotes, el mérito es de todas. Soy la jugadora más alta, pero sin la ayuda de mis compañeras que bloquean a las rivales, no podría capturar tantos rebotes", detalla desde la más absoluta de las modestias. Eso sí, no duda en ejercer la autocrítica cuando se trata de mirar al aro rival pues "en la ofensiva debo dar más. De todos modos, tenemos jugadoras que son muy habilidosas y meten muchos puntos", añade.

Dos victorias seguidas

Desde sus 185 centímetros de altura, María observa la evolución del cinco de Álex Ledesma, que tras las dudas propias del debut, ahora encadena dos victorias seguidas. "El equipo lo único que necesitaba era tiempo para trabajar, formarse y que las jugadoras nos conociéramos un poco. Y ya se están viendo los frutos de ese trabajo. Además, el entrenador da oportunidades a todas y eso hace que confiemos más en nosotras mismas".

A prueba

Una confianza que el próximo domingo (IDM Margaritas, 13.00 horas) se pondrá a prueba en la visita del Brutal Zapas Ciudad de Huelva a la pista del Adeba de Córdoba. "No conocemos mucho a sus jugadoras, aunque Adeba suele tener equipos que corren mucho y son muy perpendiculares al aro. Debemos ser fuertes en defensa, porque si no, nos pueden hacer mucho daño", señala Peral. De coger los rebotes, ya se encarga ella.