Carlos Martínez y el círculo vicioso de la confianza

"Poder aportar y ayudar al equipo te da alegría, es lo que todos los jugadores quieren", señala el extremo. "No tengo que congraciarme con nadie", dice a sus críticos.

"El fútbol es confianza y la confianza sólo se recupera jugando". Así resume Carlos Martínez su situación en el Recreativo de Huelva. Tras una temporada decepcionante, en gran medida debido a las lesiones, el extremo quiere reivindicarse en el presente curso. Y el último duelo contra el Mérida, donde apenas jugó unos minutos pero dio una asistencia de gol, marca el camino para lograrlo.

"Poder aportar y ayudar al equipo te da alegría, es lo que todos los jugadores quieren. Cada vez que el entrenador confía en mí e intento hacerlo lo mejor que puedo. El 'míster' me conoce bien y tengo que intentar darle lo que me pide y sobre todo disfrutar. Si disfrutas jugando, las cosas salen", ha señalado el extremo esta mañana, a la conclusión del entrenamiento de hoy.

Carlos Martínez agradeció el apoyo del resto de sus compañeros y especialmente del capitán Diego Jiménez, "al que se lo he agradecido personalmente". Y respecto a la necesidad de hacer un buen partido en Huelva para reconciliarse con los aficionados más críticos con su rendimiento, indica que "no tengo que congraciarme con nadie".

Una sesión con la que el Decano ha comenzado a preparar el pulso del próximo domingo (Nuevo Colombino, 18.00 horas) contra el Don Benito, ante el que los albiazules buscarán el tercer triunfo consecutivo. "Desde el primer día lo damos todo en los entrenamientos y eso se ve durante los partidos. Tenemos que seguir así, porque con trabajo e ilusión las cosas llegan. Será un partido duro y tendremos que usar nuestras armas".