El 112 recibe más de una treintena de avisos por los destrozos del viento
Esta madrugada ha habido cerca de 20 avisos, relacionados la mayoría con árboles caídos que han obstaculizado carreteras, así como cortes de luz o desprendimientos en cornisas. No ha habido daños humanos y las playas no han resultado dañadas.
El temporal de viento que ha azotado de nuevo a la provincia este fin de semana ha vuelto a provocar numerosos avisos al 112, que desde las 23.00 horas del domingo y durante toda la madrugada han llegado a recibir hasta 19 incidencias, casi todas ellas relacionadas con árboles y señales de tráfico caídos, así como elementos desprendidos de cornisas. Afortunadamente, no se ha registrado daño humano alguno y las mayores complicaciones han surgido a la hora de retirar los elementos caídos en las carreteras.
De esta manera, el balance del temporal de viento y lluvia ha dejado más de una treintena de avisos al servicio de emergencias 112, lo que ha motivado la movilización de los cuerpos de seguridad, y especialmente de los bomberos. El grueso de las incidencias se ha localizado en la capital onubense, aunque también se han recibido llamadas desde Aracena, El Campillo, Santa Olalla o Bollullos del Condado.
Laa caída de un poste de teléfono en calle Pérez Galdós o una cornisa que ha caído sobre una terraza en la calle Varadero son las más destacadas en la capital. En el aparcamiento del Mercado del Carmen se ha caído uno de los letreros situados encima de la fachada principal.
Durante el fin de semana, en la provincia, el suceso más destacado ha sido la caída de algunos árboles, cayendo uno de ellos sobre cuatro coches de la Reina de los Ángeles de Aracena. En la localidad costera de Punta Umbría se ha avisado de que había caído un árbol sobre la calzada en la calle Gaviota.
En Niebla y algunas zonas de Lepe se han producido cortes intermitentes de luz desde primera hora de la tarde. Y en Moguer se ha anegado un bar al no poder aliviar sus husillos el agua de lluvia.
Por último, según ha informado el 112, algunos conductores han avisado de la existencia de un cable de corriente que amenazaba con caer en la autopista A-49, al ceder los postes que lo sostenían.
Algunas playas han visto mermada considerablemente la arena, como en el caso de Matalascañas.