Un desprendimiento en el lateral de la iglesia de San Pedro obliga a quitar una barandilla

El Ayuntamiento de Huelva ha realizado una actuación de urgencia y se reunirá con el Obispado el lunes para estudiar las intervenciones en la parroquia.

Un desprendimiento ocurrido en uno de los laterales de la iglesia de San Pedro ha obligado a los bomberos a intervenir en la escalera (frente al Paseo de Santa Fe) de la iglesia para evitar cualquier peligro para los peatones. Desde el Parque Municipal de Bomberos han informado de que se recibió un aviso pasadas las nueve de la mañana por un desprendimiento en el muro.

Hasta la zona se han acercado la Policía Local, que ha precintado el área afectada, así como un técnico municipal para evaluar los daños. El trabajo de los bomberos ha consistido en retirar un tramo de la barandilla de la escalera que había quedado sin sujeción, para evitar cualquier incidente por la inestabilidad de la misma.

Se han desprendido elementos de gran tamaño (piedras de la construcción de la iglesia de San Pedro) sobre el acerado, aunque por fortuna no ha habido que lamentar ningún herido.

Desde el Ayuntamiento de Huelva han informado de que la Concejalía de Urbanismo, Infraestructuras y Servicios Públicos ha tenido que acometer una intervención de urgencia en el muro lateral afectado, en la calle Daoiz.

Fue la Policía Local la que dio el aviso de la incidencia a las 2.00 horas de la madrugada del viernes, a lo que siguió la inspección del técnico de guardia del área de Urbanismo. Al constatarse el derrumbe parcial y el riesgo de nuevos desprendimientos, como primera medida preventiva se ha procedido al acotamiento de la zona con cintas y vallas para preservar la seguridad de los transeúntes.

Asimismo, de forma inmediata se van a adoptar una serie de medidas provisionales, con independencia de la actuación más general de consolidación que está programando el Consistorio. Esta actuación preliminar persigue la contención de las pilastras todavía existentes, así como de otros elementos salientes del muro, estabilizándolos mediante tirantes y collarines, para evitar su caída hacia el acerado.

Con el objetivo de abordar una intervención de mayor calado y analizar las distintas opciones, el Ayuntamiento ha concertado una reunión urgente con el Obispado para este lunes.

Desde el compromiso con la protección del patrimonio, el equipo de Gobierno municipal trabajará junto a la Diócesis onubense en la adopción de cuantas medidas sean necesarias para garantizar tanto la seguridad de esta edificación en su afección a la vía pública como la conservación de uno de los templos más emblemáticos y ancestrales de la ciudad y de toda su zona perimetral, declarados Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta de Andalucía.