Esos dichosos gorrillas

Esos dichosos gorrillas de Pescadería... Están por doquier. Al parecer, son varios los vecinos de esta barriada de la capital que han manifestado su preocupación, más bien malestar, por este tema. De por sí, toda la zona está pintada con líneas azules y naranjas, lo que ya condiciona, y mucho, el aparcamiento y estacionamiento de los vehículos. Los tramos y partes exentos de esa pintura, como por ejemplo esa zona descampada junto al Muelle del Tinto, donde aparcan muchos coches, están invadidos por gorrillas que siempre exigen su cuota. Los residentes no ocultan su malestar por la situación. Por lo menos, dicen que no son mala gente, e incluso saludan. Al menos tienen educación. Menos gorrillas y más aparcamientos públicos.