martes. 23.04.2024
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Isaias Pérez Saldaña: "Antes sabíamos pactar y consensuar, hoy todo es una batalla por el poder"

Lleva una década alejado de la vida pública pero en Ayamonte aun recuerdan su etapa política, tanto de alcalde como al frente de las distintas consejerías por las que pasó en la Junta de Andalucía. En este tribuna repasa su etapa política y su faceta más humana.
Isaias Pérez Saldaña: "Antes sabíamos pactar y consensuar, hoy todo es una batalla por el poder"

Es todo un lujazo que se acerque por esta ventana pública uno de los alcaldes míticos que ha tenido nuestra provincia desde que se instaurara la democracia en España, en este caso en la fronteriza ciudad del Guadiana, Ayamonte, Isaias Pérez Saldaña.

Nuestro protagonista en esta entrevista nace en Ayamonte en 1949, hijo de familia humilde, funcionario y costurera. Tras los estudios primarios lo llevaron a Huelva a hacer bachiller en el seminario. De allí pasa a la escuela de magisterio y, tras acabar, empezó filosofía en Sevilla pero para ayudar en casa ejerció de maestro en Villablanca, Gibraleón y Cartaya.

Tras la mili ejerció en Ayamonte desde el 74 al 90. Fue elegido diputado andaluz y al año siguiente alcalde de Ayamonte. En 1996 nombrado consejero de Asuntos Sociales hasta 2004 que pasó a la consejería de Agricultura y Pesca. En 2008 fue nombrado presidente del Parque Cartuja 93 donde estuvo hasta que renunció a su vida pública en 2011.

Con Isaías he tenido siempre muy buena sintonía, lo que ha hecho que en cuanto lo he llamado para echar un ratito de charla y, que los lectores de diariodehuelva.es conozcan sus puntos de vista actuales y un corto repaso sobre su vida política, haya aceptado y este ha sido el resultado:

¿Qué opinión tienes de la situación que  estamos viviendo? 

Como en todos los momentos que vivimos tratamos de magnificar el presente olvidando el pasado e ignorando el futuro. Sin lugar a dudas vamos a entrar y ya lo hacemos en un nuevo tiempo de cambios extraordinarios porque ya mañana seremos tan diferentes que hoy y aún no conocemos cuáles van a ser los oficios ni los trabajos de los próximos 30 años. Estos cambios llegarán y nos puede pasar lo de siempre entre peleas internas, y es que de nuevo pase el tren y no hayamos llegado ni al andén.

¿Cómo crees que cambiará la vida después de la pandemia? 

Es evidente que la pandemia es una causa de metamorfosis. Hay un antes y un después. Llegaron nuevas costumbres y se fueron otras. Ahora nos toca tomar posición a la ciudadanía sobre qué sociedad queremos hacer avanzar. Podemos tirar hacia adelante con un salto en el vacío y sus consecuentes miedos o bien volvemos atrás con nuestras antiguas comodidades, bienes y miserias.

¿Has pasado miedo en algún momento? 

Vivir es morir de miedo a diario y lo es aún más para los que vivimos con el cáncer a cuestas, sin ver un futuro de esperanza

¿Qué crees necesita Huelva para despegar de una vez? 

Que haya un pacto real entre todas las fuerzas políticas por sus infraestructuras en las que el agua y la comunicaciones son vitales. Que la universidad crea en la investigación  y se ponga al lado de las empresas. Que los servicios públicos sanitarios, educativos y sociales sean pioneros en esos avances donde mujeres y jóvenes jueguen un papel fundamental.

¿Qué significa para ti  Ayamonte? 

Mi raíz, mis sentimientos más profundos, mi historia, mi trabajo. Ayamonte es para mí mi alfa y mi omega.

¿Qué recuerdos guardas de tu paso por la política y especialmente como alcalde de Ayamonte? 

Inolvidables y lleno de tiempos de renuncia a todo lo que no fuera trabajo, negociaciòn y crear ciudad. Hoy lloro cuando paso por Isla Canela y veo cuantos años de viaje a Sevilla y Madrid, cuántos sueños cumplidos y qué orgullo de mis gentes.

¿Cómo viviste la coronación canónica de la Virgen de las Angustias, que tanto luchaste por ello? 

Era una demanda popular que mi ayuntamiento entendió y que a mí me fortaleció en mi fé Cristiana y mi cariño por mi patrona y alcaldesa perpetua a quien el 7 de septiembre de 1991 tuve también el honor de proclamar.

Hace pocas fechas te han homenajeado en tu pueblo. ¿Qué sentiste? 

Una profunda emoción por haberse producido por unanimidad de todo/as mis compañero/as y porque sé que salía de lo más profundo de la ciudadanía de Ayamonte.

¿Cuáles han sido tus grandes logros y que te quedó por hacer en política? 

Los logros lo medirán los verdaderos historiadores y para eso hace falta tiempo siempre. Me quedé con la pena de un gran paseo de entrada por debajo del parador de Ayamonte, que diera una nueva entrada en la ciudad, pero la espina me la estoy quitando con el proyecto que se está haciendo aunque no sea exactamente lo soñado.

¿Tus mejores y peores recuerdos políticos? 

El peor recuerdo fue un 26 de noviembre de 1995 cuando el mar rompía la playa y se la tragaba formando un gran estero. Tuvimos que tomar decisiones que ya hoy se entienden pero que me llevaron a la creencia que yo ya necesitaba otro proyecto como era Andalucía y, así fue, porque al año siguiente Chaves me llamó a su gobierno donde he estado 12 años.

¿Qué diferencia existe entre los políticos de tu época y los actuales? 

El mismo que existe entre los ciudadanos de antes y de ahora. Antes sabíamos pactar y consensuar, hoy todo es una batalla por el poder.

¿Quiénes han sido tus grandes amigos en política? 

He preferido la amistad siempre desde el diálogo con todo el mundo.Por eso he tenido amigos y amigas en todas partes. Nunca fui partidista ni sectario. Es evidente que la persona que más confió en mí fue Manuel Chaves.

¿Tus referentes en esta vida?

Mi padre y mi madre. Todo se lo debo a ellos.

¿Cómo fue tu niñez y qué soñabas ser de mayor?

Yo quería ser periodista pero las condiciones familiares me obligaron a estudiar magisterio para ayudar a mi padre a llevar para adelante 9 hijos. Después me llegó, desde ya una iniciada juventud, los deseos de cambiar mi tierra desde la política que ha sido mi pasión durante todo el resto de mi vida.

Isaias, me ha encantado echar este ratito de charla contigo, te deseo todo lo mejor del mundo. Siempre me pareciste un gran alcalde, pero especialmente una excelente persona, dialogante, comprometido, solidario, cordial...

Un abrazote grande amigo.