martes. 23.04.2024
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José Luis Jerez Manfredi: "Hay que pensar que está comenzando la cuenta atrás de la presencia del ser humano en este planeta"

Charlamos con el onubense sobre el actual momento de pandemia y conocemos su nuevo proyecto literario
José Luis Jerez Manfredi: "Hay que pensar que está comenzando la cuenta atrás de la presencia del ser humano en este planeta"

A José Luis Jerez Manfredi, nuestro entrevistado de hoy lo conocí allá por los años 70, concretamente en los carnavales de Isla Cristina, cuando él era director comercial de Radio Popular de Huelva y yo responsable de prensa de las Fiestas Típicas de Invierno de la antigua Higuerita. Posteriormente en Huelva empecé a tener un trato más directo cuando mi tocayo regentaba la agencia de publicidad Gema.

Siempre tuvo interés en que trabajásemos juntos, pero no fue posible, hasta que colaboramos en Atlántico televisión, con la retransmisión de partidos del Recreativo, pero fue poco tiempo.

Jerez Manfredi es el mejor comercial que he conocido en mi vida, eso sí, después de mi padre. Persona persuasiva, intuitivo, trabajador, don de gentes, creativo...

Hace mucho tiempo que no coincidimos físicamente aunque nunca hemos perdido el contacto. Ahora con motivo de la puesta en el mercado de su libro "La salvación de la Tierra", he contactado con él para que los lectores de diariodehuelva.es conozcan su opinión sobre varios aspectos de la actualidad, José Luis ha aceptado y comenzamos así:

-¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?

-Bueno, tocayo, en principio y como es natural estoy viviendo estos meses horrorizado, como un testigo más de esta tremenda catástrofe con la que un virus asesino está azotando a todo el planeta. Pero personalmente pienso que esta emergencia sanitaria que se ha convertido pandémica se parece mucho a esa otra emergencia en la que está inmerso nuestro mundo y de la que muchos no quieren enterarse, la degradación climática. A estas alturas está más que demostrado científicamente que la pérdida de biodiversidad aumenta el riesgo de la salud en la población. Para mí, lo del Covid-19 es una consecuencia más de la extinción masiva que el ser humano está llevando a cabo en la Tierra. Esto no es más que un aviso al que debemos prestar mucha atención, o vamos a tener que pensar muy seriamente en que ya está comenzando la cuenta atrás de la presencia del ser humano en este planeta.

-¿Qué hiciste durante el confinamiento, dónde y con quién lo pasaste?

-Pues, poco antes me encontraba fuera de Huelva por mi trabajo, pero ya las cosas empezaron a ponerse difíciles; se multiplicaban los contagios y las muertes, y decidí “recoger velas” y venirme para Huelva. Y aquí estuve tele-trabajando, enviando a Televisa América todo lo que los diferentes medios de comunicación en el país nos contaban a diario de la pandemia. Y compartiendo con la familia mucho más que de común, además de poner en práctica mis limitadas habilidades como “cocinilla”. Me encantan las sardinas a la plancha, las papas con chocos o el atún con tomate, y presumo de ser un experto cocedor de mariscos. De ahí no paso.

-¿Cómo crees que cambiará la vida después de la pandemia y sobre todo el mundo de la prensa?

-La verdad es que tengo mis esperanzas puestas en que una gran mayoría de los seres humanos, en todos los países de la Tierra, tomemos conciencia de nuestras responsabilidades personales y tribales. Que seamos mucho más respetuosos y generosos con lo que significan las instituciones sanitarias y su personal. Muy conscientes de la importancia que tiene el equilibrio climatológico en este planeta que es el único que tenemos para vivir. Y que la sociedad global de nuestro mundo empiece a ser mucho más solidaria de lo que todos hemos sido hasta ahora con los que más necesitan.

En cuanto al futuro de la prensa y la comunicación social, en principio está claro que la digitalización le va a seguir ganando batallas al papel, porque un periódico digital puede ser leído en cualquier lugar del planeta sin el costo que supone la distribución manual del periódico tradicional. Aunque nada sobre por ahora.

La televisión y la radio seguro que también van a seguir desarrollando nuevos sistemas de emisión para estar cada vez más cerca de sus seguidores. Pero todos van a seguir conviviendo, porque el ser humano cada vez tiene más necesidad de consumir información. Y este oficio necesitará por lo tanto de muchos y muy buenos profesionales.

-¿Qué proyectos tienes para el futuro?

-Yo ya estoy en ese periodo de la vida en el que nos toca enseñar a otros lo que nosotros hemos aprendido, poniendo en práctica nuestros conocimientos. Desde hace unos años soy consejero de Dirección de “Carso´s Group”, el holding empresarial al que pertenecen medios de comunicación como “Televisa América”, “PlanetaJusto TV” o “España en América”. Y soy el Consejero Delegado de “Atlántico Sur Televisión”, la Productora de Comunicación con la que trabajamos para el “Carso´s”y todos sus canales de radio y televisión. Lo próximo y más inmediato es seguir montando delegaciones de “Televisa América”, tanto en aquel continente como en España.

-¿Qué es lo que más te ha dolido en estos meses que llevamos de pandemia?

-En esto voy a ser muy claro y me van a sobrar palabras: la utilización política que los diferentes partidos han hecho de una catástrofe que se está llevando tantas vidas. Es una vergüenza.

-¿Qué es lo que echaste de menos en los meses del estado de alarma?

-A mis hijos. Uno vive en Los Ángeles con su esposa y mi única nieta. El otro en Bruselas, con su esposa. Y también mi trabajo y a mis compañeros en México, Guatemala, Panamá y Costa Rica, con los que sólo puedo ahora hablar por Skype.

-¿Qué haces en la actualidad?

-Sigo desde mi despacho estudiando la forma de continuar estableciendo delegaciones de “Televisa América” y sus canales de pago. Aunque esta pandemia también me ha convertido en el corresponsal de nuestro grupo en España para seguir contando cada día a los cientos de miles de españoles que viven en América lo que está pasando en su país. A muchos ya se les han quitado las ganas de volver a corto o medio plazo.

-¿Qué papel crees que están jugando los medios de comunicación?

-Un papel muy necesario para que nuestros políticos se anden con mucho cuidado a la hora de tomar decisiones. Los medios de comunicación son los grandes aliados y defensores de los pueblos.

-¿Y las redes sociales?

-Están tomando demasiado poder. Y debería haber una ley que castigara muy severamente a los que las utilizan para lanzar sus bulos. Yo no me canso de repetir que cuando alguien reciba una de esas falsas noticias, la consulte con sus habituales medios de comunicación; si en esos medios no hablan de esa noticia, no es noticia, es un bulo. Y lo peor es que no son gratuitos. Todos nacen con la soterrada intención de contaminar a la opinión pública y favorecer los ocultos intereses de sus creadores.

-¿Cuáles son tus mejores y peores recuerdos en tus muchos años de profesional de la comunicación?

-Los mejores recuerdos son los del comienzo, aquellos primeros años en los que no conocía la envidia y los celos que anidan en los entresijos de la profesión. Yo siempre estuve abierto a querer y dejarme querer por mis colegas, sin importarme el medio al que pertenecieran. Pero pocas veces tuve la sensación de ser correspondido en mi propia tierra. Tal vez por eso ya en la década de los ochenta acepté un trabajo en República Dominicana, donde quizás por haber llegado de otro país me valoraban incluso por encima de mis méritos. Pero echaba tanto de menos a Huelva que a los dos años regresé a mi mismo puesto de trabajo en la COPE, dejando por allí a muchos amigos, que al cabo de los años me ofrecieron crear con ellos en Panamá la Productora de Comunicación “Atlántico Sur TV”, justo cuando llegaba la crisis económica del 2.008. Y en 2.010 volví a cruzar el charco y gracias a Dios en aquellas tierras he podido hacer realidad el mayor de todos mis proyectos. Eso sí, gracias a este bendito oficio también conocí a grandes profesionales que se hicieron a sí mismo, como tú José Luis, todo un ejemplo de superación y eficacia. Por eso, a los que son de nuestra casta, y son muy pocos, me gusta llamarles “hermanos”.

-Hablando otra vez de la pandemia, ¿te gustaría ser de los primeros en vacunarte.

-Sí, claro. Pero si sólo existiéramos diez personas y de momento tan sólo hubieran llegado nueve vacunas contra el COVID-19, no me importaría esperar. Yo ya he vivido más que otras muchas personas.

-Acabas de poner en el mercado un nuevo libro. Háblanos de él…

Sí, es una novela que habla de muchas de las contaminaciones que está sufriendo nuestro planeta. Además de todo lo que provocan los virus asesinos y el peligroso cambio climático está la de la insolidaridad que permite que tantos niños del tercer mundo sigan muriendo de hambre, mientras cada año siguen creciendo las fortunas de algunos multimillonarios y de la Banca, que no duda en poner en la calle a esas familias desfavorecidas para ampliar su stockaje de pisos vacíos. Y está también la contaminación de las apuestas que arruinan a tantas familias en España cada año. Pero para mí lo más interesante es la parte central de la historia que cuento y que tiene mucho que ver los universos paralelos y la creencia de que los humanos somos eternos; que después de la muerte comenzamos a vivir en otra dimensión separada de la única que hasta ahora conocemos por las diferentes medidas del espacio y del tiempo. Algo que cada vez está más cerca de poder ser demostrado gracias a la Física Cuántica. Por si se animan, se llama LA SALVACIÓN DE LA TIERRA y ya está a la venta en librerías, el Corte Inglés y en todas las plataformas online de España y América.

Tocayo, estamos llegando al final de esta entrevista tan amena, pero si quieres añadir algo más, hazlo.

Quiero saludar a Huelva y a todos mis amigos de esta tierra en la que, aunque cueste ser profeta por ser tan nuestra, no la cambiaría por ninguna otra después de haber viajado tanto. Y quiero agradecerte muy sinceramente este recibimiento José Luis. A ti y a este DIARIO DE HUELVA que sigue subiendo como un cohete y que puedo leer cada día por muy lejos que me encuentre. Un fuerte abrazo hermano.