sábado. 20.04.2024
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Se inaugura la restauración del retablo de la Parroquia de Galaroza

Se adelanta la inauguración de los trabajos de restauración y apertura del templo a este fin de semana
Se inaugura la restauración del retablo de la Parroquia de Galaroza

La reapertura al culto de la parroquia de la Purísima Concepción de Galaroza era un momento muy esperado por todo el pueblo. En primer lugar, por las reducidas dimensiones de la Ermita del Carmen, que ha albergado todos los actos litúrgicos y sociales en el último año, y también por la expectación que ha despertado la restauración del retablo mayor de la parroquia, motivo por el cual ha estado cerrada durante once meses. Por ello, se ha decidido adelantar los actos de presentación de los trabajos y de apertura del templo a este fin de semana.

 

La doble cita comenzará el sábado 23 de noviembre con una salva de cohetes en el porche de la iglesia a partir de las 19.30 horas. Tras un repique general de campanas, llegarán las intervenciones del cura párroco Juan José Alamillos Romero y del alcalde de Galaroza, Antonio Moreno Úbeda. Se descubrirá a continuación un azulejo y una placa conmemorativa de la fecha y posteriormente un componente de la Comisión Parroquial explicará las actuaciones acometidas en el templo desde octubre de 2018. El programa finalizará con la entrega a los presentes de la memoria de gestión de esta comisión, verdadero pilar de la iniciativa que ha conseguido un logro histórico.

 

Como histórico será también el domingo 24 de noviembre, ya que la solemne función religiosa contará con la participación del Obispo de Huelva, José Vilaplana Blasco. Tras un repique de campanas, a las 12.30 se desarrollará esta Eucaristía que servirá como acción de gracias por las actuaciones y mejoras acometidas en la Parroquia.

 

Esta restauración del Altar Mayor del templo ha constituido un proceso muy seguido por la población, que está deseosa de contemplar el resultado de los trabajos realizados por Daniel Sánchez Vázquez y su taller de carpintería artesanal religiosa.

 

Según datos extraídos del libro 'Aspectos históricos de Galaroza', de Emilio Rodríguez Beneyto, la Iglesia Parroquial de la Purísima Concepción de Galaroza responde a la tipología clasicista de finales del siglo XVI, en el que destaca como rasgo original la profundidad del presbiterio que permite alojar la sillería del coro. La obra de la primitiva Iglesia no termina en 1606, como indicaría una inscripción de una portada lateral, sino que será en 1614 cuando se entregan las cuentas definitivas.

En 1616, tras repetidos problemas de espacio, sobre todo con las Cofradías y Hermandades, se ordena la ejecución de la actual Capilla Mayor, que no se concluirá hasta más de medio siglo después, en el año de 1678.

 

El ajuar mueble se perdió casi en su totalidad en la Guerra Civil, especialmente el retablo mayor, un magnífico ejemplo de colaboración entre artistas cachoneros y portugueses. El actual es del siglo XVIII y proviene del Convento de la Victoria de Estepa, aunque se abren nuevas hipótesis como la del historiador Jorge Alberto Jordán Fernández, que indica que podría tratarse del retablo de la ermita de la Concepción, también ubicado en Estepa. Lo que sí se tiene por cierto, es que llegó a Galaroza gracias a las gestiones de Teresa Vázquez, viuda de Osborne, y que las obras de adaptación fueron realizadas por el carpintero cachonero Rafael Fernández Fernández.

 

Entre sus imágenes destaca la Purísima Concepción, cuya hechura está documentada en 1798 por parte de Juan Bautista Petroni. Además del retablo, se han efectuado trabajos como la restauración de toda la imaginería del retablo, consolas, marcos, blandones, sagrario, manifestador, los cuatro arcángeles ceriferarios, peanas, así como tareas de pintura interior, nueva instalación eléctrica, pulido y abrillantado del suelo, limpieza y adecuación de altares y piezas singulares de orfebrería y culto, limpieza de cubiertas y adecentamiento de dependencias de almacén, ente otras importantes actuaciones, completan el intenso trabajo de tres años llevados a cabo por la Comisión Parroquial que se constituyó precisamente ante el pésimo estado de conservación del retablo mayor de la Parroquia y que ha realizado una labor reconocida por todo el pueblo de Galaroza.