Vecinos de 'Costa de la Luz' lamentan que el Ayuntamiento no conteste al Defensor sobre el local ocupado
El Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, ha vuelto a requerir, por tercera vez, al Ayuntamiento de Huelva información sobre el local ocupado desde hace más de dos años en la avenida Costa de la Luz y que está siendo utilizado como vivienda, además de haberse convertido en 'centro neurálgico' de drogadictos, prostitutas y 'gorrillas'.
La propia asociación de vecinos ha informado en un comunicado de que los vecinos y comerciantes del barrio interpusieron en mayo una queja al Defensor ante la falta de respuesta del Juzgado número 4 de Huelva, donde Aliseda, propietaria del inmueble, tiene interpuestas sendas demandas por lo penal y lo civil por la ocupación del inmueble, y ante la dejadez de funciones que entienden realiza el Ayuntamiento de Huelva al no hacer valer sus competencias en materia urbanística, salubridad y seguridad ciudadana.
La queja fue admitida por la institución andaluza, quien el 27 de mayo realizó un primer requerimiento de información a la Fiscalía de Huelva, Ayuntamiento de Huelva y Subdelegación del Gobierno sobre el asunto que denunciaba la asociación vecinal. Al no obtener contestación del Consistorio onubense, la institución presidida por Jesús Maeztu comunicó el 27 de junio remitió un escrito a la asociación vecinal informándole que con esa misma fecha volvían a solicitar información a la institución local ante su silencio.
Y, por último, con fecha 4 de septiembre se le volvió a comunicar a la asociación desde la Oficina del Defensor que siguen "sin obtener respuesta del Ayuntamiento de Huelva a las cuestiones que en su momento le planteamos. Por este motivo, hemos dirigido un nuevo escrito a dicho organismo".
Desde la representación vecinal se encuentran "perplejos" ante la falta de respuesta del Consistorio onubense, aunque piensan que "el motivo de este silencio puede estar en qué no sabe qué contestar al organismo andaluz ante el poco interés que viene mostrando ante el grave problema que padecen los vecinos y comerciantes de este barrio".
Los vecinos han realizado numerosas concentraciones semanales para exigir el desalojo del inmueble, que pusiera punto y final a un conflicto abierto desde la ocupación del inmueble y que ha alterado la normal convivencia vecinal, además de poner en riesgo la integridad de las familias que habitan en el edificio del local ocupado.
Mantienen colocadas en los balcones de sus pisos banderas 'piratas' para denunciar el 'saqueo' que vienen sufriendo sin que las autoridades competentes sean capaces de atajar y devolver la tranquilidad al barrio y en breve tiempo volverán a retomar las acciones de protestas ante la falta de respuesta de las instituciones implicadas en resolver el conflicto.
