La M.O.D.A : "Alucinamos con el Niño Miguel"
¿Cómo afrontáis vuestra actuación en Huelva? ¿Os apetece?
Mucho. Para nosotros es una bonita oportunidad de compartir nuestra música con el público onubense y visitar una tierra que nos queda a unos cuantos kilómetros de casa.
¿Cómo animaríais a los onubenses a acudir a vuestro concierto?
No somos mucho de animar (risas). Pero veniros...lo pasaremos bien.
Lleváis una serie de instrumentos nada convencionales a vuestras actuaciones ¿Qué os aporta esa variedad sobre el escenario?
Cada instrumento aporta su sonido propio, o esa es la idea.
Pantalón negro y camiseta blanca de tirantes…¿Representa a algún uniforme o es solo imagen y marca?
Representa una imagen de grupo, de bloque, de que vamos todos a una.
Producís y editáis vuestros propios discos ¿valoráis mucho la libertad?
Pues como cualquier persona, ¿no? Es importante para el grupo el poder tomar nuestras propias decisiones y gestionar el fruto de nuestro trabajo, que son nuestras canciones.
Tenéis letras con contenido social pero muy sutiles ¿Os gusta que el público saque sus conclusiones o es solo una forma de escribir?
Nos sale así. No hay pretensiones ni sociales, ni sutiles ni de ningún tipo...
No debe ser fácil convivir entre siete ¿Os soportáis?
Más o menos sí (risas).
La M.O.D.A. es acrónimo de La Maravillosa Orquesta del Alcohol ¿Cómo os lleváis con alcohólicos anónimos?
No deja de ser un nombre, aunque hay que reconocer que a los periodistas siempre os da juego...
¿Qué música escucháis en la intimidad?
En la intimidad nos ponemos sobretodo diálogos entre Jose María Aznar y Jordi Pujol.
Antes de pisar el escenario junto a la Ría… ¿Qué imagen tiene un burgalés de Huelva?
Una ciudad que ha sido marcada por diferentes culturas, con mucha historia y encanto por sus calles. Cuando se dice Huelva también se acuerda uno de Juan Ramón Jiménez, pero sobretodo del Niño Miguel, el guitarrista flamenco. En su día vimos el documental 'La sombra de las cuerdas' y alucinamos.
