Mentiras e incongruencias
Hay un viejo dicho que viene a cuento sobre lo que Albert Rivera ha venido diciendo, y haciendo, desde que llegó a la política nacional: “tus palabras dicen lo que pretendes ser, más tus acciones dicen lo que realmente eres”. En Diciembre de 2015, el PP gana las Elecciones Generales con 123 escaños y el PSOE, con Sánchez, queda segundo con 90. Dos meses después, Rivera y Sánchez, firman con solemnidad un acuerdo en el Congreso para investir como Presidente al líder socialista. En aquel momento, Rivera manifestó que “empezaba una nueva Transición”. Ahora, tras las Generales, con la victoria socialista y, mire usted por donde, con 123 diputados, y Sánchez, de nuevo, como candidato a la Presidencia, y el PP, y Casado, con 66 diputados, Rivera sentencia que “no vamos a pactar jamás con el PSOE ni con Sánchez. Los echaremos y punto”. Sus incongruencias y mentiras son tan evidentes que deberían avergonzarle, pero insiste en ellas como si no fueran con él o le importarán un comino.
En Andalucía, Ciudadanos estuvo apoyando el Gobierno de Susana Díaz durante tres años, aprobándole, consecutivamente, tres Presupuestos y, sin embargo, en septiembre de 2018, tras las elecciones andaluzas, su líder Marín, se despacha a gusto denunciando los incumplimientos, según él, del Gobierno de Susana Díaz, que no había reclamado con anterioridad en ningún momento, más bien todo lo contrario, acordando con PP, con el apoyo implícito de VOX, un gobierno trifachito.
En las últimas Generales, la ciudadanía con sus votos, han colocado a Ciudadanos, y a su líder, Rivera, en el tercer lugar del escalafón de resultados, y en las Autonómicas y Locales, ha quedado a años luz del PSOE y muy por detrás del PP, no logrando vencer en ninguna Comunidad ni obtener alcaldías relevantes. Sin embargo, Albert Rivera, de nuevo, haciendo alarde de su cinismo, se autoproclama Líder de la Oposición. También recordar aquello que dijo de “queremos recuperar los comportamientos leales y queremos imaginar una España que en lugar de tener que pactar con ERC, tanto el PSOE como el PP, puedan pactar con nosotros para poder marcar un ritmo de Estado....” Es obvio que lo dijo, está recogido en las hemerotecas, y es evidente que ha quedado en agua de borraja. Y esto otro, “no queremos que los pactos se hagan por carguitos, consejerías, concejalías o por pasteleo”, como ha demostrado en Andalucía, Madrid o Murcia, continuando con lo de “no vamos a criminalizar ni hacer un cordón sanitario a ningún partido”, cuando ha vetado al PSOE para llegar a ningún tipo de acuerdo de cara a la Investidura. Hay políticos que mienten más que hablan, y Rivera es en eso, sin duda alguna, un auténtico líder. No será el líder de la Oposición, pero es el líder de la mentira y la incongruencia.