Diego Magdaleno reivindica los cuentos en su primera novela

‘El Valle de la Deseada’, ambientada en Galaroza, es un compendio de su profesión como cuentista

Que Galaroza es un lugar de inspiración literaria, es un valor que esta localidad atesora desde siempre. Su legendario origen, recogido por José Andrés Vázquez el 5 de septiembre de 1930 en el diario ABC, ya avanzaba el recorrido que Galaroza ha tenido como territorio de sentidos. Aquella leyenda aludía al supuesto nombre andalusí de este lugar: Al-Aroza, El Valle de la Novia o de la Deseada.

Y ese es justo el título de un nuevo libro que se centra en estas tierras como fuente de creatividad. ‘El Valle de la Deseada’ es el nombre de un libro escrito por Diego Magdaleno, que va a ser presentado el 1 de junio, a las 19.00 horas, en la Feria del Libro de Sevilla. En el acto participarán el narrador Filiberto Chamorro, la intérprete musical Elena Jimenez Parra y la librería Rayuela.

Según su propio autor, “’El Valle de la Deseada’ es un trocito de sierra guardado en páginas; una porción de montañas donde contar cuentos era algo tan cotidiano como recoger leña o dar de comer a los cerdos”. Esta bucólica descripción introduce al lector en un libro con el que “beberás en el río encantado, caminarás por senderos de brujas, te perderás en un bosque de osos y, al mismo tiempo, te llevarás a casa un buen puñado de viejos cuentos”.

Porque Diego Magdaleno es, sobre todo, un cuentista. Desde diversas facetas y experiencias, ha recuperado el género del cuento y lo ha dignificado y actualizado en multitud de actividades.

A pesar de ello, para esta publicación ha escogido la fórmula de la novela, narrando, eso sí, las peripecias que un contador de historias llega a vivir a principios del siglo XX en lo que hoy constituye el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche.

El volumen descubre, página a página, la multitud de leyendas y cuentos que, cual manantiales, emanan de estas tierras.

Diego Magdaleno es uno de esos andaluces al que la emigración le hizo nacer fuera de su tierra. Quizás por ello, en sus propias palabras, “sufra de amor desmedido por el sur, y en especial, el sur serrano”. Algo que se nota en su quehacer diario, que es contar historias. Es, efectivamente, cuentista de profesión, anda escuchando y narrando por los pueblos, allá donde se le requiera.

De esta forma, ha contado cuentos por Festivales, Ferias, escuelas, teatros, plazas, bibliotecas, cuevas, montañas... Es un “cuentista andariego” desde hace más de dieciocho años, al menos desde el punto de vista profesional, porque su afición a contar historias la conserva desde pequeñito.

Ha narrado cuentos en lugares como las ferias del libro de Guadalajara (México), de Madrid, de Sevilla, de Almería, de Huelva, o también en Festivales de Narración Oral de lugares como Los Silos (Tenerife), Segovia, Cádiz, Sevilla, Euskadi, Chelva, Caceres o Portugal (Beja, Lagos, Faro, Évora…), además de en decenas de pueblos.

Ha trabajado para entidades como el Instituto Cervantes, la Fundación Tres Culturas, Diputaciones Provinciales de Sevilla, Huelva, Cádiz y Córdoba, el Centro Andaluz de las Letras o numerosas bibliotecas públicas.

En sus sesiones de narración oral o Cuentacuentos, ofrece su voz y su interpretación a todos los públicos y sobre todas las materias. ‘Murillo, pintor de historias’, un homenaje al pintor en el IV Centenario de su nacimiento; ‘Biocuentos’, o historias sobre las relaciones saludables del ser humano con el planeta que habita; cuentos sobre la Prehistoria o sobre las emociones y sentimientos; ‘Bebeteca’, con literatura oral para bebés y personas adultas acompañantes; ‘¡Salticuentis!, con cuentos de circo; cuentos para comer y saborear; ‘La voz del Agua’; cuentos de cine o sobre cante flamenco, con la participación de la cantaora Alicia Acuña; cuentos de animales y homenaje al libro y las bibliotecas; homenaje a los cuentos de tradición popular andaluza y a las historias de mujeres; cuentos sobre coeducación, sobre la labranza, sobre lobos y mil ámbitos que Magdaleno domina y expone con una maestría propia de los más reputados cuentacuentos.

En los últimos años ha recorrido diversas comarcas onubenses con festivales de narración oral como ‘La Sierra Encuentada’ o ‘Un Andévalo de Cuentos’.

Su amplio curriculum queda complementado con talleres destinados a personas que quieran formarse o participar en actividades de animación a la lectura y narración oral, y con su labor como actor en la compañía de teatro ‘Recuento’.

Con un estilo que recuerda al de los Cantes de Ciego medievales, Diego Magdaleno ha recuperado la espectacularidad y el encanto de los cuentos, los de ayer y los de siempre, aportando frescura al género de la literatura y de la interpretación, que ahora complementa con una novela que incluye historias de amor, de crímenes secretos, de luchas sociales, en definitiva, una novela de cuento.

El libro ‘El Valle de la Deseada’ está publicado por la editorial ‘Palabras del candil’, y su portada está protagonizada por una fotografía antigua de la Fuente de Doce Caños de Galaroza, rescatada por Emilio R. Beneyto y que forma parte del archivo de la Asociación Cultural Lieva. Se trabaja ya para presentaciones en esta localidad y en otras de la provincia de Huelva.