miércoles. 24.04.2024
El tiempo

El CSN no ve afección radiactiva a las personas ni al medio en el incidente de Mina de Aguas Teñidas

El Consejo de Seguridad Nuclear califica el incidente que ha dado lugar a un apercibimiento a Matsa como “leve” y explica que ha dado un plazo a la empresa minera para que solvente los incumplimientos detectados.
El CSN no ve afección radiactiva a las personas ni al medio en el incidente de Mina de Aguas Teñidas

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha informado que en el expediente de apercibimiento abierto a Mina de Aguas Teñidas (Matsa) tras encontrar evidencias de incumplimientos sobre medidas y protocolos de seguridad en sus instalaciones radiactivas se descarta que haya habido afección a la salud de los trabajadores, al entorno rural donde se ubica la instalación (Valdelamusa, Almonaster o Cortegana) y al medio natural.

Seguridad Nuclear ha calificado el incidente como “leve” y explica que ha dado un plazo a la empresa minera para que solvente los incumplimientos detectados.

Según subrayan las fuentes del CSN, el procedimiento de apercibimiento está en pleno proceso, la empresa cuenta con un plazo para subsanar los problemas detectados y aún está en tiempo de resolverlos.

Sin embargo, los representantes de los trabajadores no han sido informados de estos pormenores a pesar de haberlo solicitado a Seguridad Nuclear y aseguran que a ellos nadie les ha hecho controles de afección radiactiva ni en los nueve años anteriores ni después de la denuncia interpuesta que ha dado lugar al apercibimiento. Entre otras cosas, porque ni siquiera manejan dosímetros personales para poder realizar el control y las mediciones. Lo que sí existe en las instalaciones son dosímetros de campo que miden la radiación todo el año pero desde el Comité de Empresa insisten en que quieren conocer las radiaciones que reciben los operarios.

Los representantes de los trabajadores siguen sin conocer cuáles son las causas que han motivado la apertura del expediente de apercibimiento a una empresa que en los tres últimos años se le han acumulado también problemas de seguridad e higiene tras la detección de metales pesados (mercurio y arsénico) en sangre y orina de un buen número de operarios.

Al calificar como “leve” el incidente registrado la normativa en vigor, que data de la Dictadura franquista, excluye medidas como la anulación de licencias y permisos o concesiones, la suspensión de los mismos por el tiempo preciso para remediar la alteración advertida, y se inclina hacia una multa. Si es así y con ese reglamento radiactivo en la mano la multa llegaría a los 30.000 euros (o 5 millones de pesetas si se tiene en cuenta su literalidad).

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) se vio obligado a actuar tras una denuncia presentada por los delegados sindicales de Comisiones Obreras. La visita de los inspectores del CSN se produjo en noviembre y se levantó acta. El Consejo de Seguridad Nuclear ha informado ahora que durante esta visita a una zona en la que trabajan a diario una decena de operarios se detectaron una serie de incumplimientos que han dado lugar al apercibimiento del titular de la instalación, según lo establecido en la Ley 25/1964 de 29 de abril sobre Energía Nuclear.

Los delegados sindicales de CC OO habían presentado una denuncia por manipulación indebida de equipos radiactivos contra Mina de Aguas Teñidas. En ella se advertía que los trabajadores llevan años desarrollando sus labores con fuentes y equipos radiactivos sin ser personal autorizado para poder desarrollar estas funciones. Incluso denunciaron ante Matsa el hecho de carecer de formación para estas peligrosas tareas así como las carencias de medidas preventivas tanto de seguridad como de salud recogidas en los protocolos de actuación en equipos radiactivos asignados para la empresa en cuestión por el CSN.

La denuncia explicaba que las actuaciones (precarias) se realizan normalmente en turnos de mañana, tarde y noche y en jornadas continuas los 365 días del año. Y apuntan los delegados sindicales que “no se recogen en un diario de operaciones actualizado, sellado y registrado por el Consejo de Seguridad Nuclear”.

La carta enviada por los trabajadores al CSN añadía que no se cumplen los protocolos de actuación exigidos en fuentes radiactivas y se supera con creces los tiempos de exposición a estas fuentes por parte de los operarios instrumentistas destinados en esta área de laboreo.

Los trabajadores han ofrecido y puesto en manos del Consejo de Seguridad Nuclear todo tipo de pruebas, vídeos, fotografías, partes de trabajo que, a su juicio, demuestran todos los incumplimientos.