Acusa al Juan Ramón por provocarle un "terrible" dolor crónico tras una operación de rodilla

Reclama además que le niegan que un ATS o enfermero visite su casa para inyectarle la solución de opiáceos con la que tendrá que sobrevivir el resto de su vida

A Domingo Limón, de 45 años de edad, hace tres años y medio que le cambió la vida. Este barrendero que trabajaba para el Ayuntamiento de Aljaraque cogió una baja al sentir dolor en una rodilla, su situación debería haber mejorado con el tiempo, pero la realidad es que hoy día se encuentra postrado en una cama y solo se mueve con una silla de ruedas, todo ello, como consecuencia de una operación en el Hospital Juan Ramón Jiménez que el considera que fue "negligente".

Este vecino de Huelva capital, ya ha puesto una gran cantidad de documentación en manos de su abogada para llevar a cabo una denuncia por negligencia con la que espera señalar al jefe de traumatología del Juan Ramón Jiménez y al centro hospitalario por lo que considera que le ha causado un dolor crónico.

Además, recientemente, Domingo Limón ha interpuesto otra reclamación contra el SAS ya que durante meses ha recibido la visita diaria de la ambulancia con un técnico ATS o enfermero que le inyectaba los opiáceos necesarios para soportar el dolor, sin embargo, ahora, desde el centro hospitalario, le exigen que vaya al hospital a inyectarse ya que no le hacen nuevos traslados con médicos a su domicilio "y yo no puedo moverme y es dolorosísimo el transporte", denuncia.

La confusión en el diagnóstico parece haber sido lo que ha lastrado la vida de este paciente que pasó de tener un supuesto desplazamiento del menisco a tener, tras la operación y posterior visita a médicos privados, la Enfermedad de Sudeck, o síndrome de dolor regional complejo (CRPS) que es una condición de dolor con ardor intenso, rigidez, inflamación y cambio de color que, con mayor frecuencia, afecta a las extremidades.

La denuncia vendrá respaldada por los informes médicos privados que han sido los que han detectado los verdaderos problemas y complejidades que tiene la lesión de Domingo y que ya no solo afectan a la rodilla, sino a la columna (zona lumbar) con artrosis entre la L2 y la L5 y pinzamientos en las vértebras L3 y L4, que no le fueron diagnosticadas en su momento según relata.

Concretamente, el paciente presentará como pruebas informes del Hospital Quirón de Sevilla y de la clínica Costa de la Luz de Huelva en el que se informan de sus graves dolencias tras la operación.

Pero lo peor de estas consecuencias es que finalmente se trata de "un dolor crónico" del que jamás se podrá desprender motivo por el que pedirá una indemnización en una demanda que interpondrá contra el Hospital y contra el jefe de traumatología del hospital según ha señalado en declaraciones a Diariodehuelva.es

Según el propio paciente, en las primeras revisiones que ha hecho el abogado de toda la documentación hay base suficiente para interponer una demanda por negligencia, aunque su mayor preocupación por ahora es la imposibilidad de inyectarse los calmantes en casa, por lo que "después de 25 años cotizando me siento abandonado por la Seguridad Social".

Domingo Limón asegura que el dolor es "insoportable" razón por la que permanece prácticamente todo el día en una cama, mientras que por momentos se traslada en una silla de ruedas. "Me han destrozado la vida", afirma.

El próximo 19 de diciembre, Domingo Limón tiene consulta fijada en Sevilla en la Unidad del Dolor para intentar paliar en parte las fuertes consecuencias de su enfermedad, mientras tanto luchará en el ámbito privado por obtener calmantes para su dolor físico y en los tribunales para quitarse de en medio el dolor moral que le ha causado la sanidad pública.