jueves. 28.03.2024
El tiempo

Moreno aprecia una mayor preocupación medioambiental en Huelva a causa de las balsas de fosfoyesos

El periodista Rafael Moreno aprecia que ha habido un cambio de tendencia tras el caso de las balsas de fosfoyesos gracias a los ayuntamientos democráticos, la existencia de un conflicto y la movilización ciudadana en Huelva.
Moreno aprecia una mayor preocupación medioambiental en Huelva a causa de las balsas de fosfoyesos

El periodista Rafael Moreno aprecia que ha habido un cambio de tendencia tras el caso de las balsas de fosfoyesos gracias a los ayuntamientos democráticos y los mensajes transmitidos por las autoridades, ha crecido "la preocupación por el medio ambiente y la destrucción del entorno", y en Huelva se "pasó del silencio a los conatos de protesta y una gran movilización ciudadana".

Así lo ha puesto de manifiesto durante el curso 'Fosfoyesos: de su evaluación ambiental como residuo a su revalorización como recurso', que, dirigido por el profesor de la Universidad de Huelva Rafael Pérez López, se imparte en el marco de los cursos de verano que la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) celebra en su sede de La Rábida, en Palos de la Frontera.

Durante su ponencia, el periodista, que ha observado como redactor en distintos medios la evolución del problema medioambiental de Huelva desde los años 80 hasta hoy,  ha hablado sobre la utilización de la prensa, la mercantilización informativa y cómo "el interés por el control y la influencia en los medios de comunicación de Huelva es fuerte", una situación que "salta por los aires con la pérdida de la capacidad de influir, la crisis del papel, la importancia de lo audiovisual y el uso de las nuevas tecnología de la información y redes sociales".

Moreno ha profundizado sobre la inmediatez del mensaje transmitido y ha comentado que "hoy, con internet, hay una ciclogénesis explosiva, los generadores de confusión, los manipuladores de datos, los ocultadores de informes, los compradores o vendedores de información tienen hoy otros competidores".

Por otro lado, ha contado qué cobertura tuvo en prensa la primera rotura de la balsa de fosfoyesos. "En 1998 se rompió la balsa de fosfoyesos por primera vez, y apareció muy poco en prensa, y muy mal", ha apuntado, y ha abogado por imaginarse "hoy aquel acontecimiento retransmitido al momento, por decenas de periodistas, en vivo y en directo para todo el mundo".

A su juicio, fue "el conflicto y la protesta la que provocó la reacción del poder. Aunque solo fuera al principio, para cambiar algo y que todo siguiera igual, la realidad les arrolló". "El poder sólo reacciona ante tres situaciones: la celebración de elecciones, la alarma social y la existencia de un conflicto".

Ha agregado que los fosfoyesos han generado un impacto muy negativo en la imagen de Huelva, y así ha asegurado que "el impacto en la salud, los reportajes, los programas, la distribución de imágenes en los medios de comunicación locales y nacionales ha sido fuerte, y también el salto de lo local a lo global, que ha propiciado la intervención de organizaciones ecologistas en el asunto de los fosfoyesos", sobre el que, en su opinión, las instituciones actúan como si el problema no existiera.