jueves. 28.03.2024
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Zufreños en las Guerras de Ultramar: de Cartagena a Puerto Rico

El historiador Santiago González Flores aporta datos sobre la participación de los vecinos de Zufre en las guerras españolas en ultramar
Zufreños en las Guerras de Ultramar: de Cartagena a Puerto Rico

Recientes investigaciones documentales han relanzado el interés por la vida y experiencias de los onubenses en acontecimientos bélicos recientes. Entre ellos, ha destacado el impulsado por la Asociación Cultural Lieva, mediante el cual Jesús Ortega ha dado a conocer la participación de su abuelo, el cachonero Rafael Navarro Tovar, en la Guerra de África.

Al hilo de esta línea investigadora, siguen apareciendo datos como los aportados por el historiador Santiago González Flores respecto a los vecinos de Zufre que formaron parte de tropas españolas en ultramar. Al menos una docena de zufreños participará en diversas etapas, entre 1850 y 1898, en las guerras y revueltas que asolaron las últimas colonias españolas.

La mayoría de ellos han quedado como figuras desconocidas para sus vecinos y según Flores, “serán ejes de una falsa realidad sazonados por arengas patrióticas que ponen de manifiesto la decadencia de una sociedad y un sistema, un esfuerzo titánico de vidas que marcan la frontera de un Imperio que ya sólo existía sobre el papel y una clase política corrupta, sucia y grotesca”.

Entre todos, destaca el zufreño Antonio Brito Romero, soldado por el Distrito Militar de Andalucía, que jura bandera en la 4ª Compañía de Infantería de Marina el 15 de marzo de 1860 y que, tras diversas vicisitudes, pasa por multitud de destinos, entre ellos el Ferrol y Cartagena.

De Cartagena parte el 27 de octubre de 1863 con destino a Puerto Rico, llegando el 21 de noviembre. Villa de Poma, Samania y otras tantas son las plazas aún españolas donde recaba su Compañía. Participa activamente en la defensa de ésta última bajo las órdenes del Teniente Coronel Federico Salcedo. De hecho, tomó parte el 10 de diciembre de 1863 en la defensa del Fuerte de Cacaos, situado en la Bahía de Samaria donde consiguen reducir al enemigo.

En el día de fin de año de 1863 es uno de los miembros de la Columna contra el Cantón de Puerto Palandra, lugar que consiguen recuperar. Desde febrero a septiembre de 1864 toma parte en diversas batallas, trifulcas y defensas de posiciones españolas que en cuestión de días u horas pasan de uno a otro bando.

El historial militar de este vecino en ultramar concluye en 10 de septiembre cuando en Comisión de Servicios opta por pasar a continuar sus servicios en la provincia de Huelva.

Estos datos recabados de archivos y otras fuentes, sirven a González Flores para indicar que “Antonio es un claro ejemplo de una parte de nuestra más desconocida historia, esos jóvenes serranos onubenses que cambiaron las mejores dehesas de nuestra Sierra, sus pueblos y sus vidas por, en algunos casos, la muerte y el olvido en tierras que a pesar ser españolas siempre nos fueron extrañas y lejanas”.

Esta efervescencia investigadora continúa impulsada por Lieva y otras instituciones, y ya se tienen datos de la existencia de una detallada historia de la primera Guerra de África escrita en verso por un cachonero.